Un Regalo

1.2K 165 22
                                    

Cuando el recuerdo hubo ya terminado y pude comprender su razón de ser y comportar, intente avanzar pero por razón inexplicable mis piernas no se movían.

No es que estuvieran pegadas al suelo o algo solo no podía moverlas o controlarlas.

Me decidí en llamarlo para sacarlo de su trance, pero mi voz parecía inexistente, no emitía ningún sonido.

De repente todo era negro, y ondas aparecieron en la habitación como si fuera una gota cayendo en el agua.

Alguien había vuelto a entrar en el portal, lo sabia porque volvió a temblar tan fuerte esta vez que me hizo caer.

Intente levantarme pero algo no me dejaba.

Podía escuchar voces horripilantes y susurros fantasmales.

¿Que era esto? lo peor era que estaba en mi mente ¿que es lo que escucho?, me duele, dejame!!

Manos demoniacas aparecieron rodeando me, me empecé a desesperar.

-Alejate!! Sueltame!! -. Gritaba intentando alejarlas.

Era un sentimiento nuevo y horrible tenia Miedo, a algo que no existía o que no podía ver.

Cerré los ojos fuertemente y grite.

-Dajame en Paz!! -.

………

Narra Osma

¿Que era este lugar? Era completamente igual al que estábamos antes de entrar a la puerta, pero en este estaba lleno de personas la mayoría chicos, aunque habían dos personas sentadas en sillas flotante y una de ellas se me acerco.

-Hola soy Fun Girl y el chico de allá es Fun Boy -. Dijo hiperactiva mente apuntando al otro chico vestido de blanco y negro, no sabia que hacer ¿Le respondía a este ser extraño? Nadie parecía fijarse en mi, todos estaban con "Ayano".

-Soy Osma Najimi -. Le respondí.

-Que bien, otro chico enamorado de Ayano ¿Verdad? -.Me sonroje hasta los orejas.

-No... Yo no... -. Tartamudeó sin querer pero ella me interrumpe.

-No puedes negarlo, soy un demonio, yo lo se todo -. Dijo con suficiencia.

-¿Y que pasa si es así? -. Le pregunte.

-Bueno, a mi no me importaría, pero tu vida correrá peligro aquí ya que todos ellos sienten lo mismo que tú -. Dijo apuntando a todos los chicos que estaban con Ayano.

-No me intimidaran -. Dije convencido.

-No chico no entiendes ellos no intimidan, ellos te mataran -. Me sorprendí, eso daba miedo pero yo no seria una oveja mas, seria otro lobo que pelea por su presa.

-¿Acaso crees que me dejare vencer? -. Le pregunte, ella sonrió, una sonrisa espeluznante pero parecía divertida.

-No lo se, pero te haré una pregunta que es lo que elegiste ¿Amor o amistad? -. Me sorprendí hace un momento yo me había hecho la misma pregunta, acaso esta chica podía leer mi mente.

-A-Amistad -. Dije dudoso.

-Pareces dudar, pero si eso es lo que crees puedes hacer lo que te de la gana, aquí no hay reglas y si mueres aquí, nadie en el otro mundo te recordara -. Me advirtió, ahora mi estomago se contrajo, jamas olvidaría esas palabras, ya que tal vez como me las dijo a mi también se las dijo a ellos.

-Por mi esta bien -. Dije decidido.

Escuche que varias puertas se abrieron y de ellas, salían lentamente, cosas horribles inexplicables con palabras, cuando volví a mirar a donde estaba Ayano ella ya se estaba yendo por una puerta, antes de que pidiera llegar esta ya se había cerrado completamente.

Me apoye en ella, y mire hacia el suelo.

"Esto no te incumbe, escogiste amistad, no rompas tu promesa, no te dejes engañar por ellos"

Me decía a mi mismo en mi mente, mire que justo en mis pies estaba el libro que traía Ayano, lo tome.

Cuando ella dormía susurraba cosas como, "Libro... Dar... Okoto" supuse que era un sueño pero tal vez quería dárselo a alguien de aquí.

Mire alrededor, todos miraban atentos hacia las puertas abiertas, estando preparados para cualquier cosas que salieran de ellas.

Todos menos un chico, que parecía proteger a una chica detrás de si mismo.

Las cosas salieron y ví que había un arsenal de armas a mi derecha, no cogí ninguna ya que lo que mas se acomodaba con mi estilo de pelea era sin armas.

Cuando ya las cosas salieron de las puertas y atacaron todo empezaron a pelear, se esfumaban cuando eran derrotadas.

Cuando una me ataco a mi todos ellos me miraron, al ver que podía pelear y lo derrote de una sola patada se sorprendieron, tal vez no soy tan débil a como me veo.

Cuando atacaron al chivo "Emo" ocupo algo de magia en ello, por lo que yo me sorprendí era igual a la que había usado Ayano, pero mas débil ya que con 4 o 5 golpes de esos eran derrotados, y eso se le notaba que lo cansaba.

-Hey!! Chico Emo -. El me miro -¿Como te llamas? -. El miro a varios lados y pregunto.

-¿Crees que este es el mejor momento para conocernos? -. Dijo y yo derrote a otro mas de esas cosas, con el libro en mano.

- Solo responde, Chico Emo!! -. Le grite.

-Okoto!! -. Grito y de inmediato pregunto -¿y tu chico naranja? -. Sonreí, ante tal sobrenombre.

-Osma y... -. Le tire el libro y este lo atrapo -Eso es para ti -.

-¿Que es? -. Dijo mirándolo, tal vez le extrañaba por que no tenia portada.

-Solo abre lo -. Le ordene, y el lo abrió.

De el salieron espíritus de diferentes colores, las cosas que nos atacaban corrieron asustadas por esto y entraron a las puertas cerrándolas completamente y no volvieron a abrirse, la portada del libro cambio de ser una sin color a una con una estrella y bordes color dorado, tal vez se transformo al gusto de aquel chico.

Todos miraban fascinados la escena incluso esos demonios tenían la boca abierta.

El chico tenia los ojos cerrados y flotaba en el aire, parecía absorber energía del libro, tal vez porque el libro y el se complementaban.

-¿Que le diste? -. Me pregunto el chico Fun Boy.

Yo solo me cruce de brazos y Sonreí con suficiencia.

-Un regalo de Yan-chan -.

                          -----*-----
Nueva actualización.

Deseada por muchas.

Gracias por sus hermosos comentarios, y también por el apoyo que le han dado al Fanfic.

Voten, Comenten y Disfruten.

Bye Bye.

El Amor del CerezoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora