07. Ciudad Meteoro me necesita...

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Siendo pasada la media noche en mi país, he aquí el otro cap.

Aclaración:

Las letras Cursivas: Son recuerdos o Flash backs o Sueños.

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Al día siguiente empaqué las pocas cosas que tenía, Hisoka tenía un pequeño regalo para mí, unos pendientes en forma de picas que hacían juego ahora con otra chaqueta de cuero que había hecho para mí. Me guardó unas vendas, y el desinfectante.

Le abracé fuertemente, a lo que él aprovechó la situación, un beso apasionado y aquel susurro otra vez "Será mejor que llegues preparada, recuerda que me debes los entrenamientos~". Salí rápidamente mientras daba un portazo, estúpido payaso, mi corazón latía a mil, ¿Por qué hacia ese tipo de cosas?

Con un mapa a mano me dirigí a ciudad meteoro, el camino era largo y debía entender a qué se refería ese mensaje, al llegar a un teléfono público, marque el número que me daba la información, me sorprendí al escuchar la voz de uno de los abuelos que conocía mi hermano, él estaba preocupado por la gente de allá, alguien con entrenamiento les estaba robando sus ingresos monetarios, me hirvió la sangre y le comenté que en 3 días debía de llegar. Tomé un tren que me acercaría para comenzar el viaje a pie, si todo iba bien, sería un viaje de 2 días y podría volver en otros 2 días. El tren lo tomé vacío. Una habitación con solo un camarote.

Me recosté en la cama para estirar mi cuerpo, me dolían las heridas del entrenamiento, quiere decir que Hisoka no había sido capaz de utilizar mi flecha de curación, la invoqué y me desvestí, iba a curar las heridas, fui quitando las vendas, el mago este había hecho un gran trabajo. Después de todo es un imbécil con sentimientos, es capaz de sentir preocupación y deseo, algo era algo, aunque me molestaba de sobremanera que los escondiera tan bien. Las heridas de mi cuerpo estaban completamente sanadas, me preocupaba la del cuello, quité la venda que tenía, pero la piel estaba lisa, había una parte que parecía se iba a desprender, esta era la otra habilidad de él, bastante útil si quieres ocultar algo, pero pareciera que no sirve mucho para poder sanar correctamente. Quité aquello con sumo cuidado, mientras lo desprendía iba curando la herida, esta sí que dejaría una pequeña cicatriz, pero ya que, podía decir que gracias al entrenamiento tenía esta pequeña y casi mortal herida de guerra.

Me pasé el viaje practicando Ren, Ten y En. Y cuando comenzó a darme hambre abrí el bolso para darme cuenta que dentro había un pequeño paquete y una nota. Abrí la nota y supe enseguida de quien era. "Cuando vuelvas espero que puedas imitarme, pequeño damasco, XoXo ☆*-* ♥". Luego de ver aquello abrí el pequeño paquete, era un naipe inglés. Todo en mi cabeza tuvo sentido, el maldito quería que lo imitara, tampoco era una mala idea, esto definitivamente era parte de su entrenamiento. Lo abrí y tomé una carta. Se supone que si la impregno de aura y luego la lanzo esto funciona. No parece para nada difícil. Me entretuve lanzando cartas, pero ninguna lograba hacer ningún daño, de hecho, cada vez que mi mano se desprendía de aquello estas perdían todo el poder. Fue más complicado de lo que pensé, si Hisoka hubiese estado allí en ese momento me habría presionado para que lo lograra. Así que no podía dejarme vencer. Antes de que el tren llegara a su destino debía hacerlo.

Comencé a probar distintos estilos, distintas formas de pensar, todo, pero nada lo lograba. Quizás no era algo tan técnico. Concentré aura en uno de mis dedos y luego la liberé lentamente, está funcionaba al igual que mis flechas, volví a intentarlo, esta vez sabiendo que sería de esta forma y lancé la carta sin mayor fuerza, la carta al caer al piso se incrustó. Lo había descubierto, no era nada más que dejar de analizar y pensar que una parte de ti continuaba allí. Y de esa manera lancé una carta al muro con rapidez, esta hizo exactamente lo que debía, no era tan complicado después de todo. Tomé las dos cartas y me dediqué a dormir.

El joker y la Reina de espadas (Hisoka)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora