La gente se pasaba por los pasillos, todos se dirigían a la salida, excepto yo. Me dirigía a la biblioteca, leer era mi pasatiempo favorito, me sacaba de los problemas de mi vida diaria y me hacia llegar a otro mundo.
Gire por el pasillo y me encontré con las escena mas asquerosa. El chico 'rubio' tenia puestas las manos en cada muslo de la rubia teñida, la tenia apoyada contra los casilleros y se besaban como si no hubiera mañana. Me di vuelta rápidamente, ¿que hacia ahora? pasaba por el lado de ellos haciendo como si nada hubiera pasado o me iba a la biblioteca central.
Decidí salir de ahí y me fui a la biblioteca central.
En el camino pase junto a una pequeña plaza donde la mamá y su hijo jugaban alegremente y eso hizo que recuerdos volvieran.
Mi cabeza se inundó de flasback's de mi pasado. Los flashback se habían vuelto mi peor pesadilla, me hacia acordar cosas muy bonita pero a la vez me hacia culpar de la muerte de mis padres.
No me di cuenta cuando estaba al frente de la gran escalera que conducía hacia la biblioteca.
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Me encontraba sentada en la alfombra de mi departamento leyendo la saga de hush-hush. Mi libro favorito.
El departamento estaba en silencio hasta que el ruido del timbre sonó.
Me levante, deje mis lentes de lado ya que solo los ocupaba para leer, y fui hacia la puerta.
No había nadie, mire para ambos lados, iba a cerrar pero un pequeño papel en el suelo llamo mi atención, lo recogí y lo leí "alejate de él es mio. mi ángel, demonio" valla, que simpática la broma.
- hola - una voz me hizo sobresaltarme levante mi vista de aquel papel y mire al chico rubio.
- hola - dije extrañada ¿que hacia aquí? ¿acaso el me había dejado el papel? - ¿que haces aquí?
- vivo a tu lado, vecina - dijo con una pequeña sonrisa.
- ahh... hola vecino - dije.
