IDENTIDAD ROBADA SR. GREY © COMPLETA

CAPÍTULO 20

Maratón 🙈🎉🎉🎉  1/3

POV CHRISTIAN

Estoy feliz, Anastasia asumió que gusta de mí, daré todo por que esté matrimonio funcione. Se que debemos enfrentarnos a mi familia, la de ella y el principal problema creo que será Matt, no ha dejado de llamarla, ya me está cansando y a ella le causa gracia, dice que tenemos horas de casado y asumí muy rápido el papel de esposo celoso.

Su celular vuelve a sonar, ella lo va a atender y le pido que ponga en altavoz, rueda los ojos ante mi pedido pero finalmente lo hace.

— ¿Qué quieres Matt? — dice al atender.

— Quiero hablar con mi novia, nada es lo que parece cariño, fui llevado  engañado a ese sitio, te lo juro — parece angustiado, repito parece, no creo que sea así.

— Ya no importa, ni me interesan tus explicaciones, y otra cosa, ya no eres mi novio, ahora otra persona está a mi lado — dice mi esposa mirándome a los ojos, suena muy lindo, ella es mi esposa.

— ¿Qué? — se escucha a un Matt furioso tras el teléfono — Ya sabía yo que eras una maldita zor... — lo interrumpo valiéndome madre lo que piense, a mi mujer no le va a faltar el respeto.

— Cuidado como le hablas a Ana, ella no está sola, tiene quien la defienda de idiotas como tú — le digo furioso. Mi nena agacha la mirada pero aún así veo sus ojos con lágrimas, la atraigo a mi pecho abrazándola.

— ¿Christian? ¿Qué haces tú con mi novia? — dice con desdén.

— ¡Qué no soy tú novia! — bufa Ana — Mejor ve a follar o a que te den por el culo si así lo prefieres, no molestes más — dice y corta la llamada, yo la miro sorprendido y aguantando la risa — ¿Qué? — me pregunta alterada.

— Nada nena — digo levantando mis manos en forma de rendición. Los dos nos miramos a los ojos y nos echamos a reír recordando sus palabras, una vez más calmados tomo su cara suavemente — Se que va estar brava la cosa en cuanto lleguemos a Seattle pero no te dejare sola en ningún momento ¿ok? — le digo con ternura, ella asiste despacio, le doy un pico en sus suaves labios.

Vamos hablando hacia el gran comedor de el hotel, allí nos encontramos a unos muy acaramelados Kate y Elliot, cuando ven nuestras manos entrelazadas sus sonrisas se hacen más anchas de las que poseían.

— Bueno hermano, por lo que veo, me devolviste a mi querida cuñada — dice un Elliot pícaro.

— Luego hablaremos de ésto — dice mi esposa levantando su mano y señalando su alianza. Ahora que lo pienso al llegar a Seattle compraré un par de alianzas, no me gustan las que traemos ahora, con símbolos de pocker, mi esposa merece lo mejor y así será.

— Ok, luego hablamos — dice Kate con burla levantando ahora su mano, donde también posee una alianza, pero está es más bonita que la de Ana.

Los miramos sorprendidos, ¿aprovecharon la ocasión? ¿o lo planearon?

— Hola familia — dice una Mía con vos cantarina, me estoy acostumbrando al terremoto que tengo de hermana menor.

— Hola — respondemos los cuatro a la vez. Corro la silla para que Ana tome asiento, me lo agradece con una sonrisa que ilumina mi día.

— Buenas — dice un Ethan, viene pálido hacia a nosotros, no quita su mirada de Elliot y de mí — Tenemos que hablar y desde ya les digo que no fue nuestra intención.

— ¿ De que hablan? — dice Ana.

— Nos casamos — dice en un susurro apenas audible para nosotros.

— ¿ Qué cara...? — comienza Elliot.

— ¿Carajos dijieron? — interrumpo y termino diciendo.

— No sabemos ni cómo, pero amanecimos durmiendo juntos, con alianzas y un acta matrimonial en la mesita de noche con nuestros nombres en ella — explica Mía entre sollozos. Anastasia se levanta y la envuelve en sus brazos, mientras que Ethan le acariciaba la espalda con ternura. Yo por mi parte estaba en shock, pero no podía juzgar a nadie, ya que yo también termine casado en está noche loca, pero no estoy arrepentido, no se qué opinan ellos de su unión.

— Tranquila princesa ya veremos que hacer, decidan lo que decidan tienen mi apoyo, ambos — le digo y acaricio la mejilla de mi hermanita.

— Nos divorciaremos — dice Ethan, Elliot lo mira sorprendido al igual que todos, menos Mía que entierra su cara en mí cuello sollozando. La aprieto más a mí, tratando de consolarla — A ella hay alguien que la espera en Seattle y eso no lo podemos obviar — termina diciendo, pero puedo notar algo extraño en su voz, me arriesgo a decir que es tristeza.

Elliot mira hacia mí persona, y me hace una seña de que quiere hablar conmigo, asiento y hago que Mía tome lugar en una silla al lado de mí nena. Dejo un beso en la frente de mi princesa y otro en la de mi reina de ojos azules, echo ésto me dirijo hacia un balcón en compañía de mi hermano mayor.

Él se queda mirando hacia el paisaje que se encuentra al frente nuestro, dejo que se pierda un poco en sus pensamientos, es difícil asimilar la noticia que un vieje terminamos todos los hermanos Grey casados, bueno no todos.

— Yo ésto si que no lo planeé... —

— ¿ Cómo? — pregunto descolocado.

— Yo planeé que terminaran casados tú y Ana — eso sí que me sorprende, pero se lo agradezco —Lo que no imaginé es que nuestra niña iba a terminar también casada —

— Lo mío con Anastasia te lo agradezco mucho hermano — me mira con una sonrisa picarona — Realmente ella me gusta del primer momento en que la vi, voy a dar todo para que esté matrimonio funcione Elliot, no quiero que se arrepienta de estár a mi lado — digo decidido, ella es mi mujer, mi esposa y nadie excepto ella misma me va a alejar de su lado.

— Me alegro mucho por ustedes hermanos —

— Por cierto, felicidades por tú boda hermano — digo abrazándolo y dándole palmadas en su espalda — Tenemos que atenernos a lo que nos espera en nuestra casa, nos va a matar nuestra madre — sigo riendo, él me acompaña.

— Me debes otro abrazo de felicitaciones Christian — dice aún sonriendo.

— ¿Y éste de que sería? — pregunto curioso.

— Vas a ser tío hermanito, Kate está embarazada...

40 🌟 y subo el próximo.

😘😘 Miru