5. New friends.

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-Jennifer debes levantarte.

Escucho que alguien me llama a lo lejos pero no le pongo atención.

Me doy la vuelta, y me coloco una almohada en mi rostro para dejar de escuchar.

-No me dejas otra opción. -Dice la voz femenina.

De estar en mi nueva cama de más de 1000 dólares. Pasó a estar tendida en el suelo helado de madera.

-¿Cuál es tu problema? -Grito levantándome del suelo y veo a Natasha cruzada de brazos.

-Te espero abajo en 15 minutos. No llegues tarde. -Se va de mi habitación con movimientos sexys.

Me meto en mi baño propio y me doy una ducha rápida. Me colocó un suéter deportivo con una licra negra. Me hago una coleta y me colocó mis tenis.

Bajo 3 pisos trotando y me topo con todos desayunando en la misma mesa

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Bajo 3 pisos trotando y me topo con todos desayunando en la misma mesa.

Hay dos lugares libre, uno a la par del Capitán y otro a la par de ese lugar libre. Así que me siento en el último lugar.

-Buenos días. -Digo animada.

Casi todos me responden, menos la antipática de Wanda.

Clint me pasa un plato con huevos revueltos y tocino.

No tardó ni un segundo en empezar a comer.

Cuando terminó lo llevo al lavaplatos y lo lavo rápido. Cuando me doy la vuelta está Natasha recargada en la pared.

-¿Nos vamos? -Pregunta sería.

Hago un gesto con la cabeza y caminamos al ascensor.

-¿Dormiste bien? -Dice mi compañera rompiendo el silencio.

-No había estado en una cama tan cómoda. Aunque la chica que me despertó no fue muy amigable.

-Solo fue por hoy, los demás días te levantaras sola. Puedes hablarle a Jarvis.

-¿Quien es?

-Ya lo veras.

Las puertas se abren y dejan ver un gran gimnasio. Hay variedad de máquinas. Hay sacos de boxeó. Cuadriláteros. Esto es genial.

-Ve a la cinta de correr y haz una hora.

No respondo esta perra cree que me mandara siempre. Estas equivocada amiga.

Hay una chica rubia hablando con un tipo.

Pasó de largo y enciendo la máquina haciendo lo que la rusa me pidió.

Ella me habla pero estoy molesta, le subo volumen a la música para dejar de escuchar.

Después de correr una hora, ya siento como las gotas de sudor caen por mi frente.

La bella y la bestia/ Bucky BarnesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora