Capítulo 10

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Después de que Sara y Alex se fueran me dispuse a hacer la cena pues mamá no debe tardar en llegar y seguro viene cansada.

Estaba a punto de terminar cuando escucho la puerta principal ser abierta para luego ver a Mamá entrar en la cocina con un par de bolsas.

—Buenas noches cariño — saluda colocando las bolsas en la encimera.

—Buenas noches Mamá — me acerco para besar su mejilla — ¿Que tal te fue?

—Bien — responde — ¿Y a ti como te fue en tu primer día de trabajo?

—Bien, Marco es un niño un poco travieso, pero nada que no pueda controlar — digo poniendo la mesa.

—Mmm, eso huele muy bien.

—Es tu comida favorita — sonrío.

—Pues a comer.

Nos sentamos a comer y hablamos un poco hasta que decido tocar el tema de Evan.

—Mamá — llamo su atención —¿Por qué la familia de Evan se mudo de ciudad?

Frunce el ceño.

—No lo sé. Se lo pregunte a Margaret pero simplemente cambio el tema — se encoje de hombros — ¿Por qué lo preguntas?

—Curiosidad — respondo.

Debe ser algo importante para que ningún miembro de la familia quiera hablar de ello. Ahora tengo más curiosidad.

***

Camino por los pasillos de la escuela con destino a los vestidores de chicas donde quede de verme con Sara. Al entrar me encuentro con ella sentada en una de las bancas viendo su celular.

—Sara — susurro llamando su atención.

Levanta la vista de su celular viéndome con una sonrisa.

—No tienes porque susurrar. Todas las chicas están en clase gimnasia — dice como si fuera la cosa mas obvia del mundo — Tranquila.

—Estoy nerviosa, no quiero que nos descubran.

—Alex ya debe estar afuera vigilando que nadie se acerque. Respira, Todo va a salir bien — me tranquiliza.

—De acuerdo, pero vamos a darnos prisa. ¿Trajiste lo que te pedí? — pregunto.

—Por supuesto. Soy Sara Hall. Siempre consigo lo que me propongo — ruedo los ojos.

—Manos a la obra.

—¿Segura que todo va a salir bien? Aún no veo resultados —digo nerviosa.

—Diablos Sofia, tu definitivamente no tienes ni una pizca de mente criminal — me reprende Alex.

—Perdón por no tener mente de criminal — rueda los ojos.

—Paciencia, no debe tardar en llegar — dice Sara dando una mordida a su sándwich.

Justo en ese momento escucho un par de risas a la cuales cada vez se le van sumando más y más. Rápidamente sigo la mirada de todos hacia la puerta. Oh dios mio, Kara se ve muy...

—Oh miren a Pitufina — dice un chico carcajeándose mientras la señala.

Tengo que apretar los labios para no reír. Se ve muy graciosa. Esta pintada de pies a cabeza de azul y si fuera una caricatura ya estuviera echando fuego por los oídos y nariz.

—La mejor broma que hemos hecho en nuestra vida — dice Sara chocando las palmas con Alex.

—Oigan, ¿No creen que nos pasamos? Esta muy azul — digo mordiendo mis uñas.

Lo que no pasó © (Libro Completo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora