La Chica de San Valentin

Capt 15: A solas

Mientras esperamos en la sala de espera, 'valga la redondancia' el único que está con Luis es José, y con Jared se encuentra la Señora Eunice, ya es el siguiente día, dado esto,  aún no han dado de alta a Luis, y Jared aún no a despertado pero estoy rezando para que los dos salgan de ahí  cuanto antes.

...

Durante la madrugada y poco tiempo de la mañana cada quien fue a su casa a cambiarse y traer una mudada de ropa por si hay que esperar un día más a los chicos. En el hospital los doctores se han comportado muy bien con nosotros, no digamos los practicantes son muy jóvenes y muy inteligentes mis respetos para esa carrera y para ellos.

Hora 1:34 pm. Aun seguimos aquí sin resultados de Jared, en este momento cambiamos de turno para ver a los chicos, yo me dirijo con Luis, y Nathy va con Jared, Nathy lleva en sus manos un libro.

*Relata Nathy

Alas 9:00 am, Razón por la que sólo estemos nosotros ya que papá y mamá estan de viaje. Me dirijo con José a nuestra casa, entro directo a la cocina por un gran vaso de agua por el tiempo que pase en el hospital y de camino a casa, mi garganta se refresca, enseguida voy de camino a mi habitación, tomó unas toallas para la ducha, una grande para el cuerpo y una pequeña para mi cabello corto.
Tomó una mudada de ropa más por cualquier situación de que nos quedemos un tiempo más en el hospital, optó por unos vaqueros, una blusa sin mangas olgada, unas sandalias color nude y un suéter fresco color negro. Decido llevar el libro favorito de Jared, Pórtico, de Michael Farfand, tomo los auriculares que estan en mi tocador, una crema facial, y un broche color palo rosa, colocó en mi hombro un pequeño bolso para introducir todo lo que decidí llevar.

Bajo la primera planta para encontrarme con José quien ya esta listo.

-Iré por una botella de agua, ¡espera me!

-Toma otra, se la llevaremos a la tía S- dijo moviendo las llaves de la camioneta.

...

Llegamos al hospital, directo a la sala de espera donde se encuentra los padres de Jared y su hermana, acompañada de Lissa, y Cesar, dedujo que mi tía a de este con Luis. Me dirijo ala habitación 212 donde esta Jared, entro ala habitación despojandome del pequeño bolso que llevo con migo, lo colocó frente a una silla que este ala derecha de la cama donde esta Jared, me dispongo a sacar primero el libro seguido de la crema facial, para antes de leer dicho libro colocó un poco de crema en mis manos para así colocarla después en mi rostro.

Un calendario de pasos. El calendario andante. La fábula del a nadar del tiempo con los pasos del hombre. Naturales, lógicos, existentes y sin embargo, habitantes de mundos de otra categoría.

Término el párrafo de dicho libro cuyo párrafo se encuentra en la página No. 78, libro que Jared lleva leyendo 3 veces, me sorprende su paciencia por la lectura. Escucho unos pasos asomarse por la puerta de la habitación.

-Hola Nath, ¿como están?- pregunta Luis.

-¡Luis que sorpresa! Deberías estar en reposo todavía ¿no?- pregunto mientras me posicionó sobre mis pies.

-Descuida me siento mucho mejor, aunque con está bata no me siento tan atractivo que se diga- dice mientras toma un extremo de dicha bata.

-¿Seguro que estas bien? ¿No estás mareado? ¿Te duele algo?- me acerco a tocar su cabeza.

-Tranquila Nathy, estoy bien, lo único es que me pongo mal cuando veo a Jared ahí acostada sabiendo de que fui yo quien la golpee... ¡Y no! no digas nada tu no tienes la culpa, me imagino que tu querías que yo fuese con ella en ese momento- dice con una sonrisa mostrando dientes.

-¡Perdón Luis, en cerio yo no quise hacer eso! -cubri mi rostro.

-Ya no importa, sólo hay que esperar a que ella despierte sin ningún problema- dice tomando mi mano.

-¿Nath te... molesto si... Me dejas a solas con Jared?- dice tocando la cama cerca de los pies de Jared.

-No, no hay ningún problema, te quiero Luis. Los dejo solos- dije besando su mejilla.

*Relata Luis

Nath sale deje la habitación, despidiéndose de mi con una sonrisa, seguida de la mía.

-Eh... Hola Jared ¿como estas? Bueno yo te veo muy bien, no te podría mentir, tú, te ves bien con lo que sea, aun que sea con una bata de Hospital- sonrio, veo a mi alrededor para que nadie escuche lo que hablo con su cuerpo en reposo.

Se ve muy linda así, me gustaría mucho que estuviese despierta para decirle de una ves por todas lo que siento por ella. La veo una vez más seguido de eso me encaminó hacia la puerta, acerco mi cabeza por el marco de esta, me percató de que en el corredor no aya ningún alma. Me adentro en la habitación y cierro la puerta tras mía, sí, seguro por supuesto que no pienso violarla ni nada de eso. Solo quiero un poco de privacidad, a solas.

-Jared, hace tiempo de que... Bueno me a costado mucho en aclarar mis pensamientos por ti, pero ahora si esta claro lo que siento.

Me acerco muy despacio hacia su rostro, veo detenidamente sus rasgos, sus cejas seguido de sus hermosas y perfectas pestañas, unos cuantos lunares en su mejilla de lado derecho, estas siempre están es un tono color rosa suave, y no puedo dejar de ver sus labios tornados en un todo rosa con un perfecto arco de cupido. El dorzo de mi mano izquierda roza su mejillas haciendo que mi rostro se acerque al suyo lentamente, mis labios rozan los suyos, haciendo que en un pestañear, mis labios se unen con los suyos haciendo que estos encajen ala perfección. Hace tiempo que eh querio besar esos labios que por tiempo eh querido sentir junto a los míos, dándole a entender lo que siento por ella, aunque ella no sepa aún eso.
Los seguros más largos de mi vida, no pedo salir de este trance con sus suaves y delicados labio.

Dos toques en la puerta fueron suficiente para que yo saliese de ese trance, seguido de una voz exaltada diciendo mi nombre      

-¡¡¡Luis!!!