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Strawberry

🍶🍓🍶🍓

—Quedate con la leche— me dijo JungKook.

Cierro los ojos y sin saber nada mas de que pasa a mi aldedor me quedo dormido .

—JungKook...JungKook despierta por favor— intento despertarlo.

Con lágrimas en los ojos trato de despertar a JungKook, pero éste parece como si se hubiera tomado una pastilla para dormir o tiene un sueño pesado porque no quiere despertar.
Con desesperación empiezo a moverlo bruscamente, pero nada, sigue durmiendo como si nada. Como está de lado me acerco a su mejilla derecha y la muerdo fuerte, fue un impulso.

—¡¿QUÉ QUÉ PASÓ?!— se despertó de golpe.

—Jungkookie.

—Mmm JiMin ¿qué hora es? ¿por qué no duermes?— dijo somnoliento.

—Me duele el estomago.

—Ay JiMin duerme y veras que se te pasa.

Afirmo con mi cabeza mientras tratando de aguantar las ganas de llorar me acuesto. Trato de hecerme lo más cerca de JungKook, pero este se aleja, tapándome con las tibias mantas cierro los ojos.

Quejandome y moviéndome de lado a lado tomo mi celular viendo que son hasta ahora las tres de la mañana, acto seguido me siento y con mis manos empiezo a apretujar mi estomago, es un dolor intenso que lo único que quieres es esterrarte un cuchillo y descansar.

—¡Por Dios Jimin quedate quieto!— me sentí regañado.

—Pero es que me duele mucho JungKook.

Por la poca luz que entra en la habitación veo como JungKook busca bajo su almohada algo. Saca su celular, lo enciende y la molesta luz pega en su rostro.

—JiMin son las tres de la mañana, al menos espera que se haga de día.

—¡PERO SI ME DUELE MUCHO JUNGKOOK!

—Entonces ve al baño, eso debe ser, dejame dormir.— También se está enojando.

Sollozando me levanto de la cama y camino hasta el baño que queda afuera, pero un intenso dolor no me deja seguir caminando. Con pocas fuerzas me reincorporo y camino hasta llegar dentro del baño, al entrar en vez que sentarme, una inmensas ganas de vomitar me dan; me arrodillo al sentir el vomito ya cerca,  lo dejo salir todo en el inodoro.

Al sentir un poco de alivio me alejo, con mis rodillas en el pecho me recuesto en una pared más relajado.  Tal vez Jungkook tenía razón, sólo tenía que venir al baño.

Enjuago mi boca con listerine y salgo para ir a dormir de lo que queda de madrugada. Entro, cierro la puerta y camino hasta estar encima del gran colchón, que es tanta la altura que tiene que si te caes, pobre de ti .
Gateo, me acuesto y me cubro con las mantas.

De nuevo con los quejidos y no poder quedarme quieto, me siento pero esta vez tratando de no molestar a Jungkook. Miro la hora de nuevo en mi celular; casi media hora para que sean las cinco, tomo una manta y bajo de la cama para ir al baño, no me gusta vomitar pero si es lo único que me alivia, toca.
Me arrodillo pero esta vez no siento el vomito, me introduzco mi dedo en lo más profundo que puedo de mi garganta, dejo salir todo otra vez.

Con un suspiro me siento, todavía sigue doliendo. Introduzco de nuevo mi dedo dejando salir todo lo que me esté haciendo daño.
Unos suspiros más y sin avisar se viene el vomito por si sólo, menos mal sigo con mi rostro en el inodoro.

El maldito dolor no se quiere ir, bajo la palanca para que el agua se lleve todo eso. Una última vez introduzco mi dedo, pero esta vez no sale nada pero el dolor sigue. Me enjuago con listeriene de nuevo y salgo.

Todo está completamente oscuro, si no fuera porque estoy enfermo no me hubiera atrevido a salir de la habitación de Jungkook; el chico malo que le aparecerá un morado en el mejilla.
Enciendo las luces de la cocina, con la manta en mis hombros me acerco a un cajón y a otro tratando de encontrar canela, eso me decia mi madre cuando estaba enfermo.

Tomo canela, obvio no en polvo sino la que está como si pareciese madera o algo así me parece a mi. Con una vasija con agua, meto la canela, un poco de azúcar y esperar hasta que esté.

Ya amaneció y sigo con mi dolor de estomago, el agua de canela me ayudó un poco pero sigo con dolor, no tan fuerte como antes pero sigue siendo insoportable .
Hace unos minutos había tomado todas mis cosas, ahora sólo me estoy terminado de poner mis zapatos.  Tomo otro sorbo de agua de canela, porque no queda otra alternativa, vomitar ya no puedo y el hospital... para allá voy.

Ya listo, me levanto del sillón. Cuando fui por mi celular JungKook se veia lo más de tranquilo así que no creo que le importe mucho que me vaya.

Tomo el pomo de la puerta y salgo con mis cosas en mano y con mi dolor de estomago. Camino hasta el ascensor, entro y presiono el botón del primer piso. Lloriqueando por el dolor, escucho el tono de mi celular, lo saco de mi bolsillo y lo contesto, tal vez sea mi novio.

—¿Dónde estás Jimin?

—¿Qué te importa?— ahora JungKook resulta interesado.

—Bastante...Me haces el favor y te devuelves ¡YA!— lo último lo grito haciendo que alejara mi teléfono.

—No JungKook— una respuesta firme.

—Ok, ya no me importa.

Cuelgo la llamada y salgo del ascensor, ruego por todos los dioses que no haya escuchado el sonido del ascensor. Con expresión melancólica en mi rostro camino hasta la salida, como lo imaginé a JungKook no le importó.

—¿P-pero cómo?— me sorprendí en sobremanera. 

—Te devuelves por donde te viniste.

Milk (Kookmin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora