[¡¡Me toca Caro!! Dame el microo] [PEROO, viene la mejor parte] [¡Carolina dejála! ¡Ya fue tu turno!] [¡Vos no te metas Virginia cara de piña!] [Juli susurrando: vos seguí Manu]
Tres días de haber llegado y dos de haber sido ¡reconocida! Había sido épico, Juli fue la primera. Mientras Quirón practicaba uno de sus habituales discursos, nosotras susurrábamos a la luz llameante de la sorprendente fogata nocturna del campamento. Discutíamos acerca de si los tests estarían bien o si eran una farsa, hasta que...¡PPJJJ! Una despampanante luz color oro puro irradió desde encima del oscuro, ondulado, y alborotado cabello de Juli, junto con la luz se encontraba la imagen de un arco y una flecha. Lo que indicaba que era hija de Apolo, dios del sol, la música, las curaciones, etc, etc...Ella se emocionó recalcando lo crackk que era y luego, como por arte de magia ¡BOOM!
-¡Tu cabeza!-gritamos señalándonos euforicamente Vicky y yo una a la otra. Sobre su cabello relucía una poderosa lechuza, símbolo de Atenea, la diosa de la sabiduría. Y sobre la mía un ¡TRIGO! Sí, damas y caballeros, hija de Deméter. Muy conveniente para una vegetariana como yo.
En fin, la pobre Caro no fue reconocida esa noche; pero volviendo al suceso "importante" según ella, era nuestro tercer día en aquel lugar lleno de jóvenes semidioses semicabra y semicaballo. Recuerdo que desperté de un sueño muy placentero sintiendo el fresco olor a yuyos, flores y variedades de plantas que albergaba la cabaña de Deméter. Mis hermanos y hermanas eran todos muy pacíficos, caminaban tranquilos de aquí para allá saludando amablemente. Era gracioso, me imaginaba a mí misma dentro de unos años, siendo una hippie floral cuidadora de animales y árboles. No era un mal plan, lo archivaría a mi lista de posibles futuros no probables junto con mis sueños de ser: abogada, fotógrafa, presidenta, modelo, etc, etc...[Manu, no es por ser mala pero ¡Agilizando que no hay tiempo!] [¡Ya voy loca!]
Bien, como alguien no me deja expresarme libremente voy a resumirlo todo. Habíamos buscado por separado por el campamento si había algún otro personaje de los libros pero no los encontramos. En la mañana solo me encontré a Caro un par de veces caminando sin rumbo, parecía perdida,triste, y me generaba impotencia. Ya en la tarde, anunciaron una captura de bandera. Rojos contra Azules.
-¡Atención todos!-gritó Quirón desde una piedra alta en la entrada al bosque iluminado por los casi útimos rayos solares del día-ya han recibido su color, las reglas son simples. No heridas graves. No salirse del campamento. Y jugar limpiamente. Fuera de eso todo está permitido, equipo rojo a la derecha, equipo azul a la izquierda, y sin más que decir...¡A jugar!
-¿Equipo rojo? ¿Sos del rojo?-comencé a interrogar a todo aquel que se me cruzara.
-¡Sii Manu estamos juntas!-celebró Juli, a la primera de las tres que encontraba.
-¡Yess!-celebré junto a ella, y al momento aparecieron Vicky y Caro con un listón rojo en sus manos, lo que indicaba que estabamos reunidas nuevamente.La estrategia de nuestro equipo era sencilla: fuertes al ataque, inteligentes entretienen, los que pueden distraen atacando o conversando y tres van en busca de la bandera azul. Junto a Vicky y Juli derribábamos semidiós tras semidiós. Nuestro trío se encargaba de la protección de la bandera y éramos imparables en mi opinión, lo cual era raro ya que ninguna había utilizado una espada antes.
-¡Con lo bien que lucho podría ser hija de Ares!- gritó Vicky al momento que levantaba una antigua espada de oro imperial que había conseguido, supongo, con ayuda de sus hermanos de la cabaña de Atenea.
-¡Cuidado genia!-contestamos al unísono Juli y yo al momento en el que ambas empujábamos a un hijo de Hipnos que anteriormente había tratado de atacar a la "posible hija de Ares".
-Cool-comentó Juli con un dejo de alegría observando al chico, que ahora yacía dormido junto a nuestros pies. Seguidamente Vicky se dio la vuelta de un salto y se nos tiró encima.
-¡¡Mis héroas!!
-Sí, sí. Nosotras también te queremos pero...-fui interrumpida por el contínuo griterío y los aplausos y vítores, que al parecer provenían de unas millas más adelante.
-¡YA TIENEN LA BANDERA!-informó un chico
alto, de ojos color verde marino y cabello negro desparramado. Me resultaba curiosamente conocido, solo que no supe distinguir quién era.
-¡Vamos!-corrió Vicky alegremente, tironéando del brazo de Juli, quien se veía un tanto nerviosa luego de la repentina pasada de aquel chico.-¡CARO! ¡CARO!-entonaban los campistas del equipo ganador al unísono. La susodicha revoloteába felízmente la bandera color azul desde la cima de una pila de cuerpos humanos alegres. Alzaban a la chica de arriba a bajo, alardeantes. Al notarnos, se puso aún más feliz, y saludó gritando que amaba estar allí.
-¡CARO! ¡CARO!-se unió Juli, apoyándo a su hermana. Una vez calmado el panorama, la campeona comenzó a descender. Me alegraba de que ahira estuviera contenta y no se preocupara demasiado, cuando lo noté.
-¡Esperen!-clamé apuntando hacia arriba. Sobre el cabello recogido en una coleta de la morocha se había propagado una ráfaga de luz, mayor que cualquiera que haya visto, y en medio el símbolo de la lechuza de Atenea se hizo notar. No solo fue expléndido, sino que se prolongó mucho más que nuestro reconocimiento, y vino acompañando de una gran espada de plata reluciente con un grabado en griego antiguo.
-¡Que injusticia yo quiero eso también!-lloriqueó Juli en broma.
-¡Yo también, bo !-replicó Vicky, pero un poco más seria. El "espectáculo" no duró demasiado, terminó cuando Rachel Elizabeth Dare, la auténtica, el oráculo de Delfos; hizo una aparición desde dentro de los árboles junto a Quirón, Leo y Piper. Me sonaba a malas noticias, principalmente, porque aquella, ahora extraña luz, seguía reluciendo.Holaaa, espero les haya gustado, y perdón por tardar en escribir (de nuevo).
-Manuuu
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Las hijas perdidas
Fanfiction¡Carolina, todo esto es culpa tuya! - chilló Vicky, colgada del otro lado del aro de básquetbol. Su grito resonó, haciendo eco por todo el gimnasio, indicando la soledad de éste. Igualmente, no duró mucho. - ¿¡Qué hice yo ahora!? ¡En todo caso fue t...