CUENTA CONMIGO

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Dejame tomar tu fría mano,
y entibiar tu sonrisa con mi aroma,
que sientas que acudes a mi,
si vez que el mundo llegó a su fin.

Yo domaré tus latidos,
y sostendré tus pesados aquejos,
al mundo entero dejaré perplejo,
verán que soy más fuerte que los Aqueos.

Sudando estoy bajo presión,
mantenerte a salvo es mi misión,
te lo prometí aquel día bajo el sol,
sere tu hombre protector.

Hay días que doblego la resistencia,
es por mi amada doncella,
por quien pierdo la conciencia,
que resisto, caído de rodillas pero persisto.

Serás tú quien quede de pié,
las lágrimas no rosaran tu piel,
no escucharan de tu tiernos labios,
exclamar ese fulminante dolor.

Pero entonces ocurre inesperadamente,
alguien llora descontroladamente,
me acerco, curioso,
era mi amada con sus ojos rojos.

Tonto fui al menor descuido,
no percibí sus agitados gemidos,
cogí sus fatigados brazos y rodie mi torso,
estuve en un silencio absorto.

No pregunté cómo estaba,
sería irracional tal imprudencia,
busqué su mirada con insistencia,
hasta que vi esa ternura apunto de quebrar.

No hallaba palabra alguna,
sólo me acerqué aún más,
ella sostuvo mi cuello sin presionar,
y cuando levantamos la mirada empezamos a llorar.


Hace mucho ya que no subía algo espero esté poema sea de su agrado, comenten si les gusto y vota de igual manera, besos y saludos a quienes leen mis poemas.

MI PROBLEMA CON LA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora