Capítulo 16

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Solo advertir que es un cap triste, que cierra el primer arco de esta segunda temporada, sin más que decir los dejo con:

Eres mi Problema

Capítulo 16

Ya había pasado casi un mes desde que comenzara a salir con Tom, y, sinceramente, me sentía en una nube. Aquel sentimiento que antes me atormentaba ahora me hacia sentir extremadamente feliz y lleno de vida. Aunque aun no me recuperaba completamente de la anemia, y seguía temiendo no despertar una vez que me durmiera. Gracias a un esfuerzo sobrehumano de parte de Tom pude mantenerme al día en las materias.

—Ya sabes, si te sientes demasiado cansado llamame o tu padre y vendremos a buscarte ¿ok?

—Si mamá lo prometo, te quiero—Dije bajando del auto. Tuve que bajar el ritmo cuando apenas había avanzado unos pasos, el maldito cansancio apareció de inmediato. Traté de ignorarlo y seguí caminando pero el mundo se movió y sentí que iba a darle un abrazo de cara al suelo. Pero un brazo me sostuvo antes de caer.

—No pasan ni cinco segundos y ya necesitas de mí, eres una reina del drama—Levanté la mirada aún algo mareado y ví a Tom, que me observaba con una sonrisa de maldito.

—Creí que se saludaba con un hola—Contesté recuperado.

Tom pasó un brazo sobre mi hombro y me miró, no pude evitar mirar sus labios. Pero él colocó rápidamente un dedo sobre los míos.

Estamos demasiado cerca del colegio Loges- Me dijo. Asentí con la cabeza y comenzamos a caminar. Siempre con Tom sosteniéndome sutilmente.

Las clases se me pasaron demasiado rápido, hace tanto tiempo que no estaba en un salón, escuchando, aprendiendo, creo que en el fondo lo extrañaba, eso y las estupideces que Tom hace cuando se aburre.

Todo iba perfecto, bueno, algo lento debido al constante cansancio. Hasta que fuimos a la cafetería en la hora de almuerzo, Liz me miraba de la manera más aterradora en que se puede mirar a una persona. Apenas me vio miró a Tom y después desvió la mirada, retomando la conversación con las cerebro de agua que tiene por amigas.

—Lleva haciendo lo mismo desde hace una semana, solo que ahora ni siquiera lo disimula—Dijo Tom como si nada—No le hagas caso, todavía está dolida—Terminó. Tomando mi mano por debajo de la mesa.

—Hmm—Fue lo único que salió de mi boca, me entristecía ver a Liz así, después de todos los buenos momentos que habíamos pasado los tres. Pero Tom tenía razón, tenía que darle tiempo al tiempo, quizás las cosas podrían volver a ser como antes.

Kendall

Al dar vuelta la hoja el rubio se dio cuenta que se saltaba hasta dos meses después, las hojas anteriores parecían haber sido arrancadas, o al menos eso evidenciaba el borde del diario. Las hojas ahora presentaban un tono más oscuro, como si las hubieran repasado una y otra vez. Además de varios círculos pequeños donde el papel se había mojado.

Kendall recordó lo que le había dicho Logan cuando le contó su historia, cuando recién comenzaba a conocerlo.

—No puede…—Intentó alejar ese pensamiento de su mente, pero era demasiado persistente. Sus dedos comenzaron a temblar, como si el diario se hubiera transformado en un cadáver y el papel en hueso. Respiró hondo y volvió a leer, asustado de lo que podía encontrar…

Logan

Ya han pasado dos meses desde que salí del hospital, por suerte ya estoy completamente recuperado y ya me puse al día en todas las materias. La mala noticia es que Liz parece estar cada vez más lejos, y por más que he intentado hablarle no hay caso.

Eres mi problema (Kogan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora