Tan Cerca y Lejos a La Vez

Cumpleaños.

Cuando Shanks me dió la noticia de que el camión no llegaría y tendría que esperar al menos dos dias más para irme, dentro de mi una extraña sensación recorrió mi cuerpo, era como una chispa que me hizo formar una pequeña sonrisa en mi rostro.

-Luffy, ¿estás bien?

Tío Shanks me preguntó extrañado al ver mi expresión facial.

-Claro, estoy bien. Es solo que...

-¿Qué?

No estaba seguro si decirle o no la razón de mi repentina felicidad.

-... Voy a poder quedarme más tiempo aquí.

-¿Te gusta Foosha?

-¡Claro! ¡Es muy diferente a la ciudad!

Eso era cierto. De alguna forma, yo me sentía con más libertad aquí que allá. Liberado de mis recientes preocupaciones al estar ocupado casi todo el día. Me agradaba el estilo de vida que se lleva acá, que aunque fue dificil acostumbrarme es algo cómodo para mí.

-Bueno, podrías venir a visitarme cuando estés en vacaciones. Aún tenemos que pasar más tiempo de tío-sobrino.

-¡No lo dudes!

La idea de venir una vez más aquí me alegraba mucho, me emocionaba. Pero al recordar la razón por la que decidí viajar a Foosha me hizo dudar por un momento de mis pensamientos.

Yo había huido de mi realidad. Venir a Foosha solo fue un escape de mis problemas. Y eso me hacia sentir mal, porque aunque mis respuestas fueran reales, sentía que le mentía a mi tío.

Al regresar a casa, Kid estaba esperando. Al verme me miró, como si preguntara porqué seguía aquí, yo solo pude encogerme de hombros y regalarle una sonrisa divertida.

-El camionero se enfermó -dijo Shanks, aclarando las dudas de Kid-. Se va a quedar una par de dias más.

Kid chasqueó la lengua para luego sonreir, parecia que planeaba algo.

-Qué molesto tener que aguantar dos dias más al enano.

-¡Oye!

No lo podía evitar. En estos dias que pasé junto a Shanks y Kid me había acostumbrado a ser así, fingir que no me gustaba que me molestaran para luego reir por ello.

-Aún tengo algunos años más para crecer y cuando lo haga, el enano serás tú.

Me acerqué a él y con dedo indice lo señalé.

-¿Me estás retando, enano?

Kid se acercó, también, acortando más la distancia entre nosotros.

-Sí y ¿qué?

-¿Quieres pelea, enano?

Antes de que siquiera pudieramos acercarnos un poco más, Shanks intervino.

-Ya. Basta muchachos.

-Tsk.

-Shishishi.

Esto era normal y Shanks lo sabía. Él solo nos seguía la corriente.

Kid se había vuelto algo parecido a un cofidente. A pesar que parecia alguien de no estar muy interesado en este tipo de temas, era muy bueno dando consejos. Asi, cuando ibamos juntos a pastear las ovejar o caminar por ahí, la compañia que teniamos era agradable.

Kid era muy diferente a cuando eramos niños. Él ya era todo un adulto.

Al dia siguiente fue mi cumpleaños, el número 17 para ser exactos. Solo me faltaba un año más y sería mayor de edad. A veces no sabía si sentirme aterrado o feliz por ello.

Al llegar mi cumpleaños Shanks me felicitó con un gran abrazo e hizo el desayuno como regalo. Luego, al ir a ver los terrenos de cultivo me encontré con Kid que muy a su manera me felicitó.

Entonces, cuando la noche amenazaba con llegar, Shanks trajo un par de grandes bizcochos dulces frutados para la cena. En el pueblo no había pastelerias como en la ciudad pero si algunas tiendas que hacian pan.

Kid también llegó para la cena. Los tres hicimos una pequeña fiesta por este día.

Mis hermanos llamaron cuando me disponia a ir a la cama. Ellos se mostraron muy preocupados cuando les conté lo que sucedió, pero solo soltaron un suspiro cuando dije que mañana por la tarde y estaría en casa. Ace fue el primero en felicitarme, luego fue el abuelo y finalmente Sabo, quien al terminar de desearme buenos deseos se quedó pensativo, como si quisiera decirme algo pero no sabía si decirlo o no.

-¿Pasa algo, Sabo?

-Umm... No, no es nada. Espero que estés teniendo un buen momento. Me hubiera gustado pasar este cumpleaños contigo, Luffy.

-A mi también.

-Ok. Creo que ya debes dormir. Nos vemos mañana.

-Si, mañana. Buenas noches.

Esperé un momento más a que Shanks subiera a los dormitorios para poder dormir. Es ahí, en medio de la oscuridad del cuarto que la pantalla se mi teléfono móvil se iluminó.

Era un mensaje.

Al desbloquear y ver lo que había llegado, me sorprendí. En el mensaje de texto decía:

Feliz cumpleaños.

Y como remirente estaba el nombre de Law.

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Ok. Siento la demora pero por motivos de asuntos de mis estudios no pude escribir nada. A penas llegué a casa me quedé dormida.

Ya.

Con lo del capitulo, ¿qué creen que Sabo quizo decir pero no lo hizo?

Y lo último... Al fin volvió a aparecer Law aunque en forma de mensaje xD

Nos leemos!