Capítulo I

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Como ya era su costumbre, de nuevo se encontraba en la dirección esperando a que hombre viejo frente a él terminará de reprenderle. Eran tan constantes sus visitas a esa pequeña oficina, así como los regaños que el hombre le daba, que ya todo era tan familiar para él. El hombre todo el tiempo repetía lo mismo porque pues siempre era la misma razón por la que el joven Kim HanBin era enviado a la dirección, dormir en clase, no poner atención, desobedecer a sus profesores. Siempre era lo mismo.

Una vez que el regaño terminó, HanBin salió de la oficina. Ya era hora del almuerzo por lo que salió del lugar para ir directamente hacía la cafetería donde seguramente se encontrarían sus amigos.

Caminó por los pasillos de aquel instituto saludando a algunas personas a su paso. Algunos chicos simplemente trataban de esconderse cuando veían que HanBin se aproximaba. No es que el chico fuese un chico malo pero las personas le temían al tener la clase de amistades que tenía y aunque él realmente no le gustase lastimar a los demás, en muchas ocasiones se veía envuelto en peleas con otros chicos del instituto o con otros chicos revoltosos de su vecindario.

HanBin sabía la reputación que tenía y le gustaba, era popular y nadie se metía con él, así que además de su reputación también le daba más realismo con su manera de vestir. Su camisa del uniforme siempre la traía desabrochada y nunca se fajaba correctamente. Su expresión indiferente o su mirada penetrante intrigaba a algunos mientras que a otros los asustaba. Y bueno, no sólo él causaba esas reacciones, también su grupo de amistades.

Cuando llegó a la cafetería, abrió las puertas de manera estruendosa haciendo que todos voltearan en su dirección. Amaba que hicieran eso. Caminó bajo la mirada de sus compañeros hasta la mesa que les pertenecía porque todo mundo sabía que era suya. A si ninguno de sus amigos o él fuera a sentarse ahí. Nadie debía hacerlo o de lo contrario recibía una dura paliza después de clases.

Se acercó a la mesa y se sentó al lado de JiWon sin decir palabra. Todos los ahí presentes lo miraron un momento antes de que YunHyeong se levantara de la mesa sin decir nada.

— Te dije que no debías hablar por teléfono en clase — dijo JiWon sin apartar la vista de su sándwich.

HanBin sólo se encongió de hombros. Realmente no le importaba mucho que lo hayan enviado a la dirección.

— Ni se te ocurra decir eso delante de YunHyeong — advirtió HanBin a JiWon.

En ese momento YunHyeong volvió con una bandeja de comida que dejó frente a HanBin y se sentó.

— Lo siento — susurró mirando a HanBin. — Come. He traído eso para ti.

HanBin volteó a verlo dibujando una pequeña sonrisa en sus labios. Tomó su sandwich y comenzó a comer por lo que YunHyeong también sonrió y continuó comiendo.

Por su parte Mino miró sin entender aquella escena y volteó a ver a Seung Yoon en busca de una explicación. La cual no obtuvo pues el chico no había entrado a sus primeras clases. Mino recurrió a la segunda opción, JiWon.

— Explícame — dijo en busca de su tan ansiada respuesta.

— YunHyeong se quedó dormido y llamó a HanBin para que le avisara al profesor pero antes de que pudiera darle el recado el señor Oh lo mandó a la dirección por usar su celular en clase — Explicó JiWon para luego volver a poner su atención en su comida.

— Fue mi culpa — comentó un apenado YunHyeong.

— No es como si fuera la primera vez que me mandan a la oficina del director — respondió restándole importancia al asunto.

I LOVE YOU || BinHwan - YunBinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora