Capítulo 5 - El comienzo.

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Cuando Rebeca abrió los ojos se encontró con alguien a su lado, ¿Recordaba su nombre? Tal vez, necesitaba alguna señal, así que miró el cielo unos segundos - ¿Estas bien? - Pregunto Diego y Rebeca la miró - Frebly, ¿Quieres que te lleve a casa?

- Solo me duele un poco la cabeza - Añadió con diferente tono de voz - ¿Quieres ir a algún otro lado?

- Si quieres te llevo a casa, te vez algo cansada - Añadió Diego, Rebeca lo miró a los ojos, parecía confundida, ¿Que diablos hacía con Diego? - Y es tarde, pero entonces yo creo que esto merece otra cita - Añadió y Rebeca lo miró con los ojos abiertos.

- Si, yo igual creo lo mismo - Añadió Rebeca un poco más rebelde, Diego la miró con el ceño fruncido, esa actitud de Frebly no era normal - Pero te prometo otra cita.

- Te vez cansada, vamos. Será mejor que llegues a casa - Añadió Diego, ambos se subieron para ir a casa de Rebeca. Esta se quedó dormida por unos minutos, y al abrir los ojos ya no era Rebeca, si no Frances - Hemos llegado - Añadió Diego, Frances lo miró unos segundos.

- Muchas gracias por traerme. Y lamento lo de ahora, me duele la cabeza - Añadió Frances, era la verdad. Después de cambiar de personalidades, sus dolores siempre eran iguales.

- No te preocupes, estuviste conmigo todo el día - Añadió Diego sonriendo - Seguro ya estabas cansada.

- No digas eso, me encantó estar contigo - Añadió Frances, tomó su mano para acariciar sus nudillos. Beso su mejilla - Nos vemos mañana.

- De acuerdo, hasta mañana entra, te espero - Añadió Diego y Frances asintió , salió del coche para caminar hasta su casa. Al llegar a la puerta se despidió y vió el coche apartarse.

Durante el fin de semana, Frances tuvo problemas con su madre debido a que esta seguia llamándola por los nombres de sus personalidades. Habían discutido. Frances quería que la llamara Frebly, pero su madre insistía que ese no era el nombre que le había puesto a su hija. La discusión más o menos duró cuatro horas, incluso cuando la mamá de Frances hacia del baño, está por detrás de la puerta le gritaba lo que le faltaba.

Al llegar el Lunes, Frances no parecía demasiado animada, así que solo se vistió con lo primero que encontró. Bajó a la cocina y se encontró a su madre preparan su café para llevarlo a su trabajo. Frances tuvo que preparar su propio desayuno, su mamá no le iba a hablar en un largo tiempo y eso le hacía sentir mal, cuando cambiaba a Lucy o a Rebeca, a quien más necesitaba era a su mamá.

Cuando llegó a la escuela, desanimada mente llegó a su salón de asistencia, donde se sentó a un lado de Carl, quien la miró con el ceño fruncido - ¿Que ocurre? - Le Preguntó al ver su puchero y sus ojos tristes.

- Me pelee con mi mamá, no le habló en toda la tarde ayer y para acabar, se fue a trabajar más temprano - Añadió Frances, efectivamente era ella. Carl no le tomaba mucho trabajo en acostumbrarse en las personalidades de su amiga.

- Ya veo, con razón estás así Frances - Añadió Carl, su amiga lo miró con una sonrisa - Te conozco, aunque no llevemos mucho tiempo conociéndonos. Se quien eres.

- Eres el mejor - Añadió Frances alegremente, lo abrazó de lado y beso su mejilla - Te tengo que contar algo.

- Dime ahora - Añadió Carl, está se acercó a su oído y le susurró las palabras "El viernes salí con Diego Stevens, me gustó" - ¿Enserio? - Preguntó Carl sorprendido - Woow, cada vez más sorprendes.

- Si, después del parque desperté en su coche. Me había quedado dormida. Espero que Rebeca no lo haya arruinado - Añadió Frances mientras bajaba la cabeza. La campana sonó y Frances se levantó - Tengo que ir a clase de química, tengo un proyecto que hacer con Johnson y tengo que cambiar a otra TID.

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