CAPITULO 9. DÍA DEL DRAMA.

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De regreso a la escuela todo estaba muy normal, las mismas clases aburridas y los mismos dramas de siempre. Roberta me esperó a la entrada para decirme que esta iba a ser la ultima ves que lo intentaría conmigo, me advirtió que si volvía a fallarle me dejaría para siempre, tuve que abrazarla muchas veces y aceptar todo lo que me decía para no empezar una discusión inútil.

—Luis te amo, pero es en cerio, no puedo mas contigo, si la vuelves a cagar esto se acaba.

—Lo se cariño, no tienes de que preocuparte.— dije mientras depositaba un dulce beso en sus labios.

—Me huele a reconciliación en el aire ¿todo bien chicos?.— dijo Jeremy incorporándose a la conversación.

—¿Es que no sabes leer el ambiente?. Estamos perfectamente, nos amamos y eso es lo que importa.— dijo Roberta a la defensiva, Jeremy la miro fríamente y me dijo que nos veríamos en el entrenamiento, luego se marcho.

—¿Qué pasa con esa actitud?.— pregunté a Roberta desconcertado.

—No es nada personal, solo prefiero estar a solas contigo antes de entrar a clases.— respondió mientras hacia morros y me daba besos.

—Bien, pero no me gusta que le hables así, es mi mejor amigo.— dije alejándola para que me escuchara.

—Ok cariño, lo que tu digas.— dijo colocándose la mochila para luego marcharse. Al parecer no le gusto lo que dije así que paso de ella y me voy sin mas. Tengo practica de futbol y no quiero llegar tarde

En la practica le pido disculpas a Jeremy por la actitud de Roberta y el me dice que no le de importancia, que al fin y al cabo ya estábamos bien y eso es lo que importaba. Sus palabras me tomaron por sorpresa, nunca se había mostrado interesado en mi relación con Roberta y mucho menos me había dicho algo parecido.

—¿La quieres?— preguntó Jeremy, dejándome aun mas sorprendido. Creo que alguien se despertó con la regla hoy.

—Claro que si, si no, no estaría con ella.— Respondí dándole una palmada en el hombro.

—claro, eso es obvio. —dijo él terminando la conversación.

El entrenador entra muy entusiasmado anunciando que había un nuevo compañero en el equipo. Todos nos acercamos para preguntarle quien era. En ese momento grito hacia los camerinos indicándole a quien sea que estuviera ahí que ya podía salir. Mi curiosidad se transformo en asco cuando vi quien salía de ahí. Tiene que ser una broma.

—Chicos, les presento a Jonay Villa, actualmente es nuevo en el instituto así que sean buenos con él.- cuando terminó de presentarlo hizo sonar el silbato.— Posiciones.

El chico nuevo fue puesto en el equipo contrario, lo cual me pareció una gran oportunidad para darle la bienvenida. Jonay juega bien debo admitir, pero eso no hace que deje de ser irritante. Cuando tuvo el balón aproveche para tirarme en plancha y chocar con sus pies haciendo que se callera y perdiera el balón. Creo que no controle mi fuerza ya que el chico se quedo en el suelo y le pidió al entrenador que lo dejara salir del juego. Me sentí culpable, mi actitud había sido muy infantil y debía pedir disculpas.

Cuando termino el partido me acerque a Jonay para pedir disculpas, pero el me tomo por sorpresa con una actitud desafiante.

—Se que lo hiciste a propósito Hernández, no se que te hice para que actuaras así pero tienes que saber que esto no se quedara así.— dijo mientras me apuntaba con el dedo a la cara.

—Un novato como tu no debería hablarle así al capitán del equipo. Ten cuidado con tus palabras.- dije con tono de advertencia.

Él cerro con fuerza la puerta de su casillero y luego se fue. Las cosas no salieron como esperaba pero no iba a permitir que un novato como él me hablara así, debía de darle una lección y sabia muy bien como.

DESORDENAME LA MENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora