-¿Dónde dejo las cosas? -pregunta Ed.
-¿Por qué mierda preguntas, Ed? Es tu casa. Ya hasta tienes tu propio cuarto.
-Hay personas que tienen un poco de cortesía, Laura. -responde divertido.
Le fulmino con la mirada y él comienza a subir las escaleras mientras ríe.
-¿A dónde vamos a ir? -pregunto una vez que ha bajado.
-Primero a comprar las cosas y luego, supongo que iremos al Starbucks.
Asiento contenta. Me encanta el Starbucks.
Voy hacia el despacho de mi madre y abro la caja fuerte. Saco el dinero que creo que va a ser necesario y, después, vuelvo a cerrarla.
-Vámonos.
La tarde pasa bien. Hemos comprado todo lo que, de momento, necesitábamos.
-¿Y qué tal vuestro primer día? -pregunta Paula.
Paula y Dani, otros dos amigos, van a bachillerato por lo que no se encuentran en el mismo sitio que nosotros.
-Me ha tocado un profesor de matemáticas que está buenísimo. -digo mientras muerdo mi labio.
Todos a mi alrededor ríen y puedo escuchar como Ed bufa.
-Es un pedófilo. -dice.
Me encojo de hombros y le pego un sorbo a mi Cappuccino.
-Va a darle clases particulares a Laura. Así, sin evaluarla siquiera.
-Uy, Laura, ese hombre quiere un trabajito manual para aprobarte. -comenta Dani.
Daniel es el chico más pervertido que existe en la Tierra. Lo puedo asegurar.
-Bueno, si hay que hacerlo, se hace. -bromeo.
Finalmente, a las ocho y poco de la tarde, Ed y yo nos vamos hacia mi casa.
-¿Qué tal si vemos una peli de miedo? -pregunta Ed mientras se tira al sofá.
-Sabes que luego nunca consigo dormir. -se encoje de hombros y sonríe.
-Pues duermes conmigo.
Suspiro y asiento. Ed sale corriendo a por mi ordenador para buscar la película y yo me dedico a llamar por teléfono a un chino para cenar.
Cuando hemos acabado de cenar ponemos la película de miedo y yo abrazo a un cojín.
-¿No prefieres abrazarme a mí? -se burla Ed.
-Cállate o te golpearé. -suelta una carcajada.
Apoyo mi cabeza en su hombro y sigo viendo la película. Finalmente, Ed acaba con su mano por detrás de mis hombros y yo con mi cabeza enterrada en su pecho cada vez que ocurre una escena de miedo.
-Menos mal que ya ha terminado. -murmuro.
-Ha estado muy guay.
Asiento, aunque no pienso lo mismo.
-Me voy a dormir.
-¿Sola?
-No soy una cobarde.
Caso error. Sí que lo era.
Son las cuatro de la mañana y no paro de escuchar ruidos y de imaginarme sombras por todos lados. Me levanto de mi cama con cuidado y comienzo a correr hacia el cuarto de Ed. En mi trayecto choco contra un cuerpo.
Grito al instante y puedo escuchar como la otra persona ríe.
-Laura, soy Ed.
Le abrazo al instante y él ríe.
ESTÁS LEYENDO
Él, mi profesor
أدب المراهقينCuando él entraba en clase, sonaba un ruido extraño, como un martillo apaleando la pared. Solo era el corazón de ella, no explotaba por centésimas.