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—¡Compremos esto, bambi! —Pidió Youngjae.

Parece un nene de cinco años pidiendo chocolate.

—No—Partí la hoja que me dio mamá, y le pasé una mitad a Youngjae—. Mejor áyudame, para terminar más temprano.

Rodó los ojos y le di un pequeño golpe en el brazo.

—¿Sabes? ¡Yo quiero irme luego! No me gusta el supermercado. —Pataleé y el otro suspiró

—Ya, ya. Llorón. —Susurró y se fue corriendo con la hoja.

( . . . )

Al cabo de llegar a casa, las cortinas estaban cerradas y las luces apagadas.

¿Qué carajo está pasando?

Toqué la puerta y Yugyeom me abrió con una linda sonrisa.

—Entren— Nos hizo pasar y entre abrí mis labios para decir algo pero el me arrebató la palabra—. Se cortó la luz de la casa, no sé el porqué.

—Ah... ¿Youngjae? —Pregunté, por que claramente no veía ni madres

—Estoy aquí, tonto. —Y tomó mi brazo.

Yugyeom tomó mi mano, acariciándola con el pulgar. Dios, cuánto lo amo.

—Tú mamá y Nam están afuera, vamos. —

Nos guió hacia el patio y todo se me llenó de recuerdos.

“Me dedicaba a esconderme de Jackson, estábamos jugando a las escondidas. Unos minutos después el me encontró, recuerdo su risa, era como la de un ratón.

—¡La tía Bhu ya tiene la merienda lista! Vamos, vamos. —me tomó de la mano y en tiroteos me llevo con mamá.

Siempre comíamos por las tardes allí afuera, según mamá decía que era mejor.

Era primavera y el árbol qué plantó papá estaba completamente rosado, era como sí él estuviera aquí mismo[...]”

Oh, como extraño a Jackson. Él era mi mejor amigo. Tuvo que volver a China cuando tenía doce, pero nunca me dijo porqué.

Extraño mucho su risa y la forma en la que me escuchaba. Lo quiero aquí o quisiera verlo por última vez.

Yugyeom notó que estaba bastante callado y antes de abrir la puerta, apretó un poco mi mano.

—¿Pasa algo, amor? —Preguntó

—No pasa nada. —le respondí

Abrió la puerta que guiaba al patio y se escuchó gritar.

—¡Sorpresa! —y comenzaron a cantar la canción del cumpleaños

Había alrededor de veinti algo de personas, sin contar a mi familia. Todos eran de mi curso y el de Yugyeom, a excepción de un chico que no reconocía, su cabello era café y sonriente.

Lo observé bien y esa sonrisa me parecía conocida. ¿Era él?

—¡Cumpleaños feliz! —Cantaron

—¡Pide tres deseos! —Gritó Natasha

Cerré los ojos y comencé a pensar.

Deseo no separarme nunca de Yugyeom ni de Youngjae

Deseo que nuestras familias nos acepten.

Y deseo ganarle alguna vez a Youngjae en los vídeo juegos.

Me reí con el último y exhalé aire hacia las velas. Comenzaron a aplaudir y a festejar, pusieron música para que la gente se pusiera a bailar.

Me fijé de nuevo en él. Seguía mirándome. ¿Podría ser él?

Comenzó acercarse y solté la mano de Yugyeom. El chico que recién comencé a reconocer tomó el lugar de Yugyeom, es decir, él tomó mi mano.

—¿Aún me recuerdas, niño Thai? —Sonrió de nuevo

—¿Jackson?—Tartamudeo y comienzo a respirar con dificultad.

“—Oye niño, sí. El moreno—Me dijo en tono de burla—. ¿De donde eres?

—Soy de Tailandia—murmuré bastante tímido —, ¿Y tú?

—¡China! ¡Me llamo Jackson! —Sonrió—. No me digas tu nombre, desde ahora te diré Niño Thai.”

Me abalancé sobre él y lo abracé tan fuerte como mis brazos pudieron. Quería llorar de felicidad.

—Enserio te extrañé, Bam. Lo siento por irme, pero ya estoy aquí. —Murmuró en mi oído mientras acariciaba mi espalda

—¡Yo te extrañé mucho más! —Dije y sentí como las lágrimas recorrían por mi mejilla

—Ay, no llores. —Me soltó y secó mis lágrimas.

Sonreí más, no puedo creer que él éste aquí de nuevo.

—Te ves feo cuando lloras—Se rió—. Mira, hay alguien que me está odiando sin conocerme.

Miró hacia Yugyeom y efectivamente, le estaba mirando como sí lo estuviese matando con la imaginación. Me reí de nuevo y ahora fui yo el que tironeo a Jackson, lo lleve con mi novio.

—Yugyeom, el es Jackson, mi mejor amigo de la Infancia. Jackson, el es Yugyeom, mi novio.—Los presenté

—¡Hola! —Le saludó Jackson y este no respondió después de unos segundos

—Mh, hola. —

—Uh, se puso celoso. Tranquilo, el que debe estar Preocupado eres tú. —Jackson encarnó una ceja

No entendí.

—Sí, claro. —Le respondió de vuelta

No quería peleas, ver a Yugyeom celoso ya no se me hacía muy divertido que digamos.

—¡Yugyeom! No te pongas así. A Jackson no le veo desde hace cinco años. —Le expliqué y asintió.

Yugyeom se retiró, fue a hablar con Youngjae. Me parece bien que esté en buenas con él.

—Lo siento, Thai. No quería traerte problemas con el novio. —murmuró

—Da igual. Mejor vamos a bailar. —

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Querido Yugyeom ✿ YugBam.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora