¿Este es nuestro destino?

Capítulo 3

Quinta parte.

Pov. TN.

Comencé a correr sin importarme hacia donde me dirigía, solo necesitaba correr y correr. Cada vez apresuraba el paso hasta que finalmente me quede sin aire; desacelere el ritmo y cuando pude percatarme, estaba en el parque donde antes venia con él. Me senté en una banca intentando recuperar el aliento pero mis recuerdos persistían en atormentarme.

Flash back.

Semanas después de la fiesta.

Para muchos fue un día normal, pero fue el peor para mí.

Y aquí estoy de nuevo, en el mismo parque donde me declaro su amor, donde nos dimos nuestro primer beso y compartimos infinitos momentos.

Me senté en una banca contemplando el atardecer. Note que alguien se acercaba, cuando gire pude verlo, me quede en silencio y regrese mi mirada a la puesta de sol. No dijimos nada hasta que el sol se oculto y él decidió hablar.

- Aunque nuestro amor acabo, aun no puedo olvidarte. Sigues aquí, en mi interior. Sueño con verte regresar y tan solo... Te espero. Nada cambio, todo sigue aquí dentro... - Tomo mi mano llevándola a su pecho y nuestras miradas se cruzaron. - ...de mi corazón.

Quite mi mano y me puse de pie mientras lo observaba. Las ganas de llorar golpeaban fuerte pero aun así no lo haría, no delante de él.

- Da igual cuanto quieras endulzar tus palabras, incluso si te arrepientes es demasiado tarde Jae Bum - Me sentía completamente vacía al hablarle. Un nudo en mi garganta se hizo presente, me marche rápido, necesitaba beber algo.

- Estoy arrepentido, ¡Lo siento! - Grito mientras pateaba un tacho de basura cercano.

Llegue a una maquina de bebidas, había un chico esperando, intente limpiar mi rostro mientras aguardaba que la bebida cayera. Me dirigí a una banca cercana, necesitaba calmar mi angustia. No debía estar así por su culpa, ¡No ahora!

Bebí hasta la mitad de un solo trago. Me di cuenta que aquel chico se acercaba en mi dirección, luego de visualizarlo mejor note que se trataba de Jin Young. Se detuvo cuando llego a la banca, sentándose a mi lado.

- ¿Por qué? - Susurre con un hilo de voz conteniendo las lágrimas, ¿Por qué debe ser él quien aparezca en estos momentos? No articulo ninguna palabra, solo se acerco y me extendió los brazos para que llorase en ellos. No me negué, simplemente deje que sus brazos me acobijaran, necesitaba sentirme cuidada. Su calor me envolvió logrando que poco a poco comenzara a sentirme mejor. Solo pude decirle un par de palabras en ese instante. - Por favor no me dejes sola. Por hoy no trates de conquistarme - Mis manos apretaron su camiseta mientras hundía mi rostro en su pecho.

Luego de un rato retome mi postura apartándome un poco, no sabía cuánto tiempo estuvimos abrazados, la luna ya se hallaba en la cima. Limpie mi rostro y le susurre un simple "gracias". Ofreció acompañarme hasta casa, tampoco me negué a ello.

En el camino me fue inevitable no sonreír y reír de cada cosa que hacía. Por un momento me sentí completa y cuando me di cuenta ya habíamos llegado a destino. Se despidió moviendo su mano pero por dentro tuve la extraña necesidad de acercarme.

Cuando note que comenzaba a caminar lo detuve. Me acerque a él besándole la mejilla y seguido de esto corrí hacia adentro de casa. Cerré la puerta mientras me apoyaba en ella, sentí a mi corazón latir intensamente, trague pesadamente cerrando con fuerza mis ojos.

- No te confundas. Es solo un molesto niño... nada mas - Dije en un susurro.

Fin del flash back.

Me levante de la banca donde me encontraba con la cabeza baja. Empecé a caminar cuando choque con alguien, me incline disculpándome rápidamente. Comencé a correr hacia casa. Necesitaba distraerme con algo... o alguien.