Mi Muñeco [YeWook]

Cap. 1

Ryeowook caminaba por la escuela con una gran sonrisa en su rostro, una sonrisa inexplicable. Tenía que buscar a Sungmin y contarle sus últimos acontecimientos. Kyuhyun le había dicho palabras suficientes para estar feliz y eso tenía que contárselo a su mejor amigo.

"Ryeowook, tú eres muy hermoso, tienes un cuerpo deseable y una carita linda, eres capaz de enamorar a cualquiera, a cualquiera...".

No pudo evitar sonrojarse al recordar las palabras de Kyuhyun, se lo había dicho todavía el viernes y en todo el fin de semana no pudo cerrar ni un ojo por estarlas recordando, tal vez Kyuhyun le había dicho una indirecta para decirle que le gustaba. Sonrió bobamente, por fin podría tener una oportunidad con el chico de sus sueños.

Se le hacía raro no encontrar a Sungmin por ninguna parte, ¿dónde estaría?, miraba por todos lados para poder localizarlo, moría por contarle lo sucedido. Sus pasos se detuvieron y sus piernas empezaron a temblar, sus lágrimas no tardaron en acumularse en sus ojos, Sungmin y Kyuhyun se estaban besando, se estaban besando desesperadamente, sintió un cuchillo atravesar su corazón y lo peor es que su propio amigo se lo había clavado, ¿por qué él?.

Con pasos temblorosos se empezó a acercar a ellos, sus labios imitaron la acción de sus piernas al ya estar junto a ambos, sus lágrimas no aguantaron más y se desplomaron por sus mejillas bañándolas completamente, sus labios comenzaron a emitir sollozos que llegaron a los oídos del rubio y castaño haciendo que se separen. Sungmin abrió los ojos y se alejó de los brazos de Kyuhyun volviendo a mirar al pequeño.

- Woo..Wookie~ yo...

- ¿¡porqué me hiciste esto Min!? - gritó entre el llanto, ganándose la mirada de varios alumnos que pasaban por su lado, aún así no le importaba, su dolor y la traición de su amigo eran más grandes que su vergüenza - ¿por qué? - terminó con un susurro.

- Wookie, déjame explicarte..

- ¡No tienes que explicarme nada! - volvió a gritar tratando de secar sus lágrimas pero por cada vez que las limpiaba salían muchas más - tú sabías que Kyuhyun me gusta desde primero, sabías que estoy enamorado de él, ¡lo sabías!.

- pero si me dejaras explicarte..- nuevamente Min fue interrumpido por el pequeño.

- Ryeowook por favor escucha.. - intervino Kyuhyun.

- ¡no quiero!, ¡no quiero escucharlos más!, ¡¡no quiero!! - su llanto retumbó entre las personas cuándo corrió lejos de ellos a dirección de la salida.

- ¡Wookie! - gritó Min tomando su mochila y yendo tras él, Kyuhyun no se sentía bien por haberle hecho eso al menor así que corrió tras ellos. - ¡Wookie por favor espera! - escuchaba a Sungmin gritar.

Al llegar a la esquina pudo notar al rubio ir detrás de un autobús, Wookie ya se había subido y lógicamente no lo iba a alcanzar, pero al que si podía alcanzar era a Sungmin y así lo hizo, lo tomó del brazo deteniéndolo, le secó las lágrimas que se desplomaban por sus mejillas y lo abrazó, ambos se sentían los villanos del cuento, Sungmin sentía la tristeza llenar todo su ser, sabía bien que a su amigo le gustaba Kyuhyun y por la misma razón no le había comentado de su relación con él, por miedo a lastimarlo, nunca quiso que se enterará de esa manera, se aferró más al castaño queriendo que su amigo regresara.

...
...

El pequeño se bajó del autobús y camino a su departamento con la cabeza baja sintiendo sus lágrimas correr por su cuello, sentía tanta melancolía y debilidad, se supone que Sungmin era su amigo, ¡su mejor amigo!, ¿porqué lo había traicionado con la persona que gustaba?, subía las escaleras con pasos débiles, se sentía inútil y traicionado, cómo un cero a la izquierda.