Usame (Startom)

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Cada día en ese castillo me esforzaba por avanzar más en la magia, ya había dominado gran parte de los hechizos de batalla sin varita, pero también cada noche me acordaba de Marco y el hilo rojo que nos unía.

-Ya queda menos -pensé en voz alta.

-¿Para qué Star? -me preguntó extrañado Tom al verme muy seguido sumida en mis pensamientos.

-Para romper el hilo rojo -le respondí agarrándole de la mano y plantándole un beso en la mejilla.

-Escucha -Tom se sentó a mi lado triste- ¿De verdad que quieres hacerlo?...

-Estoy harta de sentirme así por el hilo rojo, por Marco solo siento amistad -confesé.

-Si no quieres separar esa unión-

-Repito, quiero entregarte mi corazón por completo a tí Tom -le interrumpí.

-Pero si tú no eres feliz... -volvió a insistir.

Desde hacía unos días había estado intentando convencerme de que no rompiera la unión a pesar del amor que siente por mí.

-No voy a cambiar de opinión, sabes cómo soy cuando quiero algo -le sonreí.

-Me preocupa que no estés del todo cómoda conmigo...de verdad que deseo estar contigo pero... -su voz empezaba a fallar.

-¿Pero qué? Me da igual, quiero estar contigo y dártelo todo -le abracé.

-¿Y tu familia?...¿y tus amigos?...¿y tu vida?... Tendrías que dejarlo todo atrás solo para poder estar conmigo....

-Bueno, no sería la primera vez que hago una locura jeje -dije para animarle sin soltarle del abrazo.

-Esto es serio Star... -deshizo mi abrazo- soy un demonio...y quiero casarme contigo...

Tal vez era un impulso pero así era yo, actuaba por impulsos.

-Yo también quiero lo mismo -sus ojos se agrandaron ante la sorpresa y aproveché para darle un beso tierno en los labios consiguiendo que de ellos saliera esa sonrisa suya que tanto me gustaba.

-Star si nos casamos tendrás que renunciar a todo... -la sonrisa se borro y otra vez volvió a deprimirse.

-¿Y qué? Tú estás renunciando a mí solo por mi felicidad en la sociedad de mewni -se lo recordé- ¿Crees que me importa la opinión de la gente? Ellos no saben como son los supuestos monstruos pero en cambio yo he salido con un demonio que me ha cambiado la vida para mejor -sonreí al recordar nuestra relación pasada.

-¿E-En serio?

Asentí y sus ojos brillaron durante un segundo por la esperanza pero de nuevo se apagaron. Ya me estaba cansando eso de él pero le comprendía bien.

-Nos queremos y nuestros padres aceptan la relación, yo no veo problema alguno. Además nunca les conté el por qué rompimos y saben que estaba saliendo contigo cuando lo de darle celos a Marco -añadí encogiendo mis hombros.

-¿Lo saben? -preguntó un poco sorprendido.

-Sí, tus padres me llamaron a la semana y me dijeron que pasará lo que pasará cuidara de tí, que soy muy importante para tí y que nadie nunca ha tocado tan profundo tu corazón como para que intentes cambiar por esa persona. En verdad se fijan mucho.

Tom se sorprendió.

-Aparte quiero estar contigo por completo, quiero darte a tí mi corazón, quiero entregarte todo aunque para ello tenga que luchar contra la sociedad. Lo que siento por tí es amor y eso no va a cambiar.

La luz volvió a sus ojos, aquella sonrisa apareció y esos labios tan hermosos me besaron por sorpresa.

-Te amo Tom -le dije desde lo más profundo de mi corazón.

Daría la vida por él si hiciera falta, Tom me enamoraba a cada momento, apenas tenía ataques de ira y cuando se descontrolaba era por algo que le afectara demasiado pero eran muy pocas veces aunque ya no tenía miedo a su ira. En ese tiempo mucho había cambiado entre nosotros, ya no eramos los niños alocados de antes, habíamos madurado un poco más.

Tom era incapaz de hablar, sus sollozos se lo impedían.

-¿Otra vez estás triste amor?

-No es eso -se apartó para limpiarse las lágrimas- es que me haces el demonio más feliz Starship.