Cap. XV. Después de la Calma viene la Tormenta.

241 20 1
                                    

El resto del fin de semana paso tan rápido y tranquilo como se podía esperar, Hinata al final se quedo en la casa de Sasuke para sorpresa de sus amigas y claro recibió un fuerte regaño por parte de su madre al momento de contarle aquello, por lo cual ahora estaba descansando sobre su escritorio recordando todo lo dicho la noche anterior.

"No se para que le dije que me había quedado con Sasuke-kun, estará muy molesta todavía..." Pensaba algo triste la ojiblanca, el resto de sus compañeros estaban en el descanso y el rubio se había llevado al pelinegro con la excusa de que tenia que contarle algo muy importante.

-Hina-chan?!- Se escucho una voz femenina desde la entrada del salón, la ojiblanca abrió pesadamente los ojos miro a la chica, no pudo reconocerla. –Si eres tú...- Dijo contenta caminando hacia la chica que seguía sin comprender de quien se trataba.

-Disculpa... Me conoces?- Pregunto suavemente sentándose correctamente en su lugar.

-Sumimasen...- Dijo la chica sonriendo, se detuvo frente a la ojiblanca y con su extremadamente largo cabello se inclino un poco para luego abrazar a la chica. –No me reconoces?- Murmuro todavía abrazada al cuello de la chica.

-Iie... No te recuerdo...- Dijo algo nerviosa ahora. –Gomen...-

-No importa... Han pasado unos cuantos meses- Dijo soltando a la chica, se alejo unos cuantos pasos y se coloco frente a la ojiblanca. Esta chica tenía el cabello de un tono plateado hasta el suelo, su cuerpo era muy voluptuoso, una silueta bastante diferente al de Hinata, sus ojos de un tono violeta oscuro le daban un aire de intriga, ahí pudo reconocer a dicha chica.

-A..Akane-chan?!- Dijo incrédula la ojiblanca poniéndose de pie, la peliplata solo pudo asentir y riendo escandalosamente volvió a abrazar a la chica que ahora si le regresaba el abrazo.

-Sabia que lograrías recordarme...- Murmuro divertida la peliplata sentándose en el puesto contiguo de donde se encontraba la ojiblanca. –Me acaban de transferir...-

-Y quedaste en este grupo?!- Dijo algo sorprendida la ojiblanca, pero la peliplata negó con la cabeza escuchando la campana.

-Nos veremos en el próximo descanso...- Dijo poniéndose de pie y corriendo hacia la entrada. –Búscame si? Estoy en el salón de arriba... Justo encima de ti....- Y diciendo esto la chica se marcho dejando a una sorprendida pero confundida ojiblanca.

"Akane-chan... En el instituto..." Pensó dejándose caer en su lugar, intentando controlar aquella extraña sensación que llenaba todo su cuerpo. Vio entonces a un gran número de chicos de su salón murmurando y por lo que podía interpretar era sobre su recién descubierta nueva compañera de instituto.

"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"ooOoo"

Sasuke estaba bastante irritado por la constante interrupción de las chicas de todo el instituto, de no ser porque entraron nuevamente al instituto a uno de los últimos pisos del edificio el rubio no habría podido terminar de hablar.

-Ne teme que debo hacer ahora...- Dijo luego de unos minutos de silencio, el rubio de verdad que parecía bastante confundido y lo peor es que como al principio la chica se le escondía.

-Hmp- Sasuke gruño y cruzándose de brazos giro su rostro hacia otra dirección. –Dobe... Deberías atraparla en algún sitio y obligarla a escucharte...- Dijo seriamente sorprendiendo al rubio que lo miro incrédulo.

-Estas loco teme?!- Dijo entre alarmado y confundido. –Como voy a hacerle eso... Ella es... Ella es muy...-

-Oblígala a que enfrente lo que dice y lo que hace...- Dijo sereno volviendo sus ojos negros hacia el rubio que suspiro cruzándose de brazos. –A menos que haya sido malo...- Reflexiono suspirando.

Viviendo entre MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora