Tom y yo nos despertamos por fin de aquello tan extraño, estábamos en el castillo de Ludo, tumbados en el suelo, los sellos parecía que ya le habían dejado de doler porque no brillaban.
-¿Estás bien? -me preguntó preocupado.
-Tom nunca más volverás a estar solo, te lo prometo -le abracé por impulso.
Se quedó sin palabras y le abracé más fuerte para luego besarle en sus labios, pero se le notaba preocupado.
-¿Qué ocurre?
-Huye con Marco...por favor... -me susurró derramando lágrimas.
Aún se encontraba luchando contra ese ser, debía ser difícil aguantar toda esa presión, pero eso no era lo que más me preocupaba sino que él literalmente vivía por mí y yo ni siquiera me había dado cuenta de aquello.
-No -me negué a dejarle solo abrazándole.
-¿Star?
La voz de Marco se escucho débil. Ni siquiera me giré, tenía mis sentimientos a flor de piel, Tom se la estaba jugando por mí pero Marco solo quería separarnos.
-Gracias por dejarme entrar chico -su voz cambio a la del "señor errante".
Marco había sido poseído por las almas errantes.
-Corre -me empujó Tom haciendo un gran esfuerzo por levantarse.
-Vamos, no te pongas así Tom -empezó acercársele.
Del empujón conseguí verle, Marco había cambiado por mucho, su apariencia era muy diferente y sentía que ahora el poder suyo superaba en cantidad al de Tom. También tenía mi varita cambiada, ahora le pertenecía a él.
-Ya eres libre ¿no? -se mantenía en pie con dificultad.
-Pero no del todo, -contestó- además prometí algo al chico -se le acercó del todo agarrando su mano.
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Rápido apuntó la varita a sus ojos hipnotizándole. Yo me quedé petrificada, con ese poder necesitaría ayuda para no dañar a Tom, además de que Marco ahora contaba con mi varita.
-*Tengo que hacer algo* -pensé.
Por impulso le ataque con un poderoso ataque.
-Vaya, aprendiste a no depender de tu varita.
Marco sonrió de medio lado.
-¡¡Deja en paz A MI NOVIO!! -grité decidida a enfrentarle a pesar de la gran diferencia en el poder.
-Tom, agarrala.
Sus brazos me sujetaron enseguida inmovilizándome.
-Marco ¿qué has hecho? -le grité.
-Ese chico me ha cedido su cuerpo princesa -habló el "señor errante" dentro del cuerpo de Marco.
-Ya eres libre -intente liberarme sin éxito- eso querías ¿no?
-Oh tú no lo comprendes...
¿A qué se refería? No tenía ni idea, solo sabía que si no ganaba aquella pelea Tom y yo no íbamos a poder volver estar juntos, quería estar con él, me había enamorado de verdad.
Marco empezó a hacer un círculo de sangre en el suelo.
-Tom traela aquí -le ordenó.
Él obedeció estando hipnotizado y ambos entramos en el círculo.
-Ahora cumpliré mi parte -le habló el "señor errante" dentro del cuerpo de Marco a Tom.
-*Oh no, necesito ayuda...quien sea...* -pensé.
-**¡Star cambiemos de lugar!** -escuché la voz de Dark en mi interior.
¿Cómo es que aún seguía dentro? ¿No se había ido ya?
-**Jamás me fui, pero si mueres yo también, ¡¡dejame luchar!!**
Accedí sin pensármelo, en ese momento mi cuerpo se movía solo, gracias a Dark, me deshice del agarre de Tom con facilidad y luché contra Marco.
