entre magos y vampiros; el secreto de los gemelos Potter

13 Mas noticias, confesiones y un perdon

Aun no podía creer lo que había pasado, era una bruja y no sólo eso que tenía un hermano gemelo perdido en algún lado del mundo. Aro la miró pidiendo perdón con la mirada, debía decirle la otra verdad, debía darle a conocer quién había mandado aquel extraño libro para ella y que, en un arranque de celos, Aro lo tiró, no a la basura ni al fuego, pero sí lo escondió, porque no quería que personas extrañas se acercaran a Lily sólo porque se creían con ciertos derechos sobre ella.

Suspiró.

¾ Lily – la llamó – hay algo más aún

¾ ¿Aún hay más? – Preguntó Lily mirándolo, ya no se sentía molesta, sólo triste

Aro asintió con el rostro contraído.

¾ Sí cielo, espera voy por él – y desapareció a velocidad vampírica del lugar, Lily suspiró, tantas cosas en un solo día

Renata trataba de darle ánimos, le acariciaba tiernamente los hombros a Lily para que se calmara, Lily sonrió triste.

¾ Gracias Renata – susurró, sabía que la vampira la oiría, Renata asintió

¾ Debes entender que lo que el señor Aro hizo fue por tu bien, que sólo buscaba tu protección y nada más. Nunca fue su intención hacerte daño

¾ Lo sé – susurró mirando el suelo

¾ Descuida pequeña – dijo Alec – todo saldrá bien, ya lo verás

¾ Eso espero – murmuró, Alec podía sentir una ola de emociones negativas y tristes provenientes de Lily, sintió algo en su pecho de roca, como un tirón

Aro regresó con una caja en sus manos, no era muy grande pero sí se veía algo grueso. Lily alzó una ceja ¿qué demonios era eso? Aro tenía una mirada perdida, vacilante; debía hacerlo de una vez, ya se lo había dicho y como para salir con que siempre no... Suspiró, Lily debía saber quién era ese hombre, porqué mandaba tantas cosas y porqué nunca se rindió en su búsqueda. Lily miró a su padre que estaba tratando de luchar contra sí mismo, algo muy raro en Aro Vulturi. Sulpicia lo abrazó con amor y le dio un beso en la mejilla, Aro sonrió triste y miró a Lily.

¾ Cuando cumpliste los 10 años, te llegó esto – mostrando la caja – te lo mandaron como regalo de cumpleaños –susurró, Lily no tenía emoción alguna en los ojos – creí, creí que querían buscarte, que intentarían convencerte de irte con ellos – la miró – por eso, decidí recibir esto pero envíe una nota diciéndoles que no te buscaran de nuevo, que tú no pertenecías a ese mundo del que te querían meter, así que guardé esto sólo porque hubo algo que me impidió destruirlo

Le tendió la caja a Lily que la tomó vacilante, era de color negro con un listón rojo.

¾ Sé que no merezco tu perdón después de esto, pero debía protegerte, ahora eres un Vulturi y como tal, no permitiría que te hicieran daño, menos que humanos extraños se te acercaran. Así que decidí alejarte de ese mundo al que no quería que pertenecieras, no por egoísta ni celoso de que alguien tomara tus dones hija, sino por miedo a que le lastimaran, a que te hicieran algo, a nunca verte más

Lily abrió con cuidado la caja, era un libro; era un libro extraño y que, estaba en inglés. Lo miró de arriba abajo, examinándolo, tratando de entender quién se lo había mandado. Abrió con cuidado el libro notando que tenía, en la primera página, una hoja suelta.

¾ ¿Hu? – miró extrañada la hoja – ¿y esto?

Todos estaban esperando, mirando a Lily como quien mira una bomba a punto de explotar. A la deriva, expectantes de lo sucedido, siendo únicamente los espectadores de una película a la que sólo podía mirar, no actuar. Lily desdobló con cuidado la hoja, era una carta, una carta que iba a ella, sólo a ella.