1| MY ONLY DEFENSE ||teen wolf [ᴍᴏᴅ]

Extras + Segunda temporada.

Una aclaración antes de leer: todos los flashback estarán narrados en distintas voces que iré aclarando a medida que sucedan. No sólo para despedirnos de la primer temporada, sino para dar datos de la siguiente.

Habrá explicaciones que tendrán sentido ahora o más adelante.

1. Tres Chiflados.

Stiles's POV.

-If you want my future... Forget my past...

Tarareaba mi canción favorita super-secreta yendo a la casa de mi mejor amigo a quien le había dejado 10 mensajes. 10.

Aunque verdaderamente él no es el único amigo que tengo. Por desgracia también hay una chica. Se llama Samantha.

No es la más bella de todas desde 3er grado cuando comenzó en la misma escuela que Scott y yo. Deberían verla: Tiene braquets que le quedan algo mal y unos ojos cafés preciosos pero están ocultos tras unas gafas negras y gigantes. Su cabello es de un rubio brillante y desde lejos sin tocarlo sabes que es el pelo más sedoso que jamás hayas visto.

Siempre éramos los tres. Tres locos contra el mundo. Pero... debo decir que nuestra amistad se forjó una manera muy rara, y con ello, me refiero a Samantha.

Para empezar, ¿Qué padre es tan loco como para permitir que su hija de cinco años quien es algo machona juegue con un arma?

Definitivamente el padre de Sam.

Y siguiendo la pregunta, ¿Qué padre es tan idiota como para permitir que su hijo también de 5 años quien es supercurioso fuera con él a la comisaría?

Claramente Noah Stilinski, mi padre.

*Inicio FlashBack*

(Narrador omnisciente)

-¿Por qué tengo que ir? -pequeño Stiles miró a su mamá en busca de ayuda para liberarlo de la situación con Noah pero ella sólo se dedicaba cocinar.

Pensé que me amaba...-habló apenado en su cabeza.

-Porque es el Día de padre e hijo -se excusó pero al ver que no me comía el verso, suspiró pesadamente y se agachó para quedar a mi altura. -Sé que no quieres ir, Miec...

-Stiles -realmente odiaba a su primer y único nombre. Comenzó a exigir que lo llamaran por el apodo de su querido abuelo.

-Pero tu madre no puede quedarse a cuidarte -continuó - Hoy es su entrevista de trabajo.

Pequeño Stiles hizo un puchero como cualquier niño de 5 años y se cruzó de brazos. Al ver que no cedía ante él, miró a su madre quién escuchaba atenta la conversación.

Ella se acercó al niño y apenas inclinó su cabeza para quedar enfrente cara a cara.

-Mostramos una sonrisa- le ordenó con dulzura y no pudo evitar hacerlo-. Sacamos pecho al frente -obedeció sonriente-. Y ahora acompañamos a Papi a la comisaría ¿Sí?

Aún sin estar convencido, Stiles asintió y su madre conforme, le sonrió cálidamente.

-Buen chico -frotó la mano sobre el cabello del pequeño, como si fuera un perrito.

A Stiles no le importaba si era un perrito para ella. Él era feliz. Su madra era la única figura que amaba, así como todos los niños. Pero su relación afectuosa era diferente.

A los segundos lo único que llegó a los oídos de Stiles fue el leve ruido de la puerta cerrándose. Dejando así un silencio incómodo.

-Vamos hijo, llegaremos tarde.