C u a t r o

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Akutagawa se dejo arrastrar unas cuantas cuadras, sin embargo al momento de reaccionar simplemente se detuvo de golpe, zafandose del agarre de su acompañante.

– ¿Qué crees que haces? – Se quejó, casi gruñendole al omega quien solo parpadeo un par de veces. Se le olvidaba la personalidad negativa del otro, gh.

– Crei haberte dejado claro que no quiero tener nada que ver contig-- – Intentó seguir, sin embargo, Atsushi lo interrumpió.

– ¿Por qué no? – Ladeó la mirada cual cachorro curioso, cosa que dejo pensando al alfa.

– . . . Porque no. – Soltó como si nada, dejando al omega en blanco.

– ¿Ni siquiera intentarlo? Al menos para que ellos dejen de insistir. – Se rasco la nuca el peliblanco, buscando la manera de hacer ceder al otro.

– . . . – El alfa suspiró resignado, antes de comenzar a caminar esperando a que el otro lo siguiera. – Te quiero al menos cinco pasos alejado. – Gruñó.

Atsushi se tardo en procesar aquello ¿eso quiere decir que acepta la salida? al menos es algo. Asintió de manera rapida, antes de acercarse bastante al pelinegro, irritando al mismo para posteriormente caminar hacia atras contando cada paso hasta llegar al quinto. Se tomó bastante literal lo que dijo el otro.

Akutagawa suspiro, anda ya ¿cómo lidiar con ese tipo de personas? Demasiado infantil para su gusto.

– Iremos a comer, daremos un par de vueltas, regresaremos, haremos como que ya nos llevamos bien y luego espero que no nos volvamos a ver. –

Como destruir la esperanza de Atsushi en un paso. Aunque...

Aquello no tenía sentido, si se llevaban bien los otro dos aumentarían sus ganas por juntarlos, aunque no diria eso, seguramente el otro se arrepentiría de salir con él por lo que, nuevamente, solo se digno a asentir.

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– ¿Siempre eres así de callado? – Cuestiono un tanto incomodo Atsushi.

– Mhn. – Asintió el otro, mirando a cualquier direccion menos al otro, quien solo se dedicaba a comer lo que habia pedido. Y fue ahí cuando notó otro detalle; el pelinegro no habia comido nada.

– ¿T--? – Ni siquiera alcanzó a hablar cuando el otro respondio.

– No me gustan las cosas dulces.

– . . . ¿Cómo supiste l--?

– ¿Lo que ibas a decir? Eres muy predecible y lento, es fácil saber lo que vas a hacer a continuación.

Bufo, antes de tomar su plato con aquel postre y arrastrarlo por la mesa hasta dejarlo frente al omega; sí, le estaba dando su comida. – Come y calla, eres molesto.

Together {Shin Soukoku} [AkuAtsu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora