Allyson: Después de mi primer amor [02]

23; El

Estoy re pendeja, subí un capítulo que no era, sorry

Maratón ⁴|⁴, Final de maratón.

Empecé a correr rápidamente, empujé las puertas y vi a varias personas en la sala de espera, me sobresalté cuando vi que varias personas lloraban, no sabía quienes eran pero sabía muy bien que eran familiares de el.

— ¿Tu eres Allyson? — me giré al ver una señora de unos cincuenta años hablarme — No dejaba de preguntar por tí — ella lloró más, mojando sus arrugadas mejillas.

— ¿Como esta el? ¿esta bien? — pregunté rápidamente asustada sintiendo como el nudo de la garganta se empezaba a formar, llegando ser incomodo.

— No lo sabemos aún.

— ¿Como está el? — una voz chillona rugió, volteo y veo a una chica preguntar al doctor que apenas iba acercándose.

— ¿Son los familiares? — todos asintieron — Fue muy grave el golpe, tendrá que recibir dos operaciones demasiadas complicadas, podrá sobrevivir si resulta bien, pero sí no, temo que no podrá tener manejo de sus piernas, estará postrado en silla de ruedas lo más fuerte que sucedería sería que no sobreviva...Lo lamento.

Fue cuando me permití llorar, el era buena persona, el no merecía esto.

Qué sucedió para qué esto le sucediera esto a el.

24 horas antes de lo ocurrido
—

Presente.

— Después sentí ganas de echarme una flatulencia y lo hice al ritmo de la música hasta que me di cuenta qué tenía audífonos — casi escupo la leche qué me tomaba al oírlo. Nos carcajadas no tenían piedad y hacían retorcerme mientras limpiaba las lágrimas que había soltado.

— Eso es tan asco — ríe Merlyna.

— Tan mierda — dice Leah ríendo.

— Define mierda — dice Ethan empezando a comer su puré de papá.

— Tú, por ejemplo — digo yo y segundos más todos se ríen.

— Qué graciosa estás hoy en día.

— Ya vez — guiño un ojo y sonrió.

— ¿Tal vez será que mañana es tu primera cita con Sam? — me mira atentamente Merly mientras sonríe coquetamente.

— Puede que sí, puede que no — nadie me podrá borrar está sonrisa.

— ¡Usas condón! — aplaude Noah mientras se señala con advertencia — nada de hijos por ahora.

— ¡Oigan esperen! Esto resulta asqueroso al pensar que tendrás relaciones con mi hermano — dice Merlyna haciendo una mueca.

— ¿Tendrás sexo con el? — pregunta Leah mirándome sorprendida.