Capítulo 5

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El domingo pasó rápido. Sara había venido en la mañana y le conté lo que hablé con Evan mientras estuvimos en el baño y también me preguntó por lo que había hablado con Agustín. Estudiamos para los exámenes que tendríamos en la semana y luego fuimos a tomar un helado.

Alex también fue para disculparse con nosotras por habernos dejado solas durante la fiesta, y luego de muchas suplicas decidimos perdonarlo con la condición de no volver a hacerlo. Cuando quise darme cuenta ya era de noche y estaba a punto de acostarme a dormir cuando mi celular vibró, avisando un nuevo WhatsApp

Sara : Tengo algo importantísimo que decirte. ¡No puedo esperar a que sea mañana para contarte!.

Yo: ¿Sobre que?

Sara: Mañana te cuento. Buenas noches.

¿Enserio Sara? Ahora tengo mucha curiosidad por saber que es eso tan importante que tiene que contarme.

Apago el celular para caer en un profundo sueño.




***

—Te vengo a recoger a la hora de salida. Hoy salgo temprano de trabajar, que tengas un buen día cariño — dice mamá mientras se estaciona en la entrada de la escuela.

—Adiós mamá — me despido besando su mejilla.

Bajo del auto y me encamino hacia la entrada de la escuela. Al entrar me encuentro con una muy sonriente Sara.

—¿A que no adivinas de que me enteré ayer? — pregunta mirándome, manteniendo su amplia sonrisa.

—Hola Sara, estoy muy bien. Gracias por preguntar — murmuro con sarcasmo a lo que ella rueda los ojos — ¿Y de que te enteraste ayer?

Su sonrisa crece. Si es que eso es posible.

—Agustín le dijo a su prima, que es la mejor amiga de una compañera de laboratorio, que tu le gustas — exclama dando saltitos.

¿Yo le gusto a Agustín Jackson?

—Pero si apenas y he hablado con él.

—Si, pero al parecer eso es lo que dijo. Le gustas.

—No creo que...

—¡Chicas, esperen! — interrumpe una voz a mi espalda.

—¿Que pasa? — pregunto al ver que parecía como si hubiera corrido en un maratón.

—Tuve que correr desde mi casa hasta aquí, porque el auto de mi papá se averió y el bus me dejó, así que era correr o perder la clase con la maestra Powell... — Habló tan rápido a que apenas y lo pude entender.

—Espera Alex... primero habla más despacio y segundo ¿Porque estás tan nervioso? No creo que solo sea por miedo a llegar tarde —habla mi mejor amiga entrecerrando los ojos.

Alex sonríe ampliamente, al parecer hoy es el día de las grandes sonrisas.

—Quería llegar temprano para esperar a mi novia...

—Alto ahí — lo interrumpo — ¿Novia?

—Sí, mi novia.

—¿Desde cuando tienes novia? — pregunta Sara con una sonrisa divertida.

—Desde ayer — responde con una sonrisa, ignorando el tono divertido de mi amiga.

—¿Y quién es la desafortunada? — bromeo imitando el tono divertido de Sara.

Lo que no pasó © (Libro Completo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora