Cap.23

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Leeteuk miraba con una amplia sonrisa a su amigo rubio, el cual le contaba con emoción y alegría todo lo que estaba pasando con respecto a Sungmin. El mayor podía notar en sus simples palabras que amaba tanto a su hermano, quizás más que el propio Kyuhyun. Sonrió ante tal pensamiento bobo, sabía que Kyuhyun amaba demasiado a Sungmin, pero era diferente el amor, el de Eunhyuk era amor de hermano.

Aún así, seguía siendo amor, y eso le alegraba.

- ¿Y para cuándo está de vuelta?.

- Falta un tiempo largo, meses, mesecitos. Él quiere terminar su último año allá en este tiempo que queda y contactar de nuevo con la beca que tenía acá y poder estudiar la universidad. Además él quiere darle una sorpresa tanto a Wookie como a Kyuhyun. Está muy emocionado por eso.

- Sí, me lo imagino. Todos lo extrañamos mucho. No me sorprendería el hecho de que a ambos les caería muy bien la llegada de Sungmin.

- Sí - murmuró el más joven con una sonrisa más ligera, igual él estaba muy emocionado por la llegada de su pequeño hermano.

En su cabeza rondaba siempre una pregunta que desde tiempo atrás quería que fuera respondida. Y sin pensarlo dos veces, la curiosidad le ganó y cambió repentinamente el tema al preguntar su duda, misma que sorprendió al castaño.

¡Era un ser humano!. ¿A quién no le ha pasado que hablan de un tema y cambian a otro sin darse cuenta?.

- ¿Leeteuk acaso, Kyuhyun y Wookie....son novios?.

Cómo antes se había mencionado, el interrogado se mostró sorprendido, muy sorprendido. No era que no sabía qué responder, sino que la repentina pregunta lo había dejado perplejo, pues simplemente Eunhyuk se mostraba entre curioso y serio. Jamás había recibido una pregunta cómo esa de su amigo.

Abrió la boca para responder, ya que muchas veces pasaba que al quedarte callado por un tiempo se podría mal interpretar, y eso pasaba y pasa las mayorías de las veces en las que uno se tarda en responder. Iba a hacerlo, las primeras dos letras de la palabra que iba a crear estaba a punto de salir de su boca, pero inesperadamente una pantufla voló hasta dar en los cabellos amarillos de su acompañante, haciendo que éste lleve su mano a la zona golpeada y forme una mueca de extrañeza, pues claro, el material de una pantufla era suave, por lo que no causaba dolor. Aunque sí le extrañó el hecho de aquella acción.

Obviamente, como toda persona hace sin darse cuenta, voltearon a ver el punto de donde había salido el zapato. Claramente habían olvidado que en el departamento los acompañaba una tercera persona, el cual se encontraba parado en el segundo piso al inicio de las escaleras.

Con sus brazos cruzados, Yesung mantenía en su rostro una reacción indignada, su boca semi abierta y sus cejas lentamente fruncidas fue la reacción que había tomado ante la pregunta que momentos antes el amigo de Leeteuk le había hecho al mismo.

¿Cómo se atrevía?.

Gracias a las películas románticas que veía seguidamente llegó a conocer muy bien lo que la palabra "novio" significaba, y estaba seguro de que su pequeño, suyo, no era novio de Kyuhyun. Y por alguna razón, se sintió bien al lanzarle su zapato al chico, pero creía que no era suficiente.

Bajó rápidamente las escaleras para empezar a negar con las dos manos en la cara del rubio, queriendo dar a entender que su pregunta tenía una respuesta negativa, sí, negativa. Negaba y negaba, señalandose a sí mismo en ocasiones. Obviamente algo quería dar a entender, lo malo era que ninguno de los dos chicos lo entendía. 

Pero simplemente, Wook no era novio de Kyuhyun. Y tampoco quería que lo fuera.

- Yesung, qué haces así - la voz preocupada de Leeteuk interrumpió la explicación, si así se le podía llamar, que Yesung le daba al visitante - No es bueno salirse así del baño, te puedes enfermar.

Y ahí estaba la voz autoritaria del mayor, aquella que hacía temblar al muñeco y sonreír a Eunhyuk. Pero como no iba a llamarle la atención.

El pelinegro lo único que traía era una pequeña toalla enredada en su cintura que cubría su intimidad y parte de sus piernas, más en lo que restaba de su cintura para arriba estaba totalmente descubierto. Además de su cabello caían pequeñas gotas del agua e iban directamente a su espalda o pecho.

Realmente, ahora que lo veía bien, Yesung no era nada feo, muy a lo contrario, era demasiado atractivo. Pero eso no quitaba que fuera un descuidado.

- Vamos a la habitación, Yesung. Te buscaré tu ropa - y ante esas palabras, Eunhyuk levantó una ceja con sarcasmo.

- ¿Le vas a buscar su ropa? Pero si ya está demasiado grande para hacerlo él solo. No entiendo.

- Es- es que...- ocultó su nerviosismo con una chillona risa -..le cambié sus ropas de lugar y ahora no sabe donde se encuentra cada prenda. Tengo que enseñarle el nuevo orden.

Se mantuvo en silencio por unos pares de segundos, y aún no muy convencido, Hyuk asintió con la cabeza dejando salir un suave y bajo "ya veo".

- Ya vuelvo. No te vayas. Regresaré en unos momentos.

- Tranquilo, no me iré. ¿Me invitas un vaso de agua?.

- Y de paso tomas una manzana, estás demasiado flaco - el menor no pudo hacer otra cosa más que entre cerrar los ojos y mirar entre sus pestañas al castaño.

- Si de flacos hablamos, es mejor que no digas nada. Hyung, has bajado como seis kilos en un mes. Tú igual deberías comer.

El mayor se mostró indignado, ofendido, claro que no había bajado de peso, ¿O sí?. Empezó a tartamudear tratando de responderle al chico, pero al no encontrar una respuesta, se dio por rendido.

- Sólo cómete la manzana y no digas nada.

- ¡Ahg, está bien!.

Esperó pacientemente a que su amigo desaparezca por la puerta de la cocina, para después, tomando por sorpresa al pelinegro, empujarlo con suavidad a la habitación del pequeño.

Al entrar, se fue directamente al armario para buscar unas prendas que Kangin le había traído al volver de su trabajo, recordaba como Yeye se había puesto tan feliz que incluso abrazó al mayor.

Eso sin duda había sido otros de los momentos inolvidables.

- Toma, Yeye. Cólocate esto - dijo dándole la ropa. Sonrió al ver cómo se lo empezaba a poner. Lo miró con confusión, Yeye se había detenido en seco cuando se colocaba las ropas, comentaron sus miradas, y ahí Leeteuk pudo entender. Volvió a sonreír y sin más, se dio la vuelta - Tranquilo, ya no te veo.

Al escuchar los ruidos que le indicaban que Yesung comenzaba nuevamente a vestirse, amplió mucho más su sonrisa. Parecía que Yeye ya estaba agarrando poco a poco la vergüenza.

Y cada día que pasaba, se convertía en un ser humano.




















Ya que estoy de vacaciones, trataré de actualizar más seguido mis pequeñines, no les prometo nada, pero haré todo mi esfuerzo.
¡¡L@s Amo!!.
Ustedes y yo volveremos a leernos en unos días ;)
Adiós!.

PD: Denle mucho amor a super junior, nos necesitan. Sungmin, Kangin y Leeteuk más que nadie.  Recuerden que SJ y ELF somos una familia hermosa y verdadera💙

Mi Muñeco [YeWook] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora