Querido Yugyeom ✿ YugBam.©

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27 de noviembre.

Te escribo desde el auto de Nam, acompañamos a mi mamá al doctor porque está enferma. Yo estaba fuera del consultorio y “De casualidad” pasaste tú con Youngjae, éste me apuntó con el índice diciéndote que yo estaba ahí y me miraste con una leve sonrisa, te me acercaste. Mi humor se fue a -2000 al verte, seguía enojado contigo y no quería ni verte.

—Kun—Dijiste detrás de mi—, Kun... ¡Kunpimook, deja de ignorarme!—

Eso último lo gritaste medio dolido y me di media vuelta para mirarte. No sabes lo que me costó esconder todas esas marcas que me habías dejado.

—¿Puedes dejar de ignorarme? No respondías mis llamadas, mis mensajes, en el instituto no me querías mirar y seguías ignorándome.—

Debo admitir que me sentía muy mal con solo desviar la mirada cuando tu me observabas desde a lo lejos.
Me acerqué a ti a paso lento y tomé tus manos.

—Bien, hablemos del tema. Sólo te daré ésta oportunidad y no habrán más. —

Me di cuenta lo triste que te veías, quería besarte, lo necesitábamos ambos.
Me costó mucho estar lejos de ti e imagínate lo doloroso que fue ignorarte.
Fuimos a una de las bancas, noté que Youngjae te esperaba en la otra calle, estaba jugando con su perro.

—Mira, lo siento por lo de la otra noche. Yo no quería hacerte daño, ni menos obligarte a hacer cosas. ¿Por que no negaste a la primera? —Yo levanté mis hombros— ¿Ya no se notan las marcas?

—No. —dije seco y tu suspiraste.

—Qué hago para que me perdones.—

Sonreí, te pedí que me compraras comida y tú solo te reíste. Tomaste mi mano, besaste mi frente como antes lo hacías.

—Te amo, sé que en el fondo sigues enojado porque te conozco muy bien, bambam. Prometo comprarte comida y no volveré a beber. No quiero hacerte más daño.—

Al parecer me conoces muy bien.

Asentí y besaste con suavidad mis labios. Morí por dentro, te extrañé mucho.

Querido Yugyeom:

–Espero a que cumplas tus promesas.

—Bam.