CAPITULO IV

1.1K 112 9
                                    

°●Sentimientos●°

Nos encontrábamos sentadas en unas rocas muy lejos de la fiesta. Cuando por fin me calme lo suficiente para poder hablar. No me percate a qué hora aparecieron. Pero me sentí afortunada por tener amigas como ellas.

- gracias chicas. -Logre decir con la voz algo descompuesta y entrecortada.

- de nada para eso estamos las amigas. -Dijo Nancy.

- ¿pero qué le pasa a tu hermano y a esa tía tuya? ¡Están locos! -reprochó Meredith.

- ¡no creo que ellos lo hicieran por hacerle el mal a Leah! -Intervino Nancy.

- ¡ay Nancy tu sí que eres tan incrédula! ¡¿Entonces dime con qué fin lo hicieron?! -le reprocho Meredith.

- pues no lo sé pero...

- ¡ya chicas por favor dejen discutir por eso! Sé que no lo hicieron con ninguna mala intensión, Seth no sabía quién me dio ese vestido y mucho menos la tía. -Intervine. Y al hacerlo me percate

Me alarme un poco, pues veía borrosas a Nancy y a Meredith, temía desmayarme. Pero nunca en mi vida me había desmayado, así que no le di importancia.

- está bien, disculpo a Seth. ¡pero tu tía es otra cosa! es el ser más imprudente, insoportable y extremadamente metiche. ¡¿no sé como la soportas?! ¡Yo ya le hubiera dicho unas cuantas verdades! -Emitió Meredith molesta.

- ¡pero Leah! ¿te encuentras bien? -Me pregunto Nancy.

Por qué me lo preguntaba de esta forma, en su voz había un ligero pero evidente tono de angustia y dolor.

- ¡pues claro que estoy bien! -Balbucee.

- ¡venga Leah! No te hagas la fuerte con nosotras. Te conocemos bastante bien. Y no tienes que reprimirte. -intervino Meredith.

- ¿de qué están hablando? -respondí todavía con la voz entre cortada.

- ¡desahógate Leah, te hará bien! -Susurro Nancy.

Al terminar de decir estas palabras, comprendí que hace un momento no me iba a desmayar como pensé, sino que no podía ver a mis amigas porque tenía los ojos llenos de lágrimas. Y de repente se deslizaron por mis mejillas a tal velocidad. Que fue en vano mi desesperado intento por detenerlas.

- ¡vamos Leah! ¡Nunca! te creí el papel que te creaste. ¡Ese de chica dura y que no te afecta nada!... ¡Pero sinceramente preferiría que lo adoptaras ahora! -Dijo en tono sarcástico Meredith.

Pero al darse cuenta que su broma no tuvo el efecto que deseado, y que yo seguía sin poder parar de llorar. Se abrumo en gran parte por las miradas de reproche que le dedico Nancy.

- lo siento Leah, no lo dije con malas intenciones... es, es sólo que... ¡rayos Leah no puedo entender por qué permites que te siga haciendo daño ese estúpido! -Dijo finalmente Meredith.

- ¡no entiendes nada Meredith! -Dije entre sollos, - ¡No es solo Sam! ¡estoy así por todo! Todo lo que deje que le pasara a mi vida, si se le puede llamar vida... me la he pasado causando lastima a todo mundo...deje de ser yo misma para ser una persona. Una persona amargada y llena de rencor. ¡Me olvide de mi familia! ¡De ustedes y...!

ENTRE LAS SOMBRAS©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora