Dieciséis

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... Faltan 7 horas...

- Señores, todo lo que van a oír es alto secreto y estrictamente confidencial –Dijo Tonino, frente a sus compañeros más cercanos y de confianza, mientras cerraba las ventanas de la sala de reuniones- Nadie, ni el comisario, ni el CNI, saben lo que les vamos a contar a continuación. Por eso, les tengo que pedir código silencio –Todos y cada uno de ellos asintieron con la cabeza- Sabemos dónde y cuándo va a actuar el Káiser, podemos reventar el robo del siglo y también limpiar el nombre de alguien que conocemos todos –Respiró hondo- No puedo pedirles que se queden, porque vamos a cruzar la línea, los límites. Si alguien se arrepiente o no quiere participar, que dé un paso adelante.

Nadie se movió, lo que le indicó a Tonino que todos estaban de acuerdo.
Sin más, abrió el portátil, entró en la aplicación "Skype" y comenzó una video llamada. Al otro lado de la pantalla apareció Daniela.
Todos se sorprendieron, algunos rieron, lloraron... otros, simplemente, se quedaron estupefactos.

- Esto es un vídeo, ¿no? –Preguntó uno de ellos.

- Nada de vídeos, estoy viva –Respondió ella- Lo siento, siento haber hecho que pensarais que estaba muerta, pero no me quedaba otra.

Daniela explicó con lujo de detalles todo lo ocurrido esas últimas semanas, sin ser interrumpida en ningún momento.

- El robo del siglo va a ser dentro de 4 horas –Comenzó con lo importante- En Murcia, en la base militar y os necesito a todos.

- ¿Qué base militar? ¿La del ejército del aire? –Preguntó un compañero, sorprendido.

- La misma –Respondió Marco, aparentemente indignado.

- Ya sé que es peligroso –Continuó la rubia- Pero esta gente ha matado, ha secuestrado, ha robado, ha torturado y va a seguir haciéndolo, hasta que nosotros los paremos. ¡Y los vamos a parar! –Tras esa exclamación, se creó un silencio en la sala, nadie parecía muy convencido- Lo único es que tendremos que hacerlo de extranjis porque, a estas alturas, el CNI no me va a creer. ¿Estáis conmigo?

Después de que se creara un ambiente un tanto incómodo, Tonino y Marco fueron los primeros en decir que sí, siendo seguidos por el resto de compañeros.

- Muchas gracias, chicos. Solamente una cosa... Vamos a tener que darnos un poco de prisa, porque a las 8 tengo otra cita –Todos la miraron, sin comprender- Que me caso –El asombro no salía de las caras de ellos- Con Elettra –Y eso fue lo que lo remató- Nada, una larga historia.

Tras escuchar la noticia completa, algunos reaccionaron mejor y otros peor, pero todos felicitaron a Tonino.

**

En el bar, Luisa junto a algunas amigas y compañeras de Elettra, estaba planeando una video llamada por Skype. Tras varios intentos, consiguieron comunicarse con ella por fin, quien estaba muy emocionada ya a pesar de quedar varias horas..

- Amore, después de todos estos importantes consejos –Dijo su madre, con ironía, pues las amigas le habían dicho de todo menos cosas decentes- Volevo dire una cosa... Que me da mucha envidia la boda que vas a tener –Elettra sonrió, emocionada, escuchando a su madre- Una pareja que se quiere, fugitivas, escondidas... Vas a tener una boda sin tarta, sin discursos aburridos, sin la famosa espada para cortar el pastel. Vas a tener la boda más bonita in tutti il mondo. Y ti amo molto, molto.

- Yo también te quiero, mamá –Secándose unas lagrimillas que habían salido de sus ojos- Muchas gracias.

- ¡Venga, a brindar! –Gritó una de las amigas.

Blumettra | LímiteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora