Bueno, Heeyeon. ¿Por qué tanto nervio, niña? Venga, no es nada del otro mundo.
Solamente estás por ver a Suga de nuevo después de haberle comido la boca en el cine, nada raro. Todo casual, digo, cualquiera hace algo así ¿No? Sentir nervios es ridículo, no es como que fuera una adolescente en medio proceso de pubertad, ya mis hormonas se habían tranquilizado un poco cuando superé esa bendita etapa, ahora eres una adulta hecha y derecha que no tiene por qué sentir que el corazón se le va a salir de la garganta por ver a un tipo que besaste y que, de paso, te caga la existencia a pesar de eso.
¿A quién intento engañar?
¿Cómo no iba a sentir putos nervios?
Estaba aquí, fuera de su apartamento después de haber cumplido con el cuidado de Danny por el día de hoy, pensando en las palabras de Hyebin el día anterior, meditando que quizá no sea tan malo después de todo darle una...oportunidad al chico sobre conocerle mejor y dejar atrás ese jodido odio irracional, solo tenía que insultarlo menos, decirle que voy en son de paz porque ya estaba harta de tanta mala vibra en mi ser, que me había gustado ese maldito beso y que por supuesto...
También tenía ganas de follar con él hasta el cansancio.
Okey, tal vez eso no se lo diría tan directamente, tampoco es que tengo planeado ir de impulsiva a darle un sentón apenas me abra la puerta, todo con calma, no hay apuro, el mundo no se acaba mañana...o eso espero. Lo primero que le diría es que he decidido atreverme un poco y que he caído en la conclusión de que experimentar no me hará perder nada, justo como mi querida cuñadita me ha aconsejado.
Tal vez estoy pensándolo demasiado, estoy comportándome como si fuese la primera vez que voy dispuesta a intentar algo con alguien. Heeyeon, reacciona ¿Quieres? No es un tipo que conociste en Tinder, a Suga lo conoces más que bien y más de lo que deberías, vaya, a él ya le has visto hasta como Dios le trajo al mundo, aunque no precisamente en la situación que tanto deseaba, pero ese no era el punto. El punto es que ya sabes qué esperarte de él, no tienes la necesidad de martillarte tanto la cabeza pensando en qué estaría bien decirle o que no, pues él también te ha visto a ti en muchas facetas.
He de parecer una estúpida aquí de pie fuera de su casa, es una suerte que estas calles sean poco concurridas, las urbanizaciones de aquí son solitarias, de haber sido en Corea ya la gente me estaría subiendo a Naver como la loca de la carretera o yo que sé. Dios, cuanto odio ponerme a pensar en tantas estupideces cuando estoy nerviosa ¿Por qué soy así? Joder, cada día que pasa siento que mi salud mental va en caída libre, mis descendientes me meterán a un asilo a los cincuenta si sigo en estos pasos.
Mis piernas no se movían y ni siquiera suspirar repetitivamente me calmaba...verdaderamente estos nervios son insanos. A ver, pendeja, piensa algo que te pueda hacer sentir menos inquieta, yo que sé, piensa en Danny y la vez que casi te hace perder el trabajo con su indiscreta inocencia, o cuando Hyebin se emborracha y quiere que Jungkook le cante canciones de cuna. Vale, quizá eso está sirviendo...
Me carcajeé silenciosamente porque toda esta mierda me estaba pareciendo absurda, joder, Heeyeon, ¿Quieres dejar de reírte sola? Ahora si que se te fueron los humos, vaya. ¡Ya toca la maldita puerta de una puta vez!
Me enderecé y me obligué a seguir las ordenes de mi querido subconsciente, poniendo mi mejor cara de seriedad mientras tocaba el timbre y me alejaba unos pasos, traté de adoptar una postura más relajada para que no se notara que hasta hace pocos segundos andaba como estúpida muriéndome de unos nervios sin sentido. Vale, quizá acomodarse el pelo a lo loco no te hace ver demasiado natural, Heeyeon, mierda, es que en serio doy pena ajena.
Escuché pasos acercarse, sentí que mi corazón se detenía por unos segundos y luché con mis fuerzas internas para que esto no se me notara en la cara, que puta vergüenza iba a pasar si Suga nota que estoy así de nerviosa por él.
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Sugar and Honey ↔ MYG ff. ✔️(Terminada)
FanfictionCuando se habla de sarcasmo, humor negro, honestidad en su máximo esplendor, lenguaje hiriente y actitud despreocupada, hablamos exactamente de Jeon Heeyeon y Min Suga. Dos personas que comparten la misma nacionalidad, el mismo carácter y el mismo s...