In The Shadows

Capítulo 16

Araceli

Pasamos los siguientes 25 años siendo el lado neutro entre nuestros tíos y nuestro padre, las riñas eran por culpa de esa mujer, Katerina Petrova siempre salía a relucir en las peleas familiares, no lo soportamos y tanto Jamie como yo decidimos irnos, decidimos conocer más lugares y a nuevas personas, esperábamos que las cosas se tranquilizaran, pero nada lo hizo, me hice de muchos novios en nuestros viajes y conocimos a muchos vampiros, a los que les otorgamos nuestro anillo, a hombres lobo, pero hubo algo que nos llamó la atención y que hacía que volviéramos a casa de inmediato, Pero yo seguía preocupada por Niklaus, mi preocupación era constante, sabía y estábamos demasiado conectadas con ellos, pero yo sentía muchas cosas, a veces hasta su nostalgia, y me ponía mal. Nuestro enlace con Finn, no era sensible, algo. Había pasado con él, no estaba muerto, pero no estaba activo. Lo dejamos pasar.

Cada vez me sentía más fuerte y poderosa, ya era capaz de hacer un hechizo sin la ayuda de mi hermana, y había recibido nuevos poderes, que estaba aprendiendo a usar. Pero yo no era mi hermana, por obvias razones ella era más poderosa, era la mayor y según las leyendas, la mayor es la del poder, en alguna parte de la historia perdí mi habilidad para canalizar el poder, con ella. No se lo plantee, creo que es por mi constante preocupación por Klaus y mi padre. Otra noticia fue saber que Kol y Finn estaban dormidos, Nik y tía Rebekah estaban juntos, pero nuestro padre no estaba con ellos, lo que nos alertó.

-Hay problemas-

-Lo sé Ara.-

-¿volveremos?-

-No, ellos deben limpiar su propio desastre.-

-Escuché de un Doppelgänger-

-¿En dónde?- dijo mientras escribía en su libro.-

-Georgia.-

-¿Georgia? ¿En medio del océano?-

-No. En Estados Unidos, parece ser que en un pueblo que se llama Mystic Falls-

Levantó la cabeza y me miró

-¿Dónde...?-

-Sí, parece ser que ha nacido un doppelgänger-

-¿Puedes saber quién es y de quien es doble?-

-Yo no, tú eres la de ese poder-

-Sabes que no lo usaré, no quisiera...-

-Al menos ¿me canalizarías?, yo me ofrezco.-

-Está bien.- dejó la pluma y se sentó mirándome de frente, mi hermana era poderosa, ella lo sabía pero se detenía, pero yo no, ella me daba la motivación para hacer lo que tenía que hacer, era como si me estuviera entrenando no solo para ser una bruja/vampiro/hombre lobo/ humana.

-tempus, quod natura transtulerunt cupio-

La miré, y me tomo de las manos, yo sabía que si me había ofrecido tenía que repetirlo justo después de ella, pero algo me lo impidió, así que solo lo repetir en mi cerebro, mi voz estaba apagada, tenía ese poder reprimido, y tendría que trabajar más fuerte para volver a activarlo. Entramos a un como limbo, una pequeña comunidad, autos, jóvenes, caras conocidas, pero ninguna que recordara, hasta que un impulso nos llevó a un cementerio, siguiendo al cuervo, esa cara me era familiar, era Stefan, el hermano de Damon, frente a Katerina, que tenía una cara más suave y dócil, inocente.

-Mi nombre es Stefan, estaba buscando la tumba de alguien-

-Oh, Elena...Vengo aquí a escribir sobre como llevo esto ¿Te conozco?, es que tengo la sensación de conocerte de toda la vida.-

-Lo mismo me pasa a ti, pero me recuerdas a alguien a quien quise mucho.-

-Oh, lo lamento, ¿vienes de visita?-

-No, me mudo con mi tío, Zach Salvatore-

-Oh, ¿Zach es tu tío? Wow-

-Si lo es-

-Eso fue lo único que nos permitió ver. Pero ellos ya están juntos-

-¿Van két, ​​mint Katerinas?-

-Así parece y si la profecía es cierta, deben estar juntos.-

-¿Pero si no sucede?, ¿Qué pasara con nosotras?-

-No lo sé, ahora... ¿Por qué no canalizaste el poder?, sabes perfecto que no me gusta estar haciendo eso-

-Creo que era necesario que la vieras tú, Jamie, tu sabes más cosas que yo, y debías verla.-

-No vuelvas a ofrecerte sin antes insistir mas, mejor dime que tengo que hacerlo-

-Lo prometo.

Como iba a decirle que no podía hacer semejante canal.

Niklaus

Por fin entendía mas mi naturaleza, mi madre había atado mi naturaleza de hombre lobo para que no fuera un hibrido y fuera más peligroso, lo era incluso atado, encontré como deshacer la maldición, pero para esto necesitaba sangre de doppelgänger, un humano, un vampiro y un hombre lobo, ah y una bruja que hiciera el hechizo, justo después de que encontrara las piedras solares y lunares, por fin sería liberado, podría controlar mi forma de hombre lobo y mi mordida sería letal a los vampiros. La otra parte del plan era encontrar a Katerina, ahí tendría 2 en uno, y de paso lograría mi venganza, me sedujo, la convertí y luego se acostó con Elijah. Huyo porque él la ayudó. Había algo que me hacía sentir culpable, cada vez que amenazaba a una bruja venían a mi mente las imágenes de mi padre atacando a Jamie con la estaca e intentando matar a Araceli, así que me dedicaba a amenazarlas de otra manera, y no ser Mikael.

Regresé a Mystic Falls, con las 3 cajas de mis hermanos a mis espaldas, Finn, Kol y Rebekah, que hacía apenas 2 años me había puesto tan encabronado que la puse a dormir, pero lo mejor venía después, deshacer el vínculo y volver a juntar a la familia original, luego de buscar a mis sobrinas. Volver a verlas luego de un par de siglos quizá. Mostrarles el mundo de una manera más acogedora, mostrarles que lo que era nuestro también era de ellas, al asentarnos bien en Mystic Falls conquistaríamos Nueva Orleans, ellas a nuestro lado. Extrañaba a Araceli y su sonrisa de niña, escucharla reír era algo por la que yo no apagaba mi humanidad. Era mi sobrina la que me ponía los pies en la tierra, pero tenía tiempo de no verla y la extrañaba. Pero tambien extrañaba de alguna manera a Carrie, esa mujer era algo parecido a Araceli, solo que no había separación por sangre.

Nadie sabía de mi existencia, aquí solo era un nuevo habitante con un pasado turbulento, pero me encontré a lo lejos con que uno de los habitantes era nada más y nada menos que Stefan Salvatore, a él lo había conocido un par de siglos atrás, él fue quien nos dijo que Mikael nos estaba siguiendo y que de no ser por él, quizá mis sobrinas y mis hermanos estarían muertos, pero aun así tanto poder era demasiado riesgoso incluso para mi propio padre.

-Descuida, le diré a Laura.-

-Pero ella está un poco rara con lo sucedido con su abuela-

-Ok, ok, habla con ella- Hice movimientos rápidos para cruzarme con ella y hacerlo parecer un accidente. -disculpe-

- Descuida...¿Katerina?-

-Se confunde-

-¡¡Elena!!-

-Voy, una vez más, disculpe.-

-Que tengas un buen día.-

Punto para Klaus, había encontrado a la doble de Katerina, así que esto se estaba poniendo épico. Ahora era cuestión de encontrar a una buena bruja para el hechizo, de no haber sido porque mis sobrinas llevan perdidas casi 2 siglos se los pediría a ellas, pero así que tengo que pedir ayuda de una bruja de pacotilla. Segundo paso, era conocer a un hombre lobo, y sabía que había uno por aquí, que por supuesto no ha activado su poder, ese era el paso 2, activar su maldición. Caminé por el viejo vecindario en el que hacía miles de años había vivido, luego de que Mikael nos sacara de nuestro hogar cuando mataron a otro miembro de la familia y que los demás amenazaran con la vida de Elijah. Se presume que era heredero de las legendarias habilidades de hechicería de mi madre, pero no estamos seguros, cuando Bekah todavía era un bebé, llegamos aquí, a una aldea en Mystic Falls, caminé por todo el lugar. Hasta que la fuerza me llevó a ese pedazo de tierra.