El Amor del Cerezo

Ilución

-¿Como me llamaste? -. Le pregunte.

-Eh... ¿De que hablas? ¿Aishi-san es tu apellido no? -.

-Es que... No olvida lo, se me cayo eso ¿verdad? -. Apunte a mi cepillo que tenia entre sus manos.

-Eh... Si, toma -. Lo tome, mi mano roso la de él y sentí su calor, pero... No era el mismo que sentí cuando me ayudo a levantarme la primera vez que lo ví, él parecía no ser él realmente.

Llegue al baño, y me mire en el espejo.

Algo no estaba bien, ¿todo era de verdad o simplemente un sueño?, aunque pareciera lo mas real posible, al mismo tiempo no lo era.

Golpee el espejo, se rompió en varios pedazos, los cuales algunos cayeron en el lava manos.

Tome uno de los espejos rotos y me decidí en enterrar me lo en la pierna, si esto no era real mis sentidos asesinos lo notaran.

En cuestión de tiempo el dolor, obligo a mi lado Yandere a aparecer, se notaba porque mi cara estaba oscura y mis ojos deseaban sangre.

Cerré los ojos, lentamente los volví a abrir.

Todo estaba oscuro y el baño había cambiado completamente su color, me quite él pedazo de espejo de la pierna y empecé a caminar por la casa, no sin antes tomar una toalla y envolver mi herida.

Todo era igual que en la ilusión, pero en ella todo tenia un color mas alegre, mas claro ¿o tan solo yo quería verlo así?.

Ahora me doy cuenta, que los cariños y el amor que me daba no era real, el vivir al fin con Senpai y que al fin me correspondiera...

¿Todo en verdad fue una mentira?

Mire al sillón, donde debería estar sentado "Senpai" estaba una chica con el cabello oscuro y piel pálida.

-He... ¿Que pasa? -. Me pregunto al verme parada mirándole.

-Tu... ¿Quien eres? -.

-¿De que estas hablando?... -. Bajo la mirada y vio la toalla llena de sangre, se levantó de inmediato -Pero que has hecho!! -.

-Te conozco eres Oka Ruto la líder del club de ocultismo -. Ella se sorprendió.

-Pero... ¿Porque? -. Me miro directo a mis ojos, y sonrió -Veo que al fin lo notaste -.

-¿Porque me tienes aquí? Y eso no es todo si no que detrás de una mentira -. La mire con odio.

-Necesito que estés conmigo hasta que encuentre la forma de invocar a los 3 demonios mas poderosos -. Dijo dejando el libro que tenia en sus manos en el sillón.

-¿Porque yo? -. Pregunte.

-Porque eres la única que puede ver fantasmas y espíritus -.

-¿De que hablas? -. Estaba confundida.

-No te hagas, el día que viste al antiguo líder, ese día sabia que era una esperanza -. ¿En verdad lo ví? Entonces no era una cosa de mi imaginación.

-¿Y cual es tu objetivo? -.

-Traerlo de nuevo a la vida -.

-Y si yo te ayudo me dejaras ir -.

-Claro, aunque no se que cambio provoquen los espíritus en ti -.

-¿Puedo pedirte un favor? -. Pregunte algo triste.

-¿Cual seria? -.

-Si salgo viva ¿Podrías hacer que olvide a Taro? -.

-Supongo que si se pero eso solo se podría hacer si de verdad quieres olvidarlo -.

-Y si no salgo viva... ¿Podrias hacer que los chicos me olviden? -. Lágrimas caían por mis mejillas, me dolía decirlo, no quería que me olvidaran, pero... Porque tenia que llegar hasta este punto para darme cuenta.

-Estas dispuesta a hacer ese sacrificio por ellos -.

-Claro después de todo mi vida ya estaba condenada sin Senpai... -. No podía sostenerme en mis piernas, así que caí arrodillada.

-Oh... No... estas perdiendo mucha sangre -. Dijo acercándose a mi.

-No importa, has el conjuro antes de que muera desangrada -.

-Yo no puedo hacerlo -.

-¿Como que no puedes? -.

-Solo el antiguo líder podía hacerlo y él, aparece a veces -.

-Entonces voy a morir -.

-No!!... Solo resiste un poco mas -.

-No creo poder resistir más -. Caí de cara al suelo.

-Aishi-san, Aishi-san... Aishi-san!!... -. Cerré los ojos y sus gritos ya no podía escucharlos.

...

Esta Oka era una idiota, solo me fui por unos segundos y ya Aishi-san estaba en el suelo.

Volví a tomar el cuerpo de Oka, como lo he hecho desde que ví que Aishi casi se mata en el cerezo.

Una luz nos rodeaba, yo controlaba el cuerpo de Oka, mientras que ella dormía, tome a Aishi, su sangre volvía lentamente a su cuerpo, no sabia porque pero mi magia solo era activada cuando se trataba de ella.

Su herida se cerro sin dejar cicatriz y sus ojos se abrieron al sentir mi tacto, se notaba que me reconocía, pues se negaba a ser tocada por otro hombre.

No se porque pero eso lo encontraba adorable.

Sin mas que decir, recite el hechizo, el cual me traería de nuevo al mundo.

Se que los muertos no pueden revivir pero yo no estaba muerto, solo un hechizo fallido me obligo a permanecer en el otro mundo, hasta que encontrara la manera de salir.

De un momento a otro ya estábamos en la otra dimensión.

Yo mantenía el cuerpo de Oka pero no por mucho, recite las palabras y un circulo de conjuros apareció de bajo de nosotros.

Aishi ya no se mantenía en mis brazos, flotaba en frente de mi  para dejarme más libertad.

...

Al fin sabíamos donde estaba Ayano, en este momento nos dirigimos a ese lugar, no sin que el profesor y el enfermero fueran con nosotros no debimos haber hablado tan fuerte en horas de clase.

Osoro rompió la puerta de una patada.

Corrimos hasta llegar al comedor.

Un conjuro activado en el suelo se notaba y llenaba de oscuridad toda la habitación.

Leía muchos mangas de ficción.

Pero sabia exactamente lo que era.

-Es un portal -.

-¿Que?!! -. Gritaron todos ya que el portal absorbía el aire haciendo un ruido de fuerte viento.

-Seguro Ayano esta dentro -. Dijo Ayato.

-Entonces que esperamos -.

-Esperen y si no vuelven -. Dijo Info-kun que seguramente se quedaría fuera esperándonos.

-Si lo haremos -. Dijo Neme-kun que miro a Ayato y le sonrió, al parecer era una señal ya que ambos saltaron dentro del portal.

Nosotros tomamos aire y saltamos dentro, no podíamos saber que es lo que nos esperaba.

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Esta inspiración no me deja ni dormir, cada vez se me ocurren mas capítulos espero que puedan leerlos todos.

Voten, Comenten y disfruten.

Bye Bye.