Me prometí ser dura con ella y mantenerme en postura como lo hacia en plato frente al tema Blumettra. Pero no es lo mismo hablar de ello que tenerla aquí en frente después de tanto tiempo.
Perdí mi postura cuando me cogió la mano, no pude evitar tenerla aun mas cerca y la abrace. Ahora mismo era la Elettra de las primeras semanas en el concurso, no podia evitarlo.
Por un momento se me olvido la llamada y lo mal que lo pase por no tener un simple mensaje de ella.
-Que guapa estas- me dijo mirándome a los ojos con media sonrisa, parecía un poco triste.
Estaba a centímetros de mi cara. Me tocaba la mejilla como si yo fuese lo mas delicado del mundo y yo lo único que pude hacer es estremecerme por su tacto. Ella me miro con una mirada suave, por un momento vi dolor en su mirada.
Por mucho que me haya hecho sufrir no podia verla así. Tenia necesidad de darle cariño, algún gesto, y así lo hice. Toque su mejilla con las yemas de mis dedos mientras ella hacia lo mismo. Ella cerro los ojos y su cabeza se inclino hacia mi mano como si necesitara mas de mi.
-Nunca me buscaste- Mi subconsciente me traiciono y dije lo que he estado reprochando silenciosamente todos estos meses.
Ella abrió los ojos instantáneamente. Nuestras manos pararon de acariciar. Yo iba a retirar mi mano de su cara pero ella me la puso en el mismo sitio, con su mano encima de la mia.
-Pensaba que no querías volver a verme, que necesitabas tiempo- Su voz era cálida como yo la recordaba, su mano llevo la mia hacia abajo todavía agarradas.
Por desgracia el climax se habia roto cuando de repente entran dos chicas que parecían amigas al baño. Nos miraron raro por segundos por lo cerca que estábamos pero después siguieron a lo suyo.
*
-Mira es mejor que vayamos a otro sitio a hablar- dijo Eli que parecía con vergüenza.
- Creo que si-
Le dije a Aless que nos íbamos. Nunca me iba por nadie por tal de estar mas tiempo de fiesta pero con Elettra no se podia remediar, estaba claro que es mi perdición y que por ella doy todo de mi ser.
Salimos del club, la verdad es que hacia frío y no sabia donde íbamos a ir.
-Hace frío para estar hablando aquí ¿Quieres ir a mi hotel? Si quieres no hace falta ir a mi habitación, podemos quedarnos en...en si en el lobby porque hace frío y no se es que- que bonita era cuando se ponía nerviosita.
-Eli si ya te entiendo cariño, me da igual solo quiero hablar contigo ahora mismo. Pero mejor si es en la habitación-
-A vale- se le soltó una risilla.
Eli pidió un taxi del hotel. Mientras esperábamos fuera, ella parecía que tenia frío aunque yo también. Me quite la chaqueta de cuero y se la puse por los hombros.
-Toma nena, vayas a coger un resfriado- Ella me miro con cara divertida.
-Gracias, pero no quiero que lo cojas tu tampoco- me dijo mientras me la ponía de vuelta.
-No póntela tu, solo me basta con que me abraces-
-Alexandra- Me dijo con cara mas seria.
No entendía ¿Estaría cogiendo mas confianza de lo que ella me este dando?
-Bueno vale pero quédatela tu- Se la di otra vez.
-Es que quiero abrazarte, todo el puto tiempo ¿vale? Pero todavía sigo dolida, recuerdo todo. No puedo avanzar en mi cabeza hasta que no hable contigo.- dijo con dolor en su voz, en todo, en su mirada.
-Te entiendo cariño y yo también quiero abrazarte, no te lo imaginas-
Vino el taxi. El camino fue bastante tranquilo y silencioso. Con alguna mirada de mas de parte de ambas y con roces sin querer o queriendo.
-Y esta es la habitación- dijo mientras terminaba de abrir la puerta.
-Es preciosa ¿Cuantos días te vas a quedar?- dije mientras entrábamos.
-Una semana y algo mas, me ire el domingo que viene-
-Siéntate si quieres- volvió a hablar.
Me senté en la cama con las piernas cruzadas y la mirada clavada en su cuerpo. Es digna de mirar, me volvería a enloquecer una y otra vez por ella.
-¿Que miras?- me dijo casi en un susurro.
-Pues a ti cariño, a ti- solté un suspiro. No le iba a mentir tampoco, ella lo sabia.
-Vaya, que directa-
-No te iba a mentir-
Cuando dije la palabra "mentir" algo le cambio en la cara. Esa picardía se había ido y su rostro confirmaba que la niña vulnerable había vuelto.
-Yo... yo me voy a cambiar a algo mas cómodo. Ahora vuelvo y hablamos-
Si, era eso. Todavía se sentía traicionada, creí que lo había entendido la ultima vez que se lo explique. Joder, me cansaba este tema, ya no sabia como explicárselo mas. Tal vez habra visto algo mas, que le haya vuelto a dudar. Nose pero pienso zanjarlo hoy mismo.
Después de lo sucedido en el baño tengo claro que la quiero tener lo mas cerca posible de mi. Me he dado cuenta que nunca he dejado de querer cuidarla, ni quererla.
Tenemos alguna conexión especial, tampoco podría decirte que tipo. Somos muy diferentes, pero eso es lo que me atrae de su ser. Me atrae ella en general por tener lo que yo no tengo. Siento, siento mucho la necesidad de explicarle las cosas y que ya nunca mas se aleje de mi porque nunca dejo de ser mi perdición.