Batalla.

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Yuuri estaba cansado eran casi las cuatro de la mañana, pensó que Víctor ya estaría dormido pero lo encontró cortando y emparejando los últimos mechones de cabello largo, era quizá la mayor perdida en el mundo, pero eso debía suceder, no podía and...

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Yuuri estaba cansado eran casi las cuatro de la mañana, pensó que Víctor ya estaría dormido pero lo encontró cortando y emparejando los últimos mechones de cabello largo, era quizá la mayor perdida en el mundo, pero eso debía suceder, no podía andar con el cabello echo un desastre.

- Extrañare esto – dijo mientras tomaba los mechones y los ponía en una bolsa de tela.

- Es lo único bonito que tenia – declara el mayor y Yuuri se molesta.

- No es verdad, mas que tu cabello, me gustan tus ojos y el color de tu piel.

- No tienen gracia – vuelve a rebatir el alago de Yuuri.

- Estas siendo muy difícil de consolar – le reprocho él – pensé que las cosas cambiarían cuando volvieras a ser tu mismo.

- ¿Cómo te diste cuanta?

- Soy un alfa y por sobre todo tu esposo, lo note cuando entre al baño.

- Estaba cuidándome.

- Lo se – dijo molesto – pero ya no hay nada que temer.

Él no quería creerle, aun había muchas cosas de las cual temer pero eso no significaba rechazar sus brazos cuando se abrieron en un abrazo o cuando lo levanto y lo llevo al dormitorio, tampoco se opuso cuando retiro casi toda su ropa y se acostó a su lado, no podía recházalo. Quedo confuso cuando Yuuri simplemente se recostó a su lado, lo abrazo pero no intente nada.

Mañana lo movería a la casa principal, donde mas personas pudieran cuidar de él, había aprendido mucho ya casi cumplían el año de matrimonio establecido para la autorización, bajo tales circunstancias, los ancianos dejarían que se mudara. Así fue, la casa re-acondicionada para el matrimonio estaba lista y el piso superior les pertenecía totalmente.

*

*

Unas semanas mas tarde Vichan se movía de un lado a otro demostrando la mejoría que tenia, visitaba todas las tardes la oficina de Yuuri para llevarle la comida y esperaba con el hasta la salida del menor para regresar juntos. En pocas palabras su matrimonio estaba re-iniciando bien.

- Todo el mundo dice que quizá deba escoger una nuevo compañero – escucho decir a una mujer, una tarde mientras subía en el elevador, estaba lloviendo y traía una chamarra que lo ocultaba casi por completo.

- Pero hacen una pareja de lo mas lindo – rebatió la otra – además su familia no lo permitiría, se supone que son muy poderosos.

- Como si son dueños de Rusia – dijo la primera y de inmediato supo que era él de quien hablaban – aun no esta esperando, quizá su edad ya no lo permite

- La belleza no es para siempre después de todo. No me sorprendería que ya lo este engañando.

¿Lo estaban engañando? Yuuri tenia a alguien mas y por eso no lo había tocado o acaso sus encantos se habían ido cuando volvió a reunirse con su lado omega, no era posible, no podía creerlo, estaba seguro que eso no podía pasarle a él, pero ¿había en la tierra hombre o alfa que se contuviera, que reprimiera sus instintos tanto tiempo?

No, el sabia que no lo era, las chicas bajaron unos pisos antes que él y pensó, aun no había una marca en el, al menos no una permanente, un anillo sin una marca, no significaba nada y un matrimonio sin un bebé era sustituible. Así seria, Yuuri lo abandonaría. Quizá ya estaba todo planeado porque ahora se daba cuenta que el había estado distante.

Ni siquiera se dio cuanta cuando entro a la oficina de Yuuri, el de inmediato cerro y comenzó a preparar las cosa para la comida, eso le encantaba, podía presumir con sus amigos que el maravilloso Nikiforov cocinaba para él y lo consentía. Que iluminaba sus tardes y que creaba celos y discordia

- ¿Qué sucede?, desde que entraste estas distraído.

Apenas termino hablar cuando Víctor lo tenia bajo su cuerpo en el sofá donde comían, no, nada lo apartaría de su lado, estaban destinados lo sabia, aun no había amor pero ese sentimiento crecía cada tanto.

- Yuuri, ¿me deseas

- ¿Qué... qué haces?

- Responde – insistió – soy atractivo a tus ojos, aun me deseas.

- Basta, estamos en la oficina, apártate.

- Entonces es verdad, hay alguien mas, me estas engañando.

- De donde sacaste eso...

- No me has tocado desde que Vitya se fue – interrumpió.

- Eso y esto no tienen nada que ver.

- Ya no me deseas.

Víctor se aparto hasta el escritorio y solitarias lagrimas resbalaron por su mejilla. No sabia que hacer, Yuuri no solo era su esposo y compañero, también era su sustento, no podría volver a Rusia con semejante vergüenza, nadie se querría casar con él, no podría tener hijos, probablemente se quedaría cuidando de los hijos de sus hermanos y los de Yuratcka, jamás sabría lo que es ser amado.

Al otro lado de la habitación Yuuri veía al mayor llorar una vez mas, por su causa, ¿Qué le hacia pensar que no lo deseaba? Cada noche desde que se unió a su omega el había estado duro e impaciente pero al recordar las primeras veces nunca se animaba a avanzar, ¿si le hacia daño? ¿si se asustaba con su toque?

Pero debía hacerlo, tranquilizarlo por que incluso creía que lo engañaba y Yuuri Katsuki no hacia eso, el no engañaba, daba y exigía la verdad. Se acerco sin ser descubierto y cuso las manos en sus caderas, haciendo que el mayor detuviera sus lagrimas abruptamente.

- Que no te deseo, no seas tonto, lo hago tan desesperadamente que te inclinaría sobre el escritorio y te haría el amor ahora mismo, solo para hacerte ver tu error.

- Hazlo – le ordeno el – si es verdad que me deseas, si esas niñas estúpidas se equivocan hazme el amor aquí mismo.

No necesito mas, Yuuri aparto las cosas de un manotazo y comenzó a besar desesperadamente a su compañero, no paso mucho tiempo cuando semi-desnudos alcanzaron el clímax, tenían que salir de ahí, no seria suficiente una vez, debían llegar a casa y continuar o seguir en la oficina, pero no lo permitiría todo el mundo sabría lo que habían echo si se quedaban.

- Rayos, debemos ir a casa – dijo el castaño arreglándose el traje.

- Aun falta tiempo para la salida – comento Víctor arreglándose la ropa.

- Debemos irnos ya – lo apresuro él.

Al salir de la oficina ordeno que se recogiera y limpiara la oficina, así la secretaria principal de Yuuri fue testigo de la batalla que había tenido lugar adentro... miro a la pareja sonreír y caminar de la mano hacia el asesor. Estaba feliz, era una niña competente que se alegraba por la felicidad de esa pareja.


***

Les dije que perdí mi archivo y eso era muy triste, pues mas triste es este capitulo que salió con tanto esfuerzo, de verdad no encontraba como seguir la historia, ¿era mejor seguir con la historia anterior o podía cambiar algo...? ¿ traicionaría la historia anterior, podría recuperarla, lo mejor era empezar de nuevo? decidí hacer ambas, seguir la misma historia con algunos cambios...

Fue difícil también por que estuve viendo Kyou Kara Maou (jejejeje) y esa cosa es larguísima, pero esta muy buena..

Perdonen el retraso y gracia por la espera.

byebye❤


Un corazón. (Victuury, omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora