Ella me vuelve loca.

¿ Me estoy engañando?

Habla Mila.

-Abril, me podrías dejar en mi casa por favor?

- Si claro! no te preocupes.

Estábamos en el carro camino a mi guarida. Tenía ganas de que la conociera Abril pero siento que no cualquiera conoce mi lugar favorito, apenas la voy conociendo así que baje del auto.

-Gracias, me hablas cuando llegues a tu casa por favor.

-Si claro, hasta luego.

Subí al elevador, marque mi piso y divina sorpresa... Jennifer estaba durmiendo al lado de mi puerta. No sabía si sentir lástima o sentirme orgullosa que hasta ebria se acuerda de mí, así que solo sonreí un poco y me acerque...

-Jenn estas bien?

-Mila eres tú?

-No idiota, soy tu mamá. - Claramente seguía ebria. Apestaba a cantina.

-Muy graciosa, donde estabas? Sigo esperando mis Hot cakes.

-Segura que quieres unos hot cakes con tremenda borrachera que llevas encima?

-Sí, por qué no?

-Mmmm pero primero entra. - No tenía el corazón como para dejarla ahí tirada.

-Pero espera con quien estabas? – Le pregunté y finalmente me desahogué.- Eres preciosa hasta cuando casi no has dormido. Me encantas pero bueno, eso ya lo sabes... Antes de entrar quiero que oigas las razones por las cuales huelo a cantina. Escucha, eres el amor de mi vida, siento verdaderamente que tu eres el tercer y último amor que tiene alguien en la vida sabes? Es una de las razones, la verdad no me explico cómo puedo pensar en esto si me está llevando la chingada, tanto en alcohol y emocionalmente pero el punto es que tú eres para mí y no para esa foto en el rio...

-O sea que estas celosa?

- Si, algún problema? Me tienes estúpida, que esperabas que iba a pensar? Mira qué bonito esta con una chica en un lago, quiero algo así.... Estás loca, solo pensaba si la miras con los mismos ojos con los que siempre me miraste desde que me conociste, solo en eso estaba pensando.

- Mira Jenn, esta chica si me llama mucho la atención y si la quiero conocer y todo, pero eso de miradas para todas las personas es diferente, porque tocan diferente el corazón, el cerebro, el alma...

-Entonces como la miras?

- Diferente a ti, obviamente.

-Eso quería escuchar en mi borrachera, por eso te quiero demasiado. Sabes Mila, con quien estés – Dije detallando su cuerpo – estas nalgas son mías, esos ojos son míos, este cuello es mío, esas piernas son mías y toda tu, eres mía! Estés con quien estés yo te dejo disfrutar mientras puedas, pero va a llegar el momento en la vida que las dos estemos todavía más destinadas, entiendes...?

-Diablos por qué siempre sabes decir las cosas correctas y las dices en el momento correcto? Porque tengo ganas de besarte? – pensaba con mucho deseo.

Y la bese... No soy de esas personas que se aguante lo que verdaderamente desea.

Dios! Eres una cantina andando - Dije al fin atosigada por el olor.

-Lo siento. – La tomé del trasero y la acerque más a mí, cuando de la nada suena el elevador y Mila me avienta para separarnos rápido y no asustar a algún cristiano con esa escena tan lésbica. Finalmente logré ver quién era.

-Hola Mila, olvidaste tu bolso en el auto y pues, marque y marque y no contestabas el celular. Note que tenías unas llaves y supuse que serían las de tu apartamento...

- Hey Abril, gracias me has salvado de quedarme afuera con esta cantina llamada Jennifer...

-Hey, wasup bruh. – No sabía ni cómo reaccionar pero a la vez me daba risa esta situación y a la vez quería golpearla.

-Mucho gusto me llamo Abril...

-Si ella solo es una amiga que había olvidado en la fiesta de la noche. – Se puede notar que no supe que decir para evadir más preguntas.

- Oh ya, lo siento, me robe a tu amiga por unas horas – Dijo Abril con una risa hipócrita y un poco apenada.

- Ah! solo unas horas? – Dijo Jenn acelerada.

- Hey Jennifer, tranquila, es solo una niña y estas borracha – Dije para que se calmara un poco.

- Bueno Abril, cuando llegues a tu casa me mandas un mensaje, si? – Logre hablar calmado la situación.

-Esto es demasiado raro la reacción que tuvo su ''amiga''... Mi intuición lésbica me dice algo. -Si Mila, yo te mando un mensaje, cuídate y tu también, como dices que te llamas?

- Me llamo jennifer – oculta tu sonrisa de hipócrita por favor.

-Bueno yo me voy de aquí, ya es muy tarde.

Me acerque a Abril y le di un beso en la mejilla muy pegado a sus labios. Sabía que Jennifer estaba a unos cuantos segundos de querer golpearla pero pues, Abril es Aaaabrrril. Se subió al elevador y gire a ver a Jennifer.

- Acabaste con tu escenita de amor? – Dijo ella furiosa.

-Oye tranquila, no tienes ningún derecho sobre mí, estamos? –Abrí la puerta de mi casa y Jennifer se recargo en el marco de la puerta. Qué esperas? – Le dije mirándola – Entra ya no te puedo dejar allí afuera como estas. Debo meterte a bañar y dejarte en tu casa.

- Me meterás a bañar? – Hice mi cara de pervertida.

-Oye bast...

Narra Jennifer.

-Y si mejor nos metemos las do... - Dije cortando lo que decía. La tomé por la cintura y la besé con mucha pasión para que no me soltara. Al principio me estaba empujando hasta que me empezó a jalar el pelo como sabe que me gusta, (Ella me vuelve loca) nos fuimos golpeando contra las paredes y en cada una de ellas había un roce por mi parte con mi pierna y ella con la suya hasta que llegamos al baño. Al parecer el sexo me baja el alcohol – Dije en mi cabeza.

Nos fuimos quitando la ropa pero siempre viéndonos a los ojos, sabía que Mila todavía no me dejaba de querer, pero hay algo más en esa mirada que cambio pero es tanto el deseo que tenemos una por la otra que no podemos aguantar ni un poco...

El agua cae en nuestros cuerpos no nos separábamos ni un instante. Mila solo seguía. Baje mi mano y empecé a frotar su sexo. Mila solo estaba con la boca abierta en mi cuello y una pierna suya la sostenía con otra mano, además, estaba recargada en la pared mientras el agua seguía cayendo hasta que le metí los dedos y ella me jalo el pelo y me mordió. No le di importancia, así que ella prosiguió a tocarme a mí...

- Espera, espera esto no está bien... – Dijo ella con voz entrecortada pero no dejaba de tocarme y yo a ella tampoco.

- P...P...Por qué? Si, sé que me sigues queriendo y deseando.

-Que acaso no entiendes que lo nuestro no puede seguir...?

-Empecé a chuparle los pezones que es uno de sus puntos débiles y ya no pudo hablar más y empezó a gemir...

-Maldita sea Jennifer... BAJA YA!!!

 Hola  no estoy  muerta ni nada de hecho hoy  cumplo años   ,  creo que este  cap esta  mejor  en  la ortografía y todo eso  , perdón  por  no subir  tan seguido  pero espero  que les  guste ,  esto no se  acaba  la verdad  tengo demasiada  imaginación  pero  flojera  también  , saludos  y fati  fuera .