Capítulo 6🍭

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Ha pasado una semana desde que me mudé a mi nuevo departamento y aunque no vivo del todo solo (Georgi vive en el departamento arriba del mío) es genial esta sensación de independencia.

Georgi es un romántico empedernido con un gran sentido de la moda, me ha comprado toneladas de ropa con la única condición que tenga algo de animal print, además en estos días nos hemos vuelto cercanos, incluso me contó acerca de su ex novia, aquella por la que hace dos días se embriagó y gritó como loco su nombre en el balcón del edificio.

"¡Anya, regresa, Anya, te amo!"

Era lo único que repetía hasta que el administrador del edificio y aquel sujeto de cabello plateado lo metieron a su departamento...

Por supuesto fingí no conocerlo en ese instante.

Hablo a diario con Jean, ya sea por vídeo llamada o teléfono, suele ser muy dulce, creo que pensé mal respecto a él, creía que era un chico rico que sentía que por tener una gran riqueza podía hacer lo que le viniera en gana. Pero no.

Por lo que he visto trabaja casi todos los días en la compañía, aun en las noches cuando llega cansado a su departamento se mantiene despierto para hablar conmigo, la diferencia horaria no ayuda mucho... Incluso durante el día se mantiene en contacto conmigo mediante mensajes, se podría decir que hablamos TODO el día. Sé que tiene un amigo que también es su socio dentro de la empresa pero al parecer ambos no son de ir a fiestas o antros, algo sumamente extraño en personas de su edad.

Es muy divertido, además de tener un gran gusto por el rock (algo que compartimos) me gusta mucho tratar con él, conocerlo mejor, se podría decir que me estoy acostumbrando a su "compañía"...

Pero es entonces cuando recuerdo que esto es un negocio solamente.

Por fin llegó el día en el que asistiré por primera vez al colegio donde me inscribió Jean. Es uno de los más prestigiosos (y caros) del país, además de contar con pase directo a la universidad. No puedo decir que extraño mi anterior escuela pues nunca logré hacer amigos desde que Mila se graduó, aparte la mayoría me molestaba con aquello de parecer niña.

Que se jodan.

Georgi llegó elegante y puntual a mi departamento, yo estaba despierto desde hace un par de horas pues me sentía un poco nervioso, de solo imaginar a todos esos niños ricos con los que trataría de ahora en adelante se me revolvía el estómago. Durante el tiempo que estuve trabajando como mesero me topé a infinidad de ellos, esos sujetos que creen que solo por tener dinero pueden pisotear a quién se les dé la gana.

Púdranse.

Tomé mi mochila y nos dirigimos al auto, que según Leroy era mío pero no podría manejarlo hasta la mayoría de edad así que Georgi se ocupaba de eso.

El trayecto fue un poco largo debido al tráfico matutino pero sirvió para calmar mis nervios.

—No tienes por qué sentirte inferior a ellos, al ser el "baby" de JJ eres prácticamente el dueño de su fortuna... y de él también —contestó Georgi dejando escapar una pequeña risa mientras fijaba su mirada en el semáforo, esperando que pronto cambiara de color para seguir nuestro camino, aunque el color actual de éste no se comparó en nada al rojo del que se tiñeron mis mejillas por su comentario.

Rió aún más al notarlo.

—Cállate, yo no soy dueño de nada —gruñí abrazando mi mochila.

—Conozco a JJ desde hace un par de años, somos buenos amigos y en este tiempo no lo había visto cuidar tanto de alguien.

—¿Cuidar? ¿cómo lo haría si ni siquiera está aquí?

Sugar Daddy 🍭(Pliroy)Where stories live. Discover now