¡Maldición, como duele mi trasero!
Bufé y bajé las escaleras. Donde los chicos tomaban desayuno.
¡Qué dolor de infierno!-Miren como cojea- comentó el gracioso Suga-.
Pesque el emparedado que había en un plato y se lo tiré. Este agilmente lo esquivo.
-¡Mi comida!- gritó Jin-.
Su gritó me hizo doler la cabeza.
-¿Porqué chillas, princesita?- gruñi tocando mi cien-.
Me miró ofendido.
-RapMon, ¡dile algo, me llamó princesita!- lo golpeó en el hombro-.
-No soy tu defensor, abuela
Di una carcajada.
-Recoge el emparedado, _______ - pidió Jin-.
Con malos ánimos fui hasta donde estaba el desastroso pedazo de pan. ¿En serio me tengo que agachar?
-Auch- me quejé-.
Dejando mi trasero en pompa, estire mis brazos por el jodido pan.
Escuché un chiflido detrás, acompañado de un "¡A ese culo si me lo cojo!".
-Siempre tan decente J-Hope -dijo Jimin enojado-.
J-Hope se encogió de hombros riendo y me ayudo a enderezar mi cuerpo. Me sonroje.
-Gracias
Dejé el emparedado de mala gana en el plato de Jin, el cual lo rechazo.
-Tiene pelos -dijo asqueado-.
Suspire tratando de calmarme.
-Me hiciste agachar, considerando que ayer me dieron unos animales sin control...
Jungkook río bajo.
-Para que recogiera ese pedazo de mi.erda, ¿¡y ahora no te lo comes?!
Esto no se queda así.
Ignorando el dolor, me subí sobre Jin y tomé el emparedado.
-¡Abre la boca!- le grité a Jin-.
-¡Ya empezaste, loca!
Trate de abrir su boca y meter el emparedado, pero Jin me tomó de los brazos y me tiro al suelo, caí de trasero.
¡La puta madre, auch!
-¡Loca te dicen en la cama, pasiva de mi.erda! - me levanté del suelo con un dolor horrible y fui a mi habitación-.
Qué vergüenza. ¿Cómo es que le dije eso a Jin?
Oculté mi cara con las manos. Que embarazoso día. ¿Hay algo que pueda remediarlo?
-Todo se arregla con música
Dicho esto tomé mi celular, pero anule mi acción de escuchar música al ver que tenía los mensajes de Demian.
Perfecto.
Ya arreglada y dispuesta a mi próxima rebeldía, abrí la ventana de mi habitación.
No era muy alta la distancia de la ventana con el suelo. ¿A quién engaño? ¡Es un segundo piso!
-Bingo- susurre para mis adentros-.
A un lado de esta había un matorral de árboles que llegaba hasta el suelo. Si me caigo, me parto el culo, pero que más da. Necesito salir de aquí.
Con sigilo y precaución me tome del matorral y fui bajando despacio. Era extrañamente estable y llegué sin un rasguño al suelo.
Corrí lo más rápido posible a la salida, suspire aliviada al ya estar fuera de la mansión de estos chinos raros.
Demian, voy por ti.
-Creí que no vendrías- sonrió de lado-.
Se me olvidaba lo atractivo que era.
-Perdón la demora, me perdí -reí avergonzada-.
-No hay problema, ¿quieres pedir un helado y luego ir al cine?
Apreté mis labios. No disponía de mucho dinero como para una entrada de cine.
-Y descuida, yo pago
Asentí entusiasmada.
El camino al cine sólo consistió con "eres un santo, muchas gracias, algún día te lo pagaré".
-________ realmente no fue nada, no te preocupes
Suspire rendida.
-¿Acción, romance o terror?- preguntó viendo la cartelera-.
Quedé mirando por unos segundos las películas.
-Terror -dije-.
-Así será -sonrió alegre-.
Camino hacia la boletería. Fue inevitable no mirar su trasero.
Buena elección, ________. Casi y hasta tiene más que yo.-Comenzará en 5 minutos más, vamos -tomó mi mano inconsciente-.
Pero la soltó de inmediato, susurrando una disculpa y bajando su cabeza.
-Vamos - tome nuevamente su mano y le sonreí, tratando de transmitirle tranquilidad-.
Ya dentro de la sala cinematográfica, a mitad de película:
-¡Demian, no mueras, respira!- grité en medio de la película-.
¿Quién lo diría? De un susto se atragantó con una palomita.
Muchos se giraron y me callaron con el tan molestoso "¡Shh!".
-¡No me shushén y ayúdenme, mi amigo esta atragantado!
Este estaba tirado entre dos asientos. Y abría su boca constantemente, buscando aire.
-Demian, no estires la pata, estoy contigo- tomé su mano-.
Este río ante mi comentario, lo que al parecer lo ayudó a toser y la palomita de maíz cayó en mi chaqueta.
-¡La escupió!- grité con esta en mi mano, saltando-.
-¡Ya cállate!- gritaron todos al unísono-.
-Uy, que genio tienen - me senté junto a Demian de nuevo- Pensé que morirías
-También creí eso, perdón por arruinar la película
-No fue nada, Demian
-Te vez linda preocupada - besó mi mejilla-.
Reí estúpidamente y me acomodé para terminar de ver la película. Pero esta vez, con la mano de Demian entrelazada a la mía.
Mi celular vibró unos segundos. Me había llegado un mensaje.
Sin soltar la mano de Demian, lo saque sin importancia y leí que decía.
[¿Creíste que no nos daríamos cuenta?]
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A su merced; BTS
Fiksi PenggemarLos lados más oscuros, deseados y lujuriosos de los cantantes Jungkook, Taehyung, Jimin, Jin, Suga, J-Hope, Rap Monster. Los deseos siempre complacen, pero siempre esta el peligro de someterse al amor.