Veintiuno 🌸

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Mi alarma sonó a las 3:30 AM. Debíamos vestirnos para partir al aeropuerto pero Francisca ya estaba despierta, de hecho no había dormido nada.

-Ya nos vamos Kay? -Dijo entrando en mi pieza-

-¿Estás lista?

-Desde que nací -Rió-

Me levanté y me dirigí al baño, me daría una ducha antes de salir. Hacía frío así que di el agua a máximo calor y al salir me abrigué bien. Unos botines, un vestido, chaleco y Bufanda.

Teníamos hambre así que quise bajar a tomar ¿Desayuno?...

Bajé y me llevé la sorpresa de que mis padres estaban despiertos, mamá estaba haciendo Hotcakes con miel y papá hacía café con leche.

-Buenos días hija!

-Buenos días mami, ¿Que haces despierta a esta hora? Mañana entras temprano a trabajar.

-No podían irse del país sin un buen desayuno, además, nos volverás a dejar y esta vez, junto a Francisca.

Hizo una mueca de tristeza y yo la abrazé, sentía culpa en ese momento pero no quería hacer sentir mal a mi mamá así que la abracé y le besé la frente

-Serán solo tres días mami, volveremos, te lo prometo.

Mamá nos sirvió a Francisca y a mi dos grandes platos de Hotcakes y nutella, estaban muy buenos. Hablamos sobre los lugares que conoceríamos y mamá nos recomendó algunos. Ella en su juventud conoció Miami pero por un corto plazo.
Terminamos de desayunar en familia y se ofrecieron a llevarnos hasta el Aeropuerto, ya eran las 04:00 Am. Subimos las maletas al auto de papá y fueron a dejarnos hasta allá.
Al llegar los chicos ya habían llegado, papá insistió con llevar la maleta hasta el porta equipaje mientras mamá suplicaba a los chicos que me cuidaran bien.

Toda TuyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora