Adaptación

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"A veces, un café entre dos personas, con risas y confesiones, puede hacernos descubrir que las conversaciones pueden ser el puente que conecta dos almas perdidas en el laberinto de la vida."

Capítulo 8

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Capítulo 8

Increíblemente, habían pasado 15 días desde aquel incidente con Calev.

Había practicado todos los días después de clases, aventando mis zapatos e intentando detenerlos, levantarlos, también intenté con mi mochila, mis libros, mi cama, e incluso abrir mi casillero-armario sin tocarlo. 

Cuando busqué en internet sobre esta habilidad, encontré varias cosas interesantes. En primer lugar, que la telequinesis era una habilidad mental que permitía manipular objetos físicos sin tocarlos. Esta se lograba a través de la generación de una energía psíquica que se transmitía desde el cerebro a los objetos, permitiendo su movimiento y levitación.

También, decía que la energía psíquica sería generada por una parte del cerebro que normalmente no se utilizaba, pero que en personas con habilidades telequinéticas estaría altamente desarrollada. Esta parte del cerebro, genera tal energía y recorre el cuerpo a través de los nervios, y a través de estos, liberarla para la manipulación de objetos físicos.

Sin embargo, decía que podía ser influenciada por factores externos, como la concentración, el enfoque mental y la meditación, y que podría mejorar a través de la práctica y el entrenamiento. 

Por eso, busqué un compendio completo en una plataforma de vídeos, todo sobre meditación y enfoque mental. Y ahora, mi entrenamiento iniciaba así: una hora de meditación, donde intentaba concentrarme en mi respiración y las sensaciones de mi cuerpo, me llevó al menos cinco días sentir la energía psíquica en mi cuerpo, pero lo logré. Luego de dejar que esta recorriera, en diferentes grados por una buena cantidad de tiempo, reteniéndola, a la siguiente hora, me concentraba en liberarla para levantar algún objeto de mi cuarto, sin que hiciera ruido y que se posicionara nuevamente en el mismo lugar. 

Al principio, con los objetos de vidrio, estallaron, por lo que la excusa principal había sido que se me habían caído de la mano, cuando mi mamá y mi papá se asomaban a mi cuarto preguntando que había pasado. Eso llevó a que mi mamá se encargara de solicitar mis perfumes o todo material de vidrio, que fueran trasvasado en envase de plástico. con los objetos livianos no había demasiado gasto de energía, pero con los objetos más pesado, como mi cama, había sido todo un esfuerzo mental que terminaba con dolores de cabeza, o sangrando mi nariz. 

En cambio, la clave con los objetos que no se quisiera levitar, sino hacer acciones especificas, como abrir una cerradura, una puerta, encender un televisor, la calefacción, o un auto, ameritaba de suma concentración y de entendimiento como funcionaba dicho objeto. Y para eso, debía enviar mi frecuencia psíquica, para mapear primero el objeto, sus componentes y su mecanismos, y seguido de ello, comenzar a mover las piezas claves para que hiciera la acción que necesitaba. 

Instrumento: Galica #POFG2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora