Capitulo 11
El Doctor te indico en donde estaba tu hija, al entrar a la habitación, tus ojos se humedecieron instantáneamente, tu pequeña Ángela, estaba en una mediana cama, con muchos cables los cuales pasaban desde su muñeca hasta su nariz, tenias unas inmensas ganas de gritar y de llorar por no poder hacer nada.
-Mami.- Ángela dijo lentamente.
-Mi niña.- Te le acercaste y les tomaste su pequeña mano y la besaste.
-Te extrañe… quiero irme… a casa.- Mencionaba poco a poco.
-Yo también te extrañe reina.- Besaste su frente. –Y pronto volverás a casa.- Una lagrima resbalo por tu mejilla.
-Tengo… miedo… mami.- La pequeña Ángela empezó a llorar, no la podías ver así, era muy pequeña para sentir dolor.
-Te prometo que todo estará bien mi niña.- Le volviste a tomar su pequeña mano y te la recargaste sobre tu mejilla. –Duerme linda.-
Acercaste una silla y te sentaste al lado de su cama, Ángela hizo caso a tu petición y fue cerrando los ojos hasta quedarse dormida. Tú te arre costaste a la cama y cerraste los ojos rezando, pidiéndole a Dios que tu hija mejorara y todo terminara para bien, no pasaron ni 10min cuando una mano te estaba levantando por los hombres, abriste tus ojos y viste a Louis, con unos ojos de preocupación y un semblante débil.
-Lamento despertarte cielo.- Susurro suavemente. Te levantaste por completo y lo abrasaste fuertemente, no le tomaste atención al ‘Cielo’ ahora lo que menos querías eras pelear con él.
-Lo siento Louis.- Respirabas cortamente ya que el llanto no te dejaba. –No me preocupe bien por mi niña y mira donde esta ahorita, yo fuera de casa cenando con mi admirador y mi niña sufriendo.- Al terminar de decirlo no te diste cuenta de lo que habías dicho, Louis si te escucho perfectamente, pero dejo pasarlo debido a la situación pero luego hablaría bien contigo.
-Tranquila _________, todo estará bien, y claro que te preocupas por los niños sino que a veces así suceden las cosas.- Louis menciono suavemente. Te separaste de él, ya que Ángela nombre el nombre de su padre, se había despertado por lo que habías hablado y llorado.
-Mi hermosa hija.- Louis tomo su mano y la beso varias veces, tu veías la escena detrás de él.
-Papi, no dejes que mami llore.- Ángela le saco una sonrisa tanto a su Papa como a _________. (aww que hermosa Ángela)
-Mi hija si es inteligente.- Dijo Louis con orgullo. –Y no dejare que llore mas, y por el llanto que le he causado algunas veces créeme que por ello estoy arrepentido.- Louis se voltio y miro tu rostro lleno de lagrimas, se levanto no apartando la mano de su hija, tomo a _________ de su brazo y la acerco a él.
-Louis.- Mencionaste un algo incomoda.
-Te quiero _______, no sabes cuánto, amo a nuestros hijos y pasaremos esta, te lo prometo.- Louis beso rápidamente tu mejilla. Ángela sonreía.
-Y… como te enteraste Louis… ahh lamento no haberte llamado.- Dijiste apenada.
-Tu madre me llamo, vine lo antes posible con Avril y hable con el Doctor, y no te preocupes, me hubiera imaginado como estabas.- Acaricio tu mejilla y volvió con su hija. –Señorita ahora voy con usted.- Hizo una pausa. -No recuerdas haberte caído mientras estabas con tu abuela o haberte golpeado la cabecita mientras jugabas.- Louis le pregunto curiosamente, sabias a que venía su pregunta.
-Mami… dile a Papi que no se vaya a enojar conmigo…- Ángela hablo un poco asustado, tú te ubicaste a su lado y le guiñaste un ojo. –Me golpee con la mesa de abuela, pero no le dije nada.- Louis la miro con intriga.
-Ahora pequeña dama cada cosa que te pase prométenos a tu madre y mi que no los contaras, si.- Ángela asintió efusivamente.
Tu niña se quedo dormida. Tú y Louis salieron de la Habitación y se fueron al pasillo con tu madre y Thomas.
-Hola mami.- Avril te rodeo la cintura con su abrazo, tú te ubicaste a su altura y le besaste la frente.
-Como estas?- Le preguntaste.
-Bien mami, Daniel no se ha despertado y Papi me dijo que Angela estaba un poco enfermita.- Miraste a Louis y este te sonrió.
-Sí, Ángela estará acá en el Hospital por unos días, pronto volverá a casa con nosotros reina.- La volviste abrazar. Daniel gruño un poco y fue despertando poco a poco. Lo tomaste en tus brazos y Avril se fue con Louis que estaba sentado.
Así pasaron como una hora más, tu mama decidió llevarse a Avril y a Daniel que se había vuelto a quedar dormido para tu casa. Tu estabas sentada a lado de Thomas, el cual no se había querido ir y Louis estaba reventando de los celos, aunque no los demostraba.
-________ lamento lo de tu hija, son golpes de niños, sanara vas a ver.- Tu asentiste sonrientemente y te inclinaste hasta quedar en su hombro, mirabas un punto en blanco, estabas cansada, agotada y triste. Estabas por quedarte un rato dormida cuando Louis se sienta en la silla de tu lado y te toma de la mano, tú te despiertas por completo y lo miras curiosamente.
-Qué pasa?- Soltaste su mano.
-Hable con el Doctor y me dijo que la inflamación estaba bajando debido al medicamento.- De un impulsó abrazaste a Louis fuertemente.
-Oh lo… siento…- Mencionaste al separarte. Agradeciste a Dios y te volviste con Thomas el cual sonreía sin ninguna molestia.
-Ves, que te dije linda.- Te abrazo y tú le devolviste el abrazo.
Te sentías segura con Thomas, libre, protegida y sobre todo querida. Quien iba a pensar que le ibas a gustar a tu Jefe, el cual muy poco conocías y con el que solo tratabas problemas de oficina.