DOBLE VIDA

Despedida en el aeropuerto

Sakura cortó el beso por falta de aire y le dedico una sonrisa a Shaoran. Un silencio incomodo lleno el espacio.

- Shaoran…. ¿Por qué…?

- Sh… porque hacia mucho tiempo que quería hacerlo. –Dijo Shaoran acariciando una mejilla de la joven.

- Supongo que ahora todo será distinto. –Dijo Sakura bajando la mirada.

- ¿Por qué lo dices? –Pregunto Shaoran.

- Tú tienes una vida, supongo. No se si tienes novia, por lo que yo se no. – Dijo Sakura con una sonrisa de melancolía.

- ¿Sabes? A veces me gustaría ser como los demás. –Dijo Shaoran mirando el cielo.

- ¿A que te refieres?

- No se… solo que a veces siento como si mi vida fuera programada. –Dijo Shaoran abrazando a Sakura.

- ¿Tú tienes una vida programada? Dímelo a mi… yo estoy destinada a un hombre al que no conozco, con el que solo me casan por seguridad económica. –Dijo Sakura.

- Puedes renunciar a todo eso. –Dijo Shaoran.

- Si lo hiciera seria una gran deshonra para mi padre y eso le causaría mucha tristeza. –Dijo Sakura acomodándose entre los brazos de Shaoran.

- Tienes razón, pero no puedes sacrificar tu vida solo por el bienestar de los demás. –Dijo Shaoran dándole un beso en la frente.

- ¿Si tu padre confiara en ti, dejara todo en tus manos, fueras su único hijo, y te amara como nada en el mundo y lo único que te pide es que te cases con alguien elegido por el, renunciarías a todo solo por tu felicidad?

Esa pregunta dejo helado a Shaoran. Nunca se lo había preguntado, y nunca le había dicho a Sakura que su padre había muerto. Si Sakura supiera la verdad quizás no le cuestionaría esas cosas… el también debía casarse con una mujer a la cual no conocía y no amaba.

- Supongo que tienes razón. –Dijo Shaoran mirando nuevamente las estrellas.

Cerca del amanecer, Shaoran dejo a Sakura en su casa y el regreso a la suya para poder dormir. Meiling y Tomoyo ya habían vuelto del boliche en un taxi.
Los días pasaron con rapidez para ambos castaños quienes habían decidido tener una relación de amigos, un poco mas de amigos, pero lamentablemente, el día en el cual Shaoran debía partir hacia China llego. Meiling, Tomoyo y Sakura fueron al aeropuerto a despedirlo.

- Te extrañare primito. Te espero dentro de unos días de regreso. –Dijo Meiling abrazando a Shaoran.

- Yo también Mei, extrañare tus asquerosos desayunos por las mañanas. –Dijo Shaoran.

- Fue un gusto conocerlo Shaoran Kiho. –Dijo Tomoyo con una dulce sonrisa.

- El placer fue mío Tomoyo Daidougi. –Dijo Shaoran dándole la mano formalmente.

Finalmente llego el momento mas duro, la despedida entre Shaoran y Sakura.

- Supongo que volveré a verte. –Dijo Shaoran a Sakura tomando su rostro con una mano.

- Más te vale Shaoran Kiho. –Dijo Sakura con una sonrisa mezclada con tristeza.

- Te voy a extrañar. –Dijo Shaoran

- Y yo a ti. –Dijo Sakura abrazándolo.

- Volveré dentro de unos días. Podemos chatear e incluso llamarnos. –Dijo Shaoran.

- Eso creo. Te esperare. –Dijo Sakura abrazando con más fuerza a Shaoran mientras las lágrimas de cristal recorrían su mejilla.

- No llores mi flor de cerezo, pronto nos volveremos a ver.