What Doesn't Kill You Makes You Stronger (Harry Potter y Tu) *en edición*

Part Of Me

(Si el anillo que escogi no es de su agrado imaginence uno que si lo sea)

- Harry - dije con un hilo de voz, tome el anillo deslizándolo en mi dedo, y tome su mano haciendo que el se pusiera de pie, el me sonreía nerviosamente, me abalance hacia el besándolo, sus manos se colocaron en mi cintura sosteniéndome mientras que las mías se perdían en su cabello, nos separamos por falta de aire, yo le sonreí - Si!!, si quiero casarme contigo!!! - dije apenas audible, el tomo mi cara en sus manos y me beso nuevamente.

- Te amo - susurro el, yo escondí mi cara en su pecho.

-Yo también te amo-dije mientras volvía a besar a Harry.

-Felicitaciones jóvenes-dijo el goblin, interrumpiendo nuestro momento mágico- Ahora que todo esta aclarado los dejare para que puedan hablar mas cómodamente, cualquier cosa que necesiten ya saben que con gusto los ayudare.

Después de que el goblin salió del lugar en el que estábamos, me voltee a besar a Harry, hasta que la voz de Draco nos interrumpió.

-Bueno, creo que se olvidan que sigo aquí-dijo mientras nos fulminaba con la mirada, yo solo volví a esconder mi cara en el cuello de Harry y al voltear a verlo, solté una risita al notar que estaba sonrosado por lo que antes dijo Dray.

-Lo sentimos-dijimos ambos mientras nos separábamos un poco y ahora Harry solo me tomaba de la mano.

-Olvídenlo, ya estoy acostumbrado a que cuando están juntos, no vean a su alrededor, pero, pues ahora no me queda de otra mas que decir que, bienvenido a la familia Potter- dijo Draco, mientras hacia una mueca parecida a una sonrisa y venia hacia nosotros para abrazarme a mi y darle un fuerte apretón de manos a Harry- Y solo espero que hagas muy feliz a mi hermanita o hare que te arrepientas de haberla hecho sufrir una vez mas.

-No pienso hacerla sufrir, créeme Malfoy, que ya aprendí mi lección después de lo que paso- dijo Harry mientras me observaba, ya que aun estaba abrazada a Draco.

-Ahora que tal si nos vamos a casa a celebrar que después de todo lo que nos espera, tendremos una cosa mas por la que luchar, que es un futuro juntos- dije mientras me soltaba del abrazo de Dray e iba hacia Harry y tomaba su mano- Además de que me muero de hambre y no creo que ustedes traigan algo de comida, o si?-después de decir esto ambos soltaron una carcajada antes de desaparecer de Gringotts para regresar a Grimmauld Place.

Al regresar a Grimmauld Place, aparecimos en la sala en la cual se encontraban tanto Sirius como nuestro abuelo, jugando ajedrez mágico y al notar nuestra presencia apartaron su mirada del juego y se nos quedaron viendo.

-Bueno Sirius, creo que te han salvado de otra derrota-dijo el abuelo Abraxas mientras se levantaba de la silla y venia hacia nosotros.

-Creo que al que han salvado de perder es a ti viejo-contesto tío Sirius con una sonrisa en los labios, mientras también se levantaba de la silla en la que estaba

Al momento de que tío Sirius terminara su oración el abuelo lo fulmino con la mirada, mientras Draco y Harry intentaban contener la risa, y justo en el momento en que el abuelo iba a responder, me adelante a hablar.

-Creo que esta de mas discutir quien era el que iba ganado-dije mientras veía tanto a Sirius como al abuelo, además de fulminar con la mirada a Harry y Draco, que al verme, rápidamente se tranquilizaron y se fueron a sentar- Tenemos asuntos mas importantes que resolver.

-Tienes razón pequeña, hay que cambiar de tema ya que a lo visto hay personas que no saben perder-al decir esto le lanzo una mirada a Sirius, este al ver esto, iba a volver a hablar pero el abuelo continuo.-Lo importante es que pudieron regresar con bien y que a juzgar por tu cara las cosas salieron muy bien-contesto el abuelo, antes de acercarse mas a mi y darme un fuerte abrazo, yo solo atine a soltar una risita mientras volteaba a ver a un sonrosado Harry.

-Estoy seguro que estos muchachos nos tienen excelentes noticias, cierto ahijado-menciono mientras se acercaba a Harry y le daba una palmada en la espalda y este solo se atraganto con su propia saliva.

-Que tal si antes de contar todo lo que descubrimos, comemos algo, pues no se ustedes pero me muero de hambre-dije soltándome del abrazo de mi abuelo y caminando hacia la cocina, escuchando la risa de todos en la sala.

Al entrar a la cocina empecé a revolver todo en busca de algo pudiera comer.

-Se le ofrece algo ama ______-dijo Kreacher apareciendo de la nada, lo que me hizo brincar del susto.

-Por Merlín, Kreacher casi me da un infarto-voltee a verlo- No me vuelvas a hacer esto por favor.

-Lo siento ama, Kreacher no quiso asustar a la única ama después del amo Abraxas, que merece el respeto de Kreacher.

-No te preocupes Kreacher, se que no fue tu intención-dije mientras le sonreía- Y con respecto a necesitar algo, ahora que estas aquí, creo que no moriré de hambre, claro si es que estas dispuesto a preparar algo de comida para todos.

-Claro que preparare la comida, a Kreacher le gusta complacer a los amos, aunque con ello deba de servir a esos sucios traidores-gruño- Ahora mismo me pondré a hacer la comida-dijo mientras iba de un lado a otro en la cocina y empezaba a cortar cosas.

-Esta bien, en ese caso te dejare trabajar y no vuelvas a hablar así de Harry y de Sirius-mencione mientras salía de la cocina, a lo que recibí un gruñido como respuesta.

Al regresar a la sala me encontré a Draco hablando con el abuelo y a Harry jugando ajedrez mágico con su padrino, yo solo me senté en un sillón que estaba vacío a observarlos tan tranquilos a todos.

-Kreacher preparara la comida-hable después de estar en silencio por unos minutos.

-Tendremos suerte sino morimos envenenados Harry-susurro tío Sirius con una sonrisa mientras veía a su ahijado, este solo hizo un sonido afirmativo con su garganta. Al escuchar esto, Draco y el abuelo se rieron y yo solo aguante una sonrisa y hable

-No sean exagerados, ustedes dos-mencione mientras me acercaba a Harry y me sentaba en sus piernas, al hacer esto solo escuche los gruñidos de enfado que soltaron tanto mi abuelo como Draco- Nunca permitiría que nadie te hiciera daño cariño-hable agachando la cara para darle un pequeño beso a Harry, y con esto los gruñidos se volvieron a escuchar y yo solo sonrei para volver a besarlo.

-Gracias por lo que me toca sobrina- hablo Sirius con una sonrisa-con esto solo me doy cuenta de que quieres mas a mi ahijado que a tu propio tio-finalizo con un puchero.

-Eso en parte es cierto, Amo a Harry, pero nunca los dejare de querer a ustedes-mencione mientras me lavantaba de las piernas de Harry e iba a darles un beso a cada uno de los miembros de mi familia que quería y cuidaría con mi vida, estos solo sonrieron cuando me acerque y regrese a mi cómodo lugar. Antes de que alguno volviera a decir algo, apareció Kreacher diciendo que la comida estaba lista, a lo que todos nos levantamos de donde estábamos para dirigirnos al comedor, en donde nos esperaba una deliciosa comida.

Al estar todos en la mesa, empezamos a relatar poco a poco lo que nos sucedió en Grinngots mientras comíamos, claro que no faltaron una que otra broma por parte de tío Sirius y Harry a cerca de lo que Kreacher pudo agregar a sus platos de comida, lo que ocasionaba escuchar los gruñidos y uno que otro comentario sobre porque Kreacher no debería estar al servicio de traidores que no sabían apreciar el trabajo de los demás, además de ser unos cobardes que estaban en contra de los ideales de todas las familias sangre pura que estaban del lado de el Señor Tenebroso. Sin embargo nosotros ignorábamos lo que decía mientras veíamos las caras de asombro tanto de Sirius como de abuelo Abraxas por saber todo lo que habíamos pasado en este pequeño "viaje", lo que mas les sorprendió de todo fue el hecho de saber que Harry y yo estamos comprometidos, pues ambos piensan que aun somos muy jóvenes para este gran compromiso, claro esta que también aclaramos que aun pensamos esperar para la boda hasta que todo esto del Señor Tenebroso termine. Al final de la cena en lo que todos coincidimos fue en que debíamos comenzar la búsqueda de los horcruxes  lo antes posible y tratar de no involucrar a demasiadas personas para así evitar ponerlas en peligro.