LA EDAD ES SÓLO UN NÚMERO.

Capítulo 12

Mientras, Marc se va para Cervera sin poder dejar de pensar en Ana. Le encanta, ha entrado en su vida como un soplo de aire fresco justo en el momento oportuno y, aunque le da miedo porque él tenía claro que no quería sentir nada por nadie porque su vida son las motos, se da cuenta que no ha podido evitarlo y que sí.... Quiere a Ana, la necesita a su lado, quiere compartir con ella lo bueno y lo malo, quiere poder decir a su gente que es ella.... que es la mujer de su vida y quien va a compartir todo con él.... Sí, aunque no sabe como ha pasado, él, Marc Márquez, se ha enamorado con locura y siente miedo de que ella no sienta lo mismo o que le rechace por sus miedos. Dos días le han bastado para saber que Ana es su princesa, aquella mujer que ha estado esperando toda la vida.
Con esos pensamientos llega a su casa y, cuando sube, ve luz en la habitación de Alex así que entra porque necesita hablar con él y desahogarse con su mejor amigo, con quien más le entiende y le apoya.
-M: Hola hermano.
-AM: Ey bro ¿qué tal? ¿Ya dejaste a Ana?
-M: Sí, se quedó en su hotel. Por cierto, un segundo que voy a decirle que he llegado ya para que duerma tranquila.
Coge el móvil y abre el whatsapp.
-M: Hola Ana, ya estoy en casa.
-A: Me alegro. Pues a descansar que mañana toca un poco de entreno. Por cierto, gracias por enseñarme parte de tu vida y dejarme ser parte de ella por un rato. Estoy que no me lo creo aún.
-M: Gracias a ti princesa por querer entrar en ella y te prometo que haré lo posible porque te quedes porque te necesito.
-A: Marc...
-M: Descansa mi niña. Mañana hablamos. Un besazo enorme. Buenas noches.
-A: Buenas noches niño.

Marc suelta el móvil y le sale un suspiro mientras se queda mirando a un punto fijo.
-A: Hermano ¿estás bien?
-M: No Alex, no estoy bien. La necesito en mi vida y me lo está poniendo muy difícil. No sé como ha pasado porque tú mejor que nadie sabes lo que pensaba yo de las relaciones. Pero ayer, cuando nuestras miradas se cruzaron en la fiesta, supe que era ella... Supe que había encontrado a la mujer que siempre había estado esperando. Han pasado sólo dos días y estoy enamorado de ella Alex y tengo miedo...
En cuanto dice esto se abraza a Alex y llora... Nunca suele hacerlo pero lo necesita. Tiene un nudo en el estómago que sólo se le quitaría con un abrazo de Ana, con mirarla.
-A: Tranquilo Marc. Me di cuenta desde ayer que algo había pasado porque vi vuestra mirada. No sé lo que le pasa a ella pero si puedo decirte que le importas mucho más de lo que crees.
-M: Pero no quiere nada Alex. Dice que por la distancia, por la edad, que yo seguro que tengo a chicas mucho mejores que ella y que no quiere sufrir. Y se me va el sábado y no sé si la veré de nuevo.
-A: Habla con ella, sincérate, dile todo lo que me estás diciendo a mí. No esperes más. Te quedan estos días para convencerla y hacer que crea en ti.
-M: No pensé que esto sería tan difícil Alex.
-A: Ya verás como todo irá bien. ¿Quedaste con ella mañana?
-M: Sí, después de salir en bici iré a buscarla para comer juntos.
-A: Pues entonces llévala luego a pasear por algún sitio tranquilo y habla con ella.
-M: Lo intentaré pero ¿y si me dice que ella no siente nada por mí o que no quiere?
-AM: Te aseguro que no te dirá que no. Que le cueste puede ser pero ya verás como sale todo bien.
-M: Ojalá... Bueno te dejo descansar. Mañana nos vamos con la bici un rato ¿no?
-A: Si no llueve sí. Y si llueve te vas directamente a por Ana para que no esté en el hotel todo el día sola. Y ahora tira a dormir enamorado. Buenas noches.
-M: Buenas noches Alex y gracias por escucharme.

Marc se va a su cuarto pero tarda un buen rato en dormir pensando en como explicarle a Ana lo que siente y convencerla que se quede con él. Al final cae rendido y se duerme.
Despierta pronto a la mañana siguiente y lo primero que mira es como está el día. Entonces ve que está por caer una tormenta así que se va al cuarto de Alex a decirle que no va a entrenar y que va a llamar a Ana para pasar el lunes entero con ella.
Le manda un mensaje por si aún está dormida no molestarla pero ella enseguida le contesta que ya está despierta. Entonces Marc le dice que va a buscarla para ir a desayunar y pasar el día pero ella le dice que mejor se quedan a desayunar en el hotel porque le da apuro que les vean y reconozcan a Marc y entonces él se agobie por su culpa.
Marc se arregla y se marcha hacia el hotel de Ana no sin antes despedirse de su madre que le lleva observando desde que se ha levantado y lo ve nervioso, pero prefiere no preguntar nada de momento aunque con ella Marc tiene mucha confianza y le cuenta muchas cosas.
Una vez llega al hotel Ana ya está esperándole en la puerta y su corazón empieza a latir con fuerza sólo con verla.
-M: Buenos días. ¿Has descansado?
-A: Buenos días, pues sí. He recuperado bastante sueño atrasado.
Entran a la cafetería del hotel a desayunar y, una vez acabado, suben a la habitación porque se ha puesto a caer una gran tormenta y no les apetece mucho andar por ahí de paseo.
Ana está nerviosa porque está con Marc Márquez sola en una habitación por primera vez, sin nadie que pueda venir a interrumpirles. Además sabe que tienen una conversación pendiente pero no cree que sea el momento de charlar ahora aunque sabe que él no se rendirá.
-M: Bonita habitación.
-A: Gracias. Esta genial pero pasar muchas horas dentro sin hacer nada tampoco mola. Al menos tú me has ayudado a que el tiempo me pasase más rápido y he vivido momentos increíbles que nunca olvidaré cuando vuelva a casa.
-M: Ana.... Necesito hablar contigo. Por favor, siêntate un rato aquí.
-A: Marc, no por favor. No quiero sufrir.
-M: Por favor, sólo escúchame. Luego, si quieres que me vaya, me iré y no volveremos a vernos más.