INSPIRACIÓN

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No cambiaría algo tan bello,
como sentarme a los pies de un árbol,
y escuchar lo que su silbante,
cálida brisa tiene que confesar,
confesar de aquellos que acudieron a el a llorar,
a soltar toda la pena retenida,
era el único que con suavidad removía sus llantos.

Yo acudo a él,
me siento tan bien cuando mis pies,
tocan el césped a su alrededor,
y saco la vieja libreta que siempre cargo,
admiro el mejor lado de la desdicha,
y escribo acerca del amor que nunca llegará,
o escribo sobre el amor que si llegó.

La mitad del arte en el mundo,
son inspiraciones,
¿Dónde hallaría algo como eso?,
incluso el basurero más pútrido,
tiene historias extensas que expresar,
sólo hay que obligarlo a hablar,
admirando hasta lo más horrendo de aquel lugar.

Me gusta tocar las caídas hojas,
esas que se cansaron de sostenerse,
y prefirieron dejarse libres,
estoy sintiendo como recuerdo cada cosa,
a cada persona que conocí,
los viejos amigos que se marcharon,
y con los nuevos que ahora rio.

Algunas vez quisiste ser alguien más,
no el patético muchacho,
que busca ideas detrás de un longevo árbol,
yo sí,
quería el mundo a mis pies,
sentir el amor de todos hacia mí,
fui un tonto, si fuera tan simple, eso ya no sería vivir.

Retome mi concentración,
fijé mi mirada en aquella libreta,
sólo para que la imaginación llegara,
se esfumó, la ingrata se marchó,
solamente quería encender un cigarrillo,
intoxicar mi alma,
y dejar que los demás ya no me importaran.

El viejo astro, cada vez se pagaba más,
y la luna de lejos,
ya se podía avistar,
Y antes de tomar impulso para levantarme de dicho lugar,
cogí la pluma y la desgasté,
escribí con rapidez lo que se me vino a la mente,
Y eh aquí el poema que escribí.

MI PROBLEMA CON LA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora