I'm not a princess.

49. Dilo o te vas al carajo.

NARRA CHARLIE

Ally, Blake y yo salimos disparados de la casa como si el mismísimo demonio nos estuviese persiguiendo, aunque algo similar estaba pasando, Thomas, Kate y Amanda venían tras nosotros y una multitud de espectadores salía para saber qué pasaría.

—¡Muévanse que no quiero morir aquí! —gritó Blake para que nosotros pudiéramos escucharlo ya que los gritos de los tres antes mencionados, de la gente al rededor y la música de la fiesta no dejaban que se escuchara casi nada.

Pudimos ver a Rafa y a Dan venir corriendo hacia nosotros y sonreír afirmando que hicieron su tarea. Pero al ver que huíamos no tardaron nada en dar media vuelta y también correr.

Todos entramos al auto, tuvimos ventaja porque Thomas se detuvo al ver su coche completamente lleno de la foto de él besándose con el chico de primero y unas cuántas fotos de la gordura de Kate.

Antes de que nos diéramos cuenta, Ally tomó el volante y empezó a conducir rápidamente, era una mala idea, ella conducía mal y peor si estaba con mucha velocidad.

—¡Ally! Ya no nos están persiguiendo ¿acaso no te das cuenta? Baja la velocidad, vamos a tener un accidente —Dan que estaba en el asiento del copiloto, fruncía el ceño mirándola. En cambio nosotros íbamos de un lado para otro en los asientos de atrás por los giros que daba Ally.

—¡Shh! Cállate Dan, quiero que sea como en las películas de ciencia ficción.

Después de un rato, de que casi nos mata, convencimos a Ally de que se estacionara para poder cambiar de conductor. Dan tomó el volante y siguió conduciendo a velocidad normal.

Nos quedamos en silencio un momento y luego de salir del trance en el que estabamos la castaña gritó.

—Chicos... ¡lo logramos! —Abrió los ojos gritando efusivamente como si no nos hubiéramos dado cuenta antes—. Todo fue perfecto, ¡lo hicimos!

Todos sonreíamos al ver a Ally tan feliz y por supuesto, nosotros también estábamos felices de haberles arruinado la vida a esos tres imbéciles que antes nos habían hecho la vida imposible.

—Ahora tenemos que hacer la segunda parte del plan, bueno una pequeña parte —habló Ally mirando a Dan mientras le daba una dirección.

—¿Hay más? Pensé que ya terminamos... —La miré un poco intrigada

—Claro que hay más —dijo ella sonriendo de oreja a oreja.

Al parecer todos ignoramos eso ya que nadie respondió.

Me fijé en Rafa, traía solo una camisa sencilla pero... Le hacía falta algo... Su sudadera roja.

—Rafa ¿y tú sudadera?

—Emhm...no sé. —Él también se volteó a mirarme.

—¿la dejaste en mi casa?

—Pues...no sé...sí, claro, debe estar ahí —parecía algo nervioso pero no le presté atención.

Después de algunos minutos, llegamos a un hotel lujoso algo lejos de la casa de Kate, todos nos bajamos y miramos a Ally esperando sus "instrucciones" habituales. Sí, nada es fácil con esta chica.