Estaba tan puto nerviosa últimamente.
Joder, si, que es bastante usual que lo esté, digo, para paranoica extrema estaba mandada a hacer, era normal en mi que me sintiera con los nervios de punta al menos una vez a la semana y por los asuntos más ridículos que se me podrían ocurrir. Así estuviese a punto de hacer la mierda más trivial de todas me ponía a temblar como caniche, una vez me puse inquieta porque una maldita paloma me estaba persiguiendo en la plaza mientras cuidaba de Danny. No faltaron miradas de pena y desdén de los transeúntes ingleses, ya me había acostumbrado a que me vieran así.
Podría llegar a asegurar que esa paranoia que siempre cargaba conmigo para todos lados y para cualquier cosa que fuese a hacer de la que no estuviese acostumbrada, se remonta a los días en los que Jungkook era un drug-dealer en Seúl y vivía con el miedo de que llegaran a mi apartamento a secuestrarme, violentarme o cualquier rollo extraño en el que mi hermanito se pudiera haber metido. Se intensificó con la enfermedad de mi madre y Hyebin siendo una fugitiva y alojandose en mi casa, me terminaron de traumar la pobre mente.
Ahora cargaba con las malditas secuelas a todos lados, me ponía nerviosa por toda mierda. Ahora mismo, estaba mordisqueandome el labio inferior porque iba en camino al conservatorio a llevar a Danny a sus clases de piano y era la primera vez que veía de nuevo a Yoongi -que bonito acostumbrarme a llamarlo por su verdadero nombre, joder-, después de lo que pasó en el apartamento de Hyebin.
Por otro lado, el notición de que mi cuñada estaba con siete semanas de gestación llevando un crío en el vientre que creó gracias a mi hermanito menor, era otra de las razones por las que estaba tan abrumada. Porque además, me había pedido que la acompañara a su primera jodida consulta con el ginecobstetra, maldición, me siento como si yo fuese el padre de esa criatura ¿Cómo no sentirme nerviosa? Capaz sea una mierda de hermanos que sienten lo mismo que el otro. ¿No? Se han visto casos.
Ambas razones podían darse la mano si discutieran sobre mi estado emocional actual, sin embargo, podía llegar a decir que la razón de Yoongi llevaba una ventaja considerable, en especial porque era la primera a la que iba a enfrentar. Caer en cuenta que iba a verlo conllevaban varias reacciones en mi cuerpecillo de caniche, la primera: Iba a querer besarle la boca allí mismo frente a todos esos niños a los que dejaría traumatizados si lo hago como quisiera hacerlo, y segundo: Tendremos que hablar ¿No? Íbamos a hablar, puede que no sea precisamente sobre nosotros pero igual tenía que compartir palabras con él.
Y después de aquel extraño pero funcional método para "conocernos de nuevo", sentía que muchas cosas cambiarían a partir de ahora entre nuestras usuales conversaciones.
Por alguna razón, si había algo que deseaba mantener intacto era lo bien que a veces nuestro sentido del humor compactaba entre sí. Quería poder seguir hablando con él trivialmente como lo hacíamos a veces, obviando claro está, las discusiones irracionales producto de aquellas diferencias de las que, por nunca habernos conocido bien, nunca pudimos dejar a un lado.
Hasta ahora. Porque gracias a lo que había ideado, esas discusiones iban a quedar en el olvido. Quería confiar en él, en su forma de ser honesto y sincero, en cómo buscó la manera de intentarlo por más resignado que se veía y en la forma tan apasionada y cargada de sentimientos con la que me besó.
No me iba a arrepentir. Y me aferraba con ansias a esa idea ya que jamás desde que lo conozco, había percibido esa transparencia en él.
Lo ví apoyado en el umbral de la puerta del salón mientras caminaba en su dirección con Danny tomando mi mano. Era bastante temprano, había venido con media hora de anticipación solo porque quería tener más tiempo para charlar con él o si no tendría que esperar en la tarde a que se desocupara y yo llegara de la cita al médico con Hyebin. El pobre Danny fue el que más peleó cuando lo levanté tan temprano, pero valió la pena el berrinche.
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Sugar and Honey ↔ MYG ff. ✔️(Terminada)
FanfictionCuando se habla de sarcasmo, humor negro, honestidad en su máximo esplendor, lenguaje hiriente y actitud despreocupada, hablamos exactamente de Jeon Heeyeon y Min Suga. Dos personas que comparten la misma nacionalidad, el mismo carácter y el mismo s...