EL VECINO (HanHun)

7

- Luhan. -

- No, Sehun. Mi nombre es Jongin. Kim-Jong-In. -

- Luhan. -

El pequeño moreno chocó la palma de su mano contra su frente por tal vez octava vez en ese día. Su mejor amigo llevaba repitiendo esa palabra todo el día y ni siquiera sabía qué era. Su prodigiosa mente de diez años había llegado a la conclusión de que se trataba de un nombre pero aún no averiguaba a quién le correspondía. Ningún chico de su escuela se llamaba así y tampoco había alguna niña así que...

- ¿Luhan es el vecino chino? -

- Luhan eth un dethverngothado. - replicó el menor de ambos con un tenue sonrojo porque aún no podía asumir que el rubio le había hablado primero.

Se suponía que sería Sehun, que le pediría consejos y le enseñaría el barrio. En su pequeña cabeza montones de fantasías se habían formado y su joven corazón palpitaba por todas ellas. Se imaginaba un atardecer en las gradas de la pista de fútbol con un delicioso bubble tea y el mayor a su lado. ¿Le gustaría a él también la bebida? Esperaba que sí. Si a alguien no le gustaba no merecía ni respirar cerca suyo.

- Así que sí lo es... Vamos a hablarle. ¿Cómo has sabido su nombre? ¿Ya habéis hablado? ¿Qué más te ha dicho? - de su boca no paraban de salir más y más preguntas pese a que ya habían llegado a la casa del menor.

- Ya hemoth llegado. No me preguntesth máth cothath. ¡Adióth! - sin querer responder preguntas para las que no tenía respuesta, corrió por el camino de entrada que su madre había decorado con piedritas y se metió rápido a su hogar.

- ¡YO MISMO LE PREGUNTARÉ! - fue lo último que escuchó de su amigo antes de encender la televisión con un puchero.

Ojalá no le responda por negro, pensó.