A su merced; BTS

Capítulo 19 "No otra vez"

Las llamadas y mensajes de Demian eran cada vez más constantes. ¿Qué no entiende que no puedo contestar?

-Le dices a ese chico que deje de llamarte por las buenas, o voy yo y le digo por las malas -amenazó Suga-.

Bufé.

-Debes cambiar tu jodida actitud, Suga

Me miró serio, sin embargo salió de la sala donde estábamos.

Apoye mi mentón en la palma de mi mano.

¡No quiero separarme de Demian!

Lloriquíe unos segundos, a la vez que no paraba de moverme en el sillón. Estaba inquieta.

-¿Porqué tan berrinchuda?- preguntó Jimin, tocando mi nariz con la punta de su dedo índice-.

Le ignore.

-Hey, ________ -se sentó a mi lado- ¿Me estas evadiendo?

-Es una hipocresía que me hables otra vez - me crucé de brazos-.

¿Lo dije en voz alta?

Miré donde Jimin, tenía su ceja alzada. Luego río.

-¿De qué hablas, hipocresía?

Gruñí.

-No me ayudaste con el castigo, además que con Demian tampoco

-¿Porqué ayudar en algo que no me conviene?- susurro acercándose-.

-No te acerques -levante mis manos en modo de defensa-.

Hizo caso omiso a mi petición y siguió avanzando, hasta quedar frente a frente contra mi, por ende mis manos se presionaron contra su trabajado pectoral.

-Aléjate

-Déja unirme en ti - pidió en mi oído-.

Jadié en voz baja.

-Estamos en el sillón, Jimin

-¿Y?- sonrió de lado-.

Sacó por sobre su cabeza la remera, dejando ver su llamativo corporal.

-¡Rata! -gritó Taehyung bajando las escaleras-.

Me separé de Jimin rápidamente.

-¿A quién llamas?- pregunté, calmando mi respiración por el suceso anterior-.

-Esa rata, Jungkook

Reí, la tensión sexual ya había desaparecido.

-¿Porqué?

-Se escondió de mi

Jimin gruñó.

-¿Qué tanto hacían?- preguntó V con doble sentido-.

-Nada, lo has interrumpido -contestó molesto Jimin-.

Taehyung carcajeó y subió nuevamente las escaleras, no volvió mas.

Escuché un suspiro de Jimin, seguido de un aliviado "Se fue".

No logré responder debido que me tiró de espaldas al sofa.

-¿Pero qué...?

Me calló con un inesperado beso fogoso.

-No perdamos más tiempo

Mi chaleco desapareció de escena. "Eres hermosa" dice cegado. Rompió con fuerza la parte media de mi sujetador. Liberando mis montículos.

-Inpuro deseo, maldita tentación que me haces sentir -gruñó-.